El documento describe cómo los microorganismos, como el EM que es un inoculante microbiano, pueden restablecer el equilibrio microbiológico del suelo al mejorar sus condiciones físico-químicas e incrementar la producción y protección de los cultivos, lo que permite una agricultura y medio ambiente más sostenibles al conservar los recursos naturales. El EM es un líquido compuesto por una combinación de varios microorganismos.