SlideShare uma empresa Scribd logo
1 de 18
AA
GrandeGrande
CavalgadaCavalgada
Leia o texto com atenção...Leia o texto com atenção...
Num certo dia um paciente de um manicômioNum certo dia um paciente de um manicômio
psiquiátrico bate à porta do diretor do hospital.psiquiátrico bate à porta do diretor do hospital.
Como vai,  doutor? Posso entrar?Como vai,  doutor? Posso entrar?
Claro que sim. O que você deseja?Claro que sim. O que você deseja?
Bem, doutor. Eu quero lhe dar um presente.Bem, doutor. Eu quero lhe dar um presente.
Um presente? Mas que presente?Um presente? Mas que presente?
É um livro. O nome dele é A GRANDEÉ um livro. O nome dele é A GRANDE
CAVALGADA.CAVALGADA.
Muito interessante. Mas quem é o autor?Muito interessante. Mas quem é o autor?
Sou eu, doutor.Sou eu, doutor.
Você? Mas como foi isso?Você? Mas como foi isso?
Estou internado aqui há muitos anos e tiveEstou internado aqui há muitos anos e tive
bastante tempo para escrevê-lo.bastante tempo para escrevê-lo.
Estou muito impressionado. Se você foi capaz deEstou muito impressionado. Se você foi capaz de
escrever um  livro, é porque já está curado.escrever um  livro, é porque já está curado.
Vou assinar a sua alta imediatamente.Vou assinar a sua alta imediatamente.
E o autor do livro foi embora feliz da vida.E o autor do livro foi embora feliz da vida.
Mais  tarde o diretor do hospital iniciou a leitura doMais  tarde o diretor do hospital iniciou a leitura do
livro.livro.
Vide a seguir...Vide a seguir...
(Livro: A grande Cavalgada)(Livro: A grande Cavalgada)
  
Calminha aí, né!Calminha aí, né!
  
  
Que falta de paciência...Que falta de paciência...
Já falei... Já falei... 
  
Calminha aí!Calminha aí!
Enquanto isso,Enquanto isso,
procure se concentrar, pois o livroprocure se concentrar, pois o livro
necessita de muita atenção, para quenecessita de muita atenção, para que
tenha um bom entendimento devido atenha um bom entendimento devido a
sua alta complexidade.sua alta complexidade.
São apenas 178 páginas.São apenas 178 páginas.
Atenção...Atenção...
Muita atenção...Muita atenção...
e concentraçãoe concentração!!
 
Seria bom tomar um chá quentinhoSeria bom tomar um chá quentinho
para relaxar......para relaxar......
Tá bom...Tá bom...
  
Vc venceu...Vc venceu...
  
Aí vai então....Aí vai então....
AA
GrandeGrande
CavalgadaCavalgada
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PocPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocoocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PocPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PocPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocoocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PocPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PocPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocoocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PocotóPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PocotóPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poco
tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.tó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.PoPocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Po
cotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotcotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocot
ó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.P
ocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pococotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Poc
otó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotóotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó.Pocotó
e Pocotó (ufa!)e Pocotó (ufa!)
Um
sorriso
para
você! Criação:
Jacksc018Jacksc018

Mais conteúdo relacionado

Mais procurados

A grande cavalgada som
A grande cavalgada somA grande cavalgada som
A grande cavalgada somrosambf
 
Agrandecabalgada
AgrandecabalgadaAgrandecabalgada
Agrandecabalgadamianso
 
La Gran Cabalgada
La Gran CabalgadaLa Gran Cabalgada
La Gran CabalgadaESPEJO 25
 
La Gran Cabalgada
La Gran CabalgadaLa Gran Cabalgada
La Gran Cabalgadacentrowebs
 

Mais procurados (6)

Agrande cavalgada
Agrande cavalgadaAgrande cavalgada
Agrande cavalgada
 
A grande cavalgada som
A grande cavalgada somA grande cavalgada som
A grande cavalgada som
 
Agrandecabalgada
AgrandecabalgadaAgrandecabalgada
Agrandecabalgada
 
La Gran Cabalgada
La Gran CabalgadaLa Gran Cabalgada
La Gran Cabalgada
 
Lagrancabalgada
LagrancabalgadaLagrancabalgada
Lagrancabalgada
 
La Gran Cabalgada
La Gran CabalgadaLa Gran Cabalgada
La Gran Cabalgada
 

Mais de Edmir Tavares de Arruda Junior

5 componentes, ferramentas e documentação de infraestrutura
5 componentes, ferramentas e documentação de infraestrutura5 componentes, ferramentas e documentação de infraestrutura
5 componentes, ferramentas e documentação de infraestruturaEdmir Tavares de Arruda Junior
 
1 noções básicas de transmissão e meios físicos de rede
1 noções básicas de transmissão e meios físicos de rede1 noções básicas de transmissão e meios físicos de rede
1 noções básicas de transmissão e meios físicos de redeEdmir Tavares de Arruda Junior
 
A programação da televisão ensina adultério e perversões sex
A programação da televisão ensina adultério e perversões sexA programação da televisão ensina adultério e perversões sex
A programação da televisão ensina adultério e perversões sexEdmir Tavares de Arruda Junior
 

Mais de Edmir Tavares de Arruda Junior (20)

4 meios físicos ópticos
4 meios físicos ópticos4 meios físicos ópticos
4 meios físicos ópticos
 
5 componentes, ferramentas e documentação de infraestrutura
5 componentes, ferramentas e documentação de infraestrutura5 componentes, ferramentas e documentação de infraestrutura
5 componentes, ferramentas e documentação de infraestrutura
 
3 meios físicos de cobre
3 meios físicos de cobre3 meios físicos de cobre
3 meios físicos de cobre
 
2 cabeamento estruturado e ambiente de conexão
2 cabeamento estruturado e ambiente de conexão2 cabeamento estruturado e ambiente de conexão
2 cabeamento estruturado e ambiente de conexão
 
1 noções básicas de transmissão e meios físicos de rede
1 noções básicas de transmissão e meios físicos de rede1 noções básicas de transmissão e meios físicos de rede
1 noções básicas de transmissão e meios físicos de rede
 
Estudo o pecado na vida do crente
Estudo o pecado na vida do crenteEstudo o pecado na vida do crente
Estudo o pecado na vida do crente
 
Davi e bate seba
Davi e bate sebaDavi e bate seba
Davi e bate seba
 
Consequências de viver no pecado
Consequências de viver no pecadoConsequências de viver no pecado
Consequências de viver no pecado
 
Confissão de pecados
Confissão de pecadosConfissão de pecados
Confissão de pecados
 
Adultério conjugal
Adultério conjugalAdultério conjugal
Adultério conjugal
 
Aborto tragédia ou direito
Aborto tragédia ou direitoAborto tragédia ou direito
Aborto tragédia ou direito
 
Aborto nos casos difíceis
Aborto nos casos difíceisAborto nos casos difíceis
Aborto nos casos difíceis
 
A5guiadeestudobiblico 151011171109-lva1-app6892
A5guiadeestudobiblico 151011171109-lva1-app6892A5guiadeestudobiblico 151011171109-lva1-app6892
A5guiadeestudobiblico 151011171109-lva1-app6892
 
A programação da televisão ensina adultério e perversões sex
A programação da televisão ensina adultério e perversões sexA programação da televisão ensina adultério e perversões sex
A programação da televisão ensina adultério e perversões sex
 
A chave para se vencer o pecado
A chave para se vencer o pecadoA chave para se vencer o pecado
A chave para se vencer o pecado
 
A doutrina do pecado
A doutrina do pecadoA doutrina do pecado
A doutrina do pecado
 
Perfeição
PerfeiçãoPerfeição
Perfeição
 
Oração pai nosso e a garota
Oração pai nosso e a garotaOração pai nosso e a garota
Oração pai nosso e a garota
 
Formulário de inscrição
Formulário de inscriçãoFormulário de inscrição
Formulário de inscrição
 
Capa um ladrão na noite e a grande tormenta
Capa um ladrão na noite e a grande tormentaCapa um ladrão na noite e a grande tormenta
Capa um ladrão na noite e a grande tormenta
 

A nbsp grande_nbsp_cavalgada