2. NO BASTAN PALABRAS, PERO SON UN BUEN INICIO
• Cuando alguien sufre la muerte de un
familiar conocido lo esencial es estar ahí con
esa persona y tratar de acompañarle sin ser
invasivo. Se trata de comprender su
situación pero, a la vez, ser consciente que
es un asunto personal y un dolor
intransferible.
• La experiencia de pasar por un situación de
luto es algo habitual en estos tiempos. No
solo las misas y los rituales son
manifestaciones sociales del dolor familiar.
Las palabras que uno pueda decir también
juegan cierto rol en sobrellevar la pena.
3. Solidaridad y apoyo para con el doliente
• Sé que lo debes estar extrañando mucho.
Espero que tengas mucha fuerza este
momento.
• Esta frase muestra lo evidente: hay
sentimientos de dolor. Sin embargo, resalta
la parte en la que se manifiesta que,
finalmente, dependerá de él mismo salir de
ese mal momento. Así, la fortaleza de uno
mismo debe ser compatible con su
capacidad para sobrellevar el luto.
4. Disponibilidad al 100%
• Creo que este momento no debe ser fácil,
pero recuerda que estaré aquí para ti
todo el tiempo que necesites, cuenta
conmigo.
• Se debe mostrar apertura y accesibilidad
ante este hecho. La idea es escuchar más
que hablar. Tal vez, la sola idea de pasar el
rato incluso hablando de cualquier cosa
menos del tema del duelo sea lo mejor.
Quien lleva las riendas de la conversación
es quien ha perdido a un ser querido.
5. Valorizar al fallecido
• Uds. tienen aún un fuerte y sólido
vínculo. Fue una gran persona y eso es
algo innegable.
• Aunque uno no lo conozca de cerca,
decir que el fallecido fue una persona
valiosa debe ser evidente por el dolor
que se expresa en nuestra amistad.
Aunque no sepamos quien es quien
murió, lo cierto que hay alguien
sufriéndolo. Eso basta para probar su
valor.
6. Dificultad lingüística
• No tengo palabras para expresar cuánto
lo siento, pero me doy cuenta de lo
especial que era para ti.
• Hacer patente que también es un hecho
inaudito para uno es esencial. Incluso si
uno tiene una larga experiencia en haber
perdido amigos, lo cierto es que el dolor
sentido por la desaparición de alguien es
personal, es único y resulta inaccesible a
nosotros que solo lo vemos desde fuera.
7. Mostrar empatía e interés
• Mi más sentido pésame. En verdad,
me afecta tu pérdida. ¿Cómo lleva esto
la familia?
• Esta frase es clásica, pero la novedad
consiste en incluir un cierto interés en
saber cómo lleva la situación la familia.
Quizá planifiquen el sepelio y uno
pueda mostrar disponibilidad horaria
para asistir simbólicamente en algún
momento del día.