La Guerra del Pacífico se desató entre Chile, Perú y Bolivia en 1878 debido a tensiones sobre los recursos de salitre en Antofagasta. Chile derrotó a las fuerzas peruanas y bolivianas por mar y tierra, ocupando Lima y gran parte del sur de Perú. Tras la guerra, Chile se anexionó las provincias peruanas de Tarapacá, Arica y Tacna por 10 años, aunque el plebiscito prometido para devolver Tacna al Perú nunca se llevó a cabo.