La nefropatía diabética causa daño en los materiales extracelulares e incrementa las especies reactivas del oxígeno. En pacientes con diabetes mellitus tipo 1 o 2 y nefropatía, la combinación de inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina y bloqueadores de los receptores de angiotensina es más eficaz para reducir la presión arterial y la proteinuria que usar solo uno de los fármacos.