2. Es una onda que se origina en el corazón y se propaga a través de todas
las arterias en el cuerpo. Esto sucede cada vez que el corazón se contrae
(o da un latido), y hace circular la sangre por todo el organismo. La onda
se percibe como un pulso y se puede palpar o tomar en diferentes
partes del cuerpo por donde pasan las diferentes arterias. Estos lugares
pueden ser en el cuello donde se encuentra la carótida y cerca de la
muñeca en la radial. Para tomar el pulso usualmente se usan las yemas
del dedo índice y medio, presionando suavemente en el lugar indicado,
allí se podrá sentir las palpitaciones del corazón.
3. El pulso se mide manualmente con los dedos índice y medio. Cuando se palpa la arteria
carótida, la femoral o la braquial se tiene que ser muy cuidadoso, ya que no hay una
superficie sólida como tal para poder detectarlo. La técnica consiste en situar los dedos
cerca de una arteria y presionar suavemente contra una estructura interna firme,
normalmente un hueso, para poder sentir el pulso.
•Pulso radial, situado en
la cara anterior y lateral
de las muñecas, entre el
tendón del músculo
flexor radial del carpo y la
apófisis estiloide del
radio. (arteria radial).
•Pulso tibial posterior,
detrás del tobillo bajo
el maléolo
medial (arteria tibial
posterior).
•Pulso carotídeo, en el cuello,
las dos arterias carótidas de
una persona no deben palparse
simultáneamente, para evitar
el riesgo
de síncope o isquemia cerebral.
El pulso no se debe tomar con el dedo pulgar. Las arterias que vienen del antebrazo ( radial y cubital) se unen y forman el arco palmar; de éste
arco salen las ramas que van a irrigar las falanges (dedos de la mano), cada falange tiene una arteria a cada lado, pero; el dedo pulgar solo tiene
una arteria llamada arteria principal del pulgar, la cual le pasa por su linea media. Si tomas el pulso con el pulgar, se puede confundir el pulso que
se quiere tomar con el propio pulso de esta falange.
4. ¿Cómo Determinarla?
Una vez que se tenga localizado el pulso en una de estas zonas,
presionando suavemente con los dedos hay que contar cuántas
pulsaciones tenemos en un minuto (o en medio minuto y multiplicarlo
por dos).
Para calcular la frecuencia cardiaca máxima existe una fórmula muy
sencilla en la que hay que restar a 220 la edad que se tenga; por
ejemplo, si una persona tiene 40 años, su frecuencia cardiaca máxima
es 180. Nunca debe poner a su corazón a pulsaciones superiores a esta
cifra.
Otra manera de calcularla es a través de la fórmula de Karvonen, que
también tiene en cuenta la frecuencia cardiaca en reposo para estimar
hasta dónde podemos llegar. Para obtenerla hay que restar a la
frecuencia cardiaca máxima la frecuencia cardiaca en reposo, y con este
resultado aplicaremos la corrección del porcentaje. Esta fórmula,
aunque mucho menos conocida, es más adecuada, puesto que añade a
la variable edad la de la condición física, ya que las personas más
sedentarias suelen tener una frecuencia cardiaca en reposo mayor.