Las mufas son estufas utilizadas en laboratorios para incubar cultivos microbiológicos y elevar la temperatura por encima de 1000°C, y se usan para calefacción, esterilización y combustión cuando se necesita una llama más caliente. Los hornos se emplean para calentar materiales a temperaturas entre 60°C y 3000°C en procesos como la esterilización y la combustión.