2. Regulación de la presión arterial
Es un proceso complejo, que esta determinado por la acción del
sistema nervioso autónomo y los centros de regulación
cardiovascular del sistema nervioso central, los factores
vasodilatadores y vasoconstrictores, así como el riñón.
3. Sistema Barorreceptor
mejor conocidos para el control de la presión arterial es el reflejo
barorreceptor. Básicamente, este reflejo se inicia en los receptores de
estiramiento, conocidos como barorreceptores o presorreceptores,situados
en puntos específicos de las paredes de varias arterias sistémicas de gran
tamaño. El aumento de la presión arterial estira los barorreceptores y hace que
transmitan las señales hacia el sistema nervioso central. Las señales de
«retroalimentación» vuelven después a través del sistema nervioso autónomo
hacia la circulación para reducir la presión arterial hasta el nivel normal.
5. Sistema Quimiorreceptor
Estrechamente asociado al control de los barorreceptores del sistema de
presión actúa un reflejo de quimiorreceptores que funciona de una
forma muy similar al reflejo de barorreceptores, excepto porque son los
quimiorreceptores, y no los receptores de estiramiento, los que inician
la respuesta.
11. PAPEL DEL RIÑON EN LA REGULACION DE LA
PRESION ARTERIAL
El sistema de líquidos renal-corporal para el control de la presión
arterial actúa de forma lenta, pero muy poderosa, del modo siguiente: si
el volumen de sangre aumenta y la capacitancia vascular no se ve
alterada, la presión arterial también aumenta. A su vez, el aumento de
la presión hace que los riñones excreten el exceso de volumen, con lo
que la presión se normaliza.
13. Papel del retorno venoso en el control del gasto
cardiaco
Cuando se afirma que el gasto cardíaco está controlado por el retorno venoso, quiere
decirse que no es el corazón propiamente quien, por lo general, controla el gasto
cardíaco, sino que hay otros factores de la circulación periférica que afectan al flujo de
sangre hacia el corazón desde las venas, lo que se conoce como retorno venoso, que
actúan como controladores principales. La razón principal por la que los factores
periféricos son más importantes que el corazón en el control de gasto cardíaco es que el
corazón tiene un mecanismo propio que le permite bombear automáticamente, sin tener
en cuenta la cantidad de sangre que entre en la aurícula derecha desde las venas. Este
mecanismo se conoce como ley de Frank-Starling del Corazón . Básicamente, en esta
ley se afirma que cuando aumenta la cantidad de flujo sanguíneo hacia el corazón se
produce un estiramiento de las paredes de las cámaras cardíacas. Como consecuencia del
estiramiento el músculo cardíaco se contrae con una fuerza mayor, por lo que vacía
mejor el exceso de sangre que han entrado desde la circulación sistémica. Por tanto, la
sangre que fluye hacia el corazón es bombeada sin retraso hacia la aorta y fluye de
nuevo a través de la circulación.