Teoria de adquiscicon estructuralismogenerativismo01 amt
1. ESTRUCTURALISMO Y GENERATIVISMO: ALGUNOS COMENTARIOS
Materia: Lingüística - Comisión: Augusto M. Trombetta
[Agradezco las observaciones que se puedan dirigir a <augustus@mailpersonal.com>.]
A) El estructuralismo europeo
a) Ferdinand de Saussure → ya en su tesis de 1878, Mémoire sur le système primitif des voyelles, aparece la idea de
sistema; la edición de su Cours de linguistique générale es póstuma (1916). Oposiciones binarias: lengua y habla,
sincronía y diacronía → necesidad de delimitar un objeto de estudio (Saussure señala que la porción de la realidad que va a
estudiar la lingüística no está dada de antemano —como lo estaría en la botánica, por ejemplo— y que el punto de vista del
analista es determinante a la hora de definirla). Lenguaje = lengua + habla → el carácter heteróclito del lenguaje impide su
estudio científico; cuando se persigue este fin se hace necesario aislar la lengua (lo estable) del habla (lo ocasional); podrá
haber una lingüística del habla, pero a Saussure le interesa desarrollar una lingüística de la lengua. Enfoques sincrónico y
diacrónico → para el lingüista, la sincronía supone el estudio de un estadio de lengua (un momento, pasado o presente,
dentro de su desarrollo) y la diacronía, el estudio de la evolución histórica de una lengua (su desarrollo mismo). Objeto de
estudio de la lingüística → una lengua en un momento dado de su historia, un cierto estadio de lengua {Sistema +
Sincronía}. Noción básica: sistema (Saussure no habla de estructura) → la idea es que la lengua es un sistema de valores
que se oponen; cada elemento del sistema (valor) se define negativamente como lo que no son los otros. Signo lingüístico:
naturaleza mental y características descriptivas. Signo = significante + significado → el signo es una entidad biplánica con
dos elementos solidarios entre sí, un significante (imagen acústica) y un significado (imagen conceptual); ambos
componentes del signo lingüístico tienen estatuto mental (i. e., no existen más que en las cabezas de los hablantes), de
manera que el signo es una entidad mental. Cuatro características del signo → 1) linealidad (el signo es lineal debido al
carácter lineal del significante, que se desarrolla en el tiempo), 2) arbitrariedad (la relación entre significado y significante
es arbitraria o inmotivada, ya que no reconoce ninguna motivación natural), 3) inmutabilidad (en términos sincrónicos, el
signo es inmutable), 4) mutabilidad (en términos diacrónicos, el signo es mutable).
b) Tres escuelas deudoras directas de Saussure → acá solo importan las dos últimas. Escuela de Ginebra: es la
«ortodoxia» saussureana → Charles Bally y Albert Sechehaye (son los editores originales del Curso de Saussure). Escuela
de Praga: matizan la dicotomía entre sincronía y diacronía para el estudio de la lengua, focalizan el aspecto socio-
comunicativo del lenguaje (se trata de una escuela funcionalista: el centro de la teoría se encuentra en las funciones que
cumple el lenguaje, particularmente la función comunicativa) → Nikolay S. Trubetzkoy y Roman Jakobson (primera mitad
del siglo XX), Émile Benveniste (segunda mitad del siglo XX). Escuela de Copenhague (Glosemática): lleva hasta sus
últimas consecuencias el programa saussureano desde una perspectiva inmanente (estudia el sistema de la lengua en sí
mismo, sin correlatos con otras fracciones de la realidad), focalizando en las relaciones que guardan los elementos dentro
de la lengua (se trata de una escuela funcionalista: el centro de la teoría se encuentra en las funciones, en su sentido lógico,
que relacionan a los elementos de la lengua) → Louis Hjelmslev (Omkring sprogteoriens grundlæggelse —Prolegómenos
a una teoría del lenguaje—, 1943), Emilio Alarcos Llorach (introduce la teoría y la adapta al castellano).
B) El estructuralismo norteamericano
a) Descriptivismo o distribucionalismo → la influencia de Saussure es indirecta. Tiene un origen independiente del
estructuralismo europeo y deriva principalmente del trabajo antropológico y etnográfico realizado entre los indios
norteamericanos: la idea es lograr descripciones adecuadas de tales lenguas y para ello se desarrolla el método
distribucional (establecer los contextos de aparición de los distintos elementos) → Franz Boas (Handbook of American
Indian languages, 1911), Edward Sapir (Language, 1921), Leonard Bloomfield (Language, 1933), Charles Hockett (A
course in modern linguistics, 1958).
b) Conductismo → es la corriente psicológica dominante en los Estados Unidos de América: la conducta de un individuo se
explica como una serie de hábitos adquiridos por respuesta a estímulos determinados. En términos generales, los lingüistas
estructuralistas norteamericanos aceptan las explicaciones conductistas referidas al lenguaje: este se adquiere como
respuesta a los estímulos provenientes del mundo exterior. Así, Bloomfield explica que el niño va fijando su lengua por la
repetición de los estímulos que recibe; los actos lingüísticos, a su vez, son respuestas a estímulos y se pueden convertir en
estímulos para producir nuevas respuestas.
c) Dos comentarios marginales
1) Boas y Saussure → como queda dicho, el estructuralismo norteamericano se entronca con una tradición antropológica y
etnográfica. Boas fue uno de los antropólogos que estudiaron las lenguas de los indios norteamericanos. Pero Boas no era
propiamente estadounidense: aunque desarrolló sus estudios allí; era alemán y se formó en las universidades alemanas de
su época. ¿Cuál fue su época de formación? La de Saussure: segunda mitad del siglo XIX. Es decir, tanto Boas como
Saussure se pudieron haber formado en similares contextos de ideas (ciertamente Boas no estudió filología sino
matemática, pero su actividad profesional pronto lo orientó hacia los estudios culturales y lingüísticos). Por otro lado,
Sapir (otro alemán norteamericano, discípulo de Boas) y Bloomfield, considerados los padres del estructuralismo
norteamericano, pertenecen al último tramo del siglo XIX y su etapa de formación se ubica en la primera década del XX,
de manera que van haciendo suyos los criterios y trabajos de Boas.
2) El problema metodológico → se dice, y es absolutamente cierto, que en la ciencia las teorías determinan o condicionan
1
2. la perspectiva sobre lo que se va a estudiar (qué preguntas se formulan, qué hipótesis se contrastan, etcétera); sin
embargo, sería lícito derivar del caso del estructuralismo norteamericano la afirmación complementaria: en la ciencia
también el tipo de información relevada puede condicionar el estudio realizado (incluso en un nivel teórico). Es decir, la
filología tradicional europea, con su énfasis comparativo y su programa de reconstrucción histórica, no podía aplicarse de
manera legítima al estudio de las lenguas indoamericanas. ¿Por qué? Porque se trataba de culturas ágrafas, a diferencia de
lo que ocurría con las culturas antiguas (latina, griega y sánscrita) y con las culturas europeas modernas, cuyos
abundantes testimonios escritos ubicaban a los filólogos indoeuropeístas del Viejo Continente en un lugar de privilegio.
En este sentido, se puede decir que el método comparativo y la reconstrucción histórica carecían de base empírica en
América. En suma, para estudiar las lenguas aborígenes norteamericanas se necesitaban nuevas teorías y nuevas técnicas
(el método distribucional). Y aquí es donde se produce el gran aporte de Boas, Sapir, Bloomfield, Hockett y todos los que
se entroncan, de manera genérica y completamente ahistórica, dentro del distribucionalismo.
C) El generativismo de Chomsky
a) Reacción contra el distribucionalismo norteamericano → explicación y mentalismo. Para Chomsky, una teoría
lingüística no debe limitarse a describir fenómenos, sino que debe intentar explicarlos. Por otro lado, no acepta el carácter
conductista de las explicaciones acerca de la adquisición del lenguaje: Chomsky supone que los hablantes de cualquier
lengua deben de tener un dispositivo mental innato que permita ese proceso de adquisición.
b) Aspectos generales → la gramática generativa se viene desarrollando entre la segunda mitad de la década de 1950 y el
presente. Criterios de adecuación → Una teoría lingüística debe ser adecuada descriptivamente (i. e., debe poder describir
de manera coherente los fenómenos lingüísticos estudiados) y adecuada explicativamente (i. e., debe ser compatible con
una teoría acerca de la adquisición del lenguaje). [Los criterios de adecuación sirven para seleccionar teorías: una teoría
adecuada descriptiva y explicativamente va a ser preferible a una que solo presente una adecuación descriptiva.] Un mismo
programa y distintos modelos → Durante casi medio siglo, el programa de investigación de la gramática generativa (a
saber, el estudio de ese dispositivo mental innato responsable de que un chico, sometido a un estímulo lingüístico altamente
deficiente, logre dominar una lengua completa en el término de unos pocos años) se ha mantenido constante; lo que han
variado son los modelos con que se intenta formalizar ese conocimiento lingüístico: teoría estándar (reglas y
representaciones, desde fines de los años cincuenta hasta fines de los años setenta), modelo de principios y parámetros
(principios generales parametrizados de manera particular, desde principios de los años ochenta hasta mediados de los años
noventa), programa minimalista o minimista (operaciones y criterios muy básicos y elementales, desde mediados de los
años noventa hasta el presente). [En la evolución del programa chomskiano hay que entender la búsqueda de una mayor
adecuación explicativa: la postulación de cada modelo y el descarte del anterior se justifican por la necesidad de lograr una
teoría compatible con una teoría acerca de la adquisición del lenguaje.] Delimitaciones conceptuales → Gramática
universal: La hipótesis más fuerte del programa generativo es la existencia de una gramática universal que forma parte de
la dotación genética de la especie humana y que es la responsable final de la adquisición del lenguaje; los distintos modelos
desarrollados dentro de este programa intentan formalizar dicha gramática. Competencia y actuación: En la teoría estándar
se distingue entre competencia (el conocimiento lingüístico innato que tienen los hablantes de una lengua y del que no
pueden dar cuenta) y actuación (la ejecución misma de la actividad lingüística); Chomsky define que va a estudiar la
competencia lingüística y a dejar de lado el resultado de la actuación. Lengua-I y lengua -E: En el modelo de principios y
parámetros se redefine la competencia en términos de una lengua interiorizada (interna, intensional e individual), opuesta a
una lengua exteriorizada (externa); Chomsky define que va a estudiar la primera y que no se va a ocupar de la segunda.
[Sea por el lado de la competencia, sea por el de la lengua-i, el objeto de estudio de Chomsky pasa por la lengua entendida
como un proceso o dispositivo generador antes que como un producto o resultado objetivado.] El papel de la experiencia:
Los estímulos lingüísticos que recibe el chico interactúan con la gramática universal para darle la forma a la gramática
particular de la lengua que está adquiriendo; tanto la gramática universal como la particular son entidades mentales. [A
diferencia de las tesis conductistas —donde el estímulo lingüístico actúa sobre una mente en blanco o tabula rasa para
conformar una lengua—, en Chomsky la experiencia lingüística del entorno, a la que es sometido el chico, actúa sobre un
dispositivo mental apto para dar forma a una lengua particular.]
c) Un comentario marginal
1) Sobre la gramaticalidad → Chomsky introduce el concepto de que una oración puede ser agramatical o gramatical
según se violen o no las reglas o los principios que, se supone, subyacen a su generación. (El concepto de gramaticalidad
va unido a la idea de competencia.) Se podría pensar, entonces, que la gramaticalidad es condición necesaria de la
aceptabilidad: para que una oración sea aceptable debe ser generada. Sin embargo, que una oración sea aceptable no
depende solo de que pueda ser generada, también va a depender de que pueda ser procesada por la memoria, de factores
estilísticos, de aspectos normativos y de otros elementos que hacen a la actuación lingüística. (El concepto de
aceptabilidad va unido a la idea de actuación.) En suma, se podría decir que la gramaticalidad es condición necesaria
pero no suficiente de la aceptabilidad: la gramaticalidad no es el único factor que incide en la aceptabilidad. (El punto no
aparece nada claro en Chomsky.) Por este camino se pueden entender dos cuestiones: 1) el lenguaje poético resulta
aceptable aunque pueda parecer agramatical; 2) la gramaticalidad (i. e., buena formación, de acuerdo con reglas o
principios) nada tiene que ver con la normativa de una lengua (i. e., hablar y escribir bien, de acuerdo con criterios de
autoridad).
2