El documento es una oración de petición a Dios para ser un buen jardinero y cuidar de los demás. Pide sabiduría para reconocer a los demás como maestros, ver la grandeza en lo ordinario, y sembrar amor a través de sus acciones cotidianas a pesar de las dificultades.
22. AL COMENZAR ESTE NUEVO CURSO TE PIDO QUE TÚ, JARDINERO DE LOS CORAZONES, INFUNDAS EN EL MÍO LA CONVICCIÓN PROFUNDA DE QUE CADA DÍA ME ESPERAS Y DE QUE MI OFICINA O MI COCINA PUEDE SER, TAMBIÉN, MI SINAÍ.