4. Sus lóbulos están rodeados por una delgada capa de tejido conectivo.
Características histológicas:
Emiten numerosos tabiques que se extienden desde la cápsula hacia el
interior del órgano, dividen cada lóbulo en numerosos lobulillos,
miden 0,5 – 2mm de diámetro.
Cada lóbulo se divide en una zona periférica más oscura y rica en
células, la corteza y una zona más clara y menos celular, la médula.
Los tabiques llegan hasta el límite corticomedular.
5. Corteza y médula entretejidas
por estroma laxa, compuesta por
células reticulares epiteliales.
En el retículo
aparecen
linfocitos.
Células reticulares
epiteliales, variables con
abundante citoplasma
eosinófilo, gran núcleo
ovalada, muy claro con 1-
2 nucleolos; por su
aspecto se asemejan a las
células rerticulares
mesenquimáticas de los
ganglios linfáticos y el
bazo , unidos por
desmosomas.
6.
7. Las células reticulares epiteliales corticales son de origen endodérmico;
células reticulares medulares y subcapsulares son de origen ectodérmico.
8. Las células reticulares epiteliales
conforman una capa continua de
células planas en la periferia de la
corteza y alrededor de los vasos
sanguíneos .
En la médula aparecen
muchos más células
reticulares epiteliales
que en la corteza, y
además de ingresar en el
retículo celular, aquí
forman los corpúsculos
de Hassall, redondeadas
u ovaladas, capas
concéntricas de células
epiteliales aplanadas,
como en la cebolla. Solo
existen en el timo.
Tamaño variable de 20 a
más de 100um de
diámetro, aumenta con
la edad. Pueden
degenerar o sufrir
calcificación.
9. Células epiteliales de la corteza subcapsular externa ,
ayudan a la maduración de los linfocitos se
denominan células nodriza, poseen prolongaciones
con plegamientos de la membrana celular, se ubican
numerosos linfocitos por cada célula nodriza.
10. Macrófagos aparecen en cantidad moderada en la
corteza, más abundantes en la médula. En las mallas
del retículo epitelial y a menudo hay restos nucleares
provenientes de linfocitos muertos fagocitados. Por lo
general es difícil distinguir los macrófagos con el
microscopio óptico.
11. Células dendríticas
interdigitantes, en gran
cantidad n el límite
corticomedular y en la
médula. Se ubican igual que
los macrófagos en las mallas
del retículo epitelial, largas
prolongaciones ramificadas
en íntimo contacto con gran
cantidad de linfocitos. Las
células dendríticas
interdigitantes y los
macrófagos expresan ambos,
al igual que las células
reticulares epiteliales,
intervienen en la
maduración de los
linfocitos.
12. Los linfocitos del
timo son similares a
los de los otros
tejidos y órganos. Se
localizan entre las
mallas del retículo
epitelial y en la
corteza. Son mucho
más escasos en la
médula. En la
corteza subcapsular
externa, los
linfocitos son
grandes en el resto
de la corteza y en la
médula todos son
pequeños.
13. A medida que avanza la
involución aparecen además de
células tímicas específicas,
cantidades crecientes de
adipocitos, dado que el
parénquima es reemplazado por
tejido adiposo.