1. El nuevo siglo nos introduce en la sociedad del conocimiento, en la que cada día adquiere más valor el patrimonio intelectual, entendido éste como el conjunto de informaciones que reportan ventajas competitivas sobre los demás.<br />El capital intelectual de las empresas se nutre de información y datos convertidos en conocimiento en cuanto que son titulados o protagonizados por personas concretas. Y todo este conjunto proporciona un valor añadido a la empresa de difícil cuantificación, pero cada día más cotizado.<br />Para la implantación de su sistema de gestión del conocimiento, se requiere, como primera medida la realización del llamado Mapa del Conocimiento, en el que la empresa debe integrar todos los objetos del conocimiento a modo de inventario, etiquetando cada uno con la tipología, categoría y localización que le corresponda.<br />El Mapa del Conocimiento no es otra cosa que una foto fija de la empresa en la que se presenta de forma estructurada y ordenada la respuesta a la principal cuestión, que no es otra que QUIÉN SABE QUÉ. En la medida en que se dé respuesta de forma exhaustiva y ordenada a este sencilla pregunta, podremos tener un buen Mapa del Conocimiento.<br />A diferencia de lo que se produce en el mundo artístico, que es básicamente personal, la innovación en la empresa es resultado del trabajo coordinado de un grupo, de la colaboración interactiva entre individuos que se complementan y hacen posible que uno más uno no sean dos, sino tres, o más. Las organizaciones que son capaces de innovar evolucionan constantemente. Las que no, se quedan estancadas, y en un plazo más o menos breve tienen problemas, y fácilmente son adelantadas por la competencia, e incluso se quedan fuera del mercado.<br />El capital intelectual está demandando cada día con más fuerza la necesidad de ser medido, ya que, aún a pesar de ser un intangible, su valor es tan determinante en el mercado de las empresas, que es necesario concretar de qué (cantidad) se está hablando exactamente. Es más, hay autores que sostienen que con el tiempo no solo será aconsejable, sino que será una obligación.<br />También se explora un nuevo concepto, el de talento emocional, algo así como la inteligencia emocional aplicada a la empresa, es decir, ese cúmulo de actitudes, capacidades y habilidades personales que hacen de los empleados personas eficaces en un sistema de relaciones, aplicado a la empresa. Cuando la inteligencia emocional contribuye a incrementar el capital intelectual de la empresa, estamos hablando de talento emocional.<br />Se diferencian en este módulo las principales etapas de la gestión del conocimiento: identificación, captura y almacenaje, recuperación y acceso, y, finalmente, uso y aplicación. Aunque, independientemente de las etapas del proceso, lo que importa, en definitiva, es que las personas accedan a compartir su conocimiento con los demás.<br />82296034290<br />Uno de los elementos más interesantes dentro del capital intelectual, y que está adquiriendo una importancia creciente, es la creación de acuerdos de cooperación y alianzas estratégicas como medio de propagar, compartir y generar conocimientos entre las empresas, especialmente entre las pertenecientes a la industria intensiva de la tecnología.<br />Lo verdaderamente importante en la aplicación de un sistema de gestión del conocimiento son las personas, sin las cuales ni será posible el espacio común, ni funcionará el sistema, ni prestará servicio a la empresa. Por lo tanto, es aconsejable no perder de vista esta premisa, y en la aplicación del sistema avanzar en todos los frentes a la vez (tecnología, organización, motivación, cultura, etc.), de modo que su construcción se haga de forma ágil y compensada.<br />En un segundo nivel de importancia, la experiencia y los autores aconsejan algunos premisas previas, entre las que se destaca como especialmente importante los resultados, un sistema de mejora continua, comenzar la implantación sin esperar situaciones ideales, restringirla a un espacio que sirva de experiencia piloto, y recurrir en un principio a tecnología poco sofisticada.<br />Simultáneamente al diseño y creación del espacio tecnológico para la gestión del conocimiento, la empresa debe acometer la tarea de motivación y entrenamiento de la plantilla. De sobra es sabido que éste es uno de los elementos de mayor importancia de todo el proceso, sin el cual no es viable el sistema.<br />1329690112395<br />