Dos hermanas, Sara y Noelia, deciden viajar a Sevilla para broncearse. Al llegar al aeropuerto descubren que su vuelo es en un avión privado de solo seis asientos. Una vez en Sevilla visitan varios lugares turísticos como la Catedral y la Giralda. Mientras exploran, encuentran una nota del niño Jesús diciendo que se escapó para conocer a unos amigos. Lo siguen hasta Montequinto, donde pasan la mañana en una clase conociendo a sus amigos. Por la tarde regresan a Italia contentos de
1. -Sara, ¿Porque no vamos a Sevilla, quizás
encontremos allí al niño Jesús?
-Noelia, yo no quiero ir, sabes que lo de salir de Italia
no me gusta.
-Vamos Sara, quiero ir a Sevilla me gustaría broncear
me un poco, estoy muy blanca.
-Esta bien, pero nada más saldremos en esta ocasión
no viajaremos más.
-Vale - Decía Noelia sonriendo - Sera divertido.
Las dos fueron al aeropuerto, allí se subieron al avión y se
sentaron.
-¿Qué extraño, solo hay seis asientos? - Dijo Noelia
preocupada.
-Buenos días señoritas, les deseo un agradable
vuelo, si necesitan algo estaré por aquí.
Era un señor mayor, iba vestido con un esmoquin, pelo
corto y gris, ojos verdes de mirada cansada, y una piel que
se podría decir que es casi lisa.
- Creo que el billete que encontramos era de dos plazas
de un avión privado. -Imposible pero asombroso
pensaba Sara- No me lo puedo creer, dichosa es la
suerte que hemos tenido.
El avión después de tres horas y media llegó a su destino.
Noelia y Sara bajaron del avión, cogieron un taxi y se
fueron al Barrio Santa Cruz. Estaban dando vueltas por sus
numerosas calles todas tenían es toque de barrio, con sus
casas pequeñas, las paredes agrietadas…
2. Llegaron a la calle Susona, y Noelia que se había llevado
su cámara le sacó una foto al azulejo con un cráneo.
-Me sé esta historia, el por qué está este azulejo
aquí. Lo pondré en mi álbum de fotos, quiero tener buenos
recuerdos de nuestro viaje.
-Sabes creo que al fin y al cabo, viajar es muy
bonito,conoces nuevos sitios.
-Me alegro de que te guste.
-¡A lo mejor se encuentra allí el niño Jesús!.
Estuvieron en el patio de los naranjos y contemplando
estos árboles, muchísimas flores blancas decoraban estos
árboles como las bolas de navidad que se ponen en el
árbol, cuando una brisa trajo el hermoso olor a azahar, que
te recorría las fosas nasales y recorría tu cuerpo, hasta la
sangre olió este hermoso olor. Y una pequeña fuente, que
se encontraba a la izquierda y en el centro, con sus aguas
claras, su brillante mármol blanco, parecía de cuento de
hadas. Entraron en la catedral sus luz era escasa, y un
lugar muy amplio. Que belleza, decían sus ojos al
contemplar el retablo.
-Noelia ¿Qué es eso?
-Parece una nota
-A ver que dice.- Sara se acercó disimuladamente y
cogió la nota, seguidamente la leyó:
- “Ola! Porsi sois Nohelia y Zara, ciento aberme
escapado, mas tarde sime encontrais os dare u na
explicacion asta luego.” Escribió el niño Jesús, como
era pequeño cometía muchas faltas de ortografías.
3. Estuvieron viendo la tumba de Colón, Sara se había
informado de este sepulcro y le contó todo lo que sabía a
Noelia.
-Mira estos cuatro reyes sujetan una especie de caja, en su
interior se encuentran los restos de Cristóbal Colón, cada
rey representa un reino en la antigua España, Híspania. Y
fue cuando a Noelia se le ocurrió un sitio donde quizás
podía estar el niño Jesús. Subieron las 35 rampas y 17
escalones para llegar a arriba de la giralda. Está ahí el niño
Jesús estaba mirando las piscinas de los hoteles más
cercanos, daban ganas de zambullirse en la piscina.
- Por fin te encontramos te hemos buscado por todos
los rincones de Sevilla.
- Lo siento, la razón de haberme escapado, es porque
quería conocer a unos amigos que tengo en esta
ciudad, bueno no es aquí es en un barrio de Dos
Hermanas, Montequinto, tenía muchas ganas de
conocerlos en persona.
- Si tienes tantas ganas vamos allí ya que estamos,
podemos ir de paso.
Llegaron a Montequinto, y fueron al colegio Gloria Fuertes,
a la clase de 6ºA. En ese instante Su profesora María José
estaba impartiendo clase de Lenguaje, pero se detuvo un
momento para enseñarles a sus alumnos en la pizarra
táctil, una entrada del blog de la clase, un cuento titulado
“Misterio en la catedral”, entonces llamaron a la puerta
-¡TOC-TOc!!!
4. Era el niño Jesús y las dos hermanas monjas. Pasaron
todos la mañana juntos. Cuando el reloj marcaba las dos
menos cinco, el niño Jesús se despidió y se fueron.
Llegaron al aeropuerto, se dirigieron a su avión
correspondiente. Llegaron a Bari felices y contentos de la
experiencia vivida en Sevilla.
Allí para celebrar la llegada del niño Jesús prepararon una
fiesta, justo ese día unos niños vivieron de excursión a la
catedral, según sus chándal eran del colegio San
Francesco di Assis.