"El océano sólo llega al público con noticias sobre derrame de petróleo o por conflictos derivados de la pesca". "Necesitamos una ciudadanía informada, algo que no ocurre en la actualidad ante la ausencia de información que sobre los océanos hay en la escuela y en la universidad". Los océanos juegan un papel esencial en los aspectos de regulación del clima ya que capturan el exceso de calor y de los gases de efecto invernadero y los trasladan a las capas más internas de la Tierra. No obstante, los millones de toneladas de dióxido carbono que todos los años absorben los océanos están alterándolos de manera que sus aguas cada vez son "más ácidas" lo que provoca, por ejemplo, que el calcio se diluya y sea cada vez más difícil la formación de los arrecifes de coral. Los gobiernos no pueden esperar a que ocurran los primeros efectos catastróficos de los cambios climáticos para reaccionar porque entonces será demasiado tarde, ya que la inercia térmica de los océanos prolongará los efectos del calentamiento global haciendo irreversibles las consecuencias para varias generaciones de gobernantes. Dos equipos independientes del NCAR (National Center for Atmospheric Research) han modelizado el efecto de la inercia de los océanos sobre el calentamiento climático. Hace dos años, el NCAR formuló otra predicción modelizada de la evolución del clima, señalando que la temperatura global subiría hasta 10 grados este siglo si no se reducen las emisiones contaminantes. Respecto a la nueva investigación, se basa en que el agua necesita mucho más tiempo que el aire para calentarse, lo que también es válido para la atmósfera y los océanos. Debido a las pautas de tiempo invertidas en estos procesos, incluso aunque las emisiones de gases de efecto invernadero se hubieran estabilizado en el año 2000, la temperatura media del planeta continuaría subiendo medio grado Celsius a lo largo del siglo XXI, según el modelo realizado al respecto por Gerald Meelh y Tom Wigley. Por la misma razón el nivel del mar continuaría subiendo por efecto de la expansión térmica, ya que los océanos se dilatan al aumentar su temperatura. Aún sin contar con la fundición de los hielos terrestres, continentales y del mar, el nivel de los océanos subirá inevitablemente al menos 10 centímetros este siglo. El nivel del mar se ha incrementado ya 9 centímetros en el último siglo y podría aumentar entre 9 y 88 centímetros en el presente. Si el hielo de Groenlandia se derrite completamente, se sumarían 7 metros al nivel global del mar y si se suma la capa del Antártico, se aumentaría otros 5 metros.