La película Ocho Apellidos Vascos ha tenido una gran acogida en el País Vasco, donde ha obtenido el 13% de la recaudación total de España, frente al 5% habitual. Usa la comedia y los estereotipos sobre andaluces y vascos para contar la historia de un andaluz que se enamora de una vasca y debe hacerse pasar por vasco. La película se ha convertido en el éxito de taquilla número 1 en España desde 2012.

1. Ocho Apellidos Vascos
-Resumen:
Rafa (Dani Rovira) es andaluz. Pero andaluz, andaluz: de pura cepa. Se le nota a la
legua. Y nunca ha salido de Sevilla porque allí ha podido gozar de todo lo que siempre
le ha gustado, es decir, del vino, la gomina y las mujeres. Mujeres andaluzas, por
supuesto. Pero hete aquí que ahora se ha enamorado de Amaia (Clara Lago), que es
vasca. Y Rafa, ni corto ni perezoso, se ha propuesto seguirla hasta lo más profundo de
Euskadi. Allí tendrá que hacerse pasar por vasco, no sea que alguien se moleste por
su acento andaluz. Y no será nada fácil. Pero sí muy divertido.
Acogida en el País Vasco
Según datos facilitados por Mediaset, en el País Vasco, que habitualmente supone el
5 % de la recaudación de toda España, la película ha obtenido el 13 %, mientras que
en Andalucía, que generalmente suma el 12 %, el porcentaje en taquilla ha subido al
15,8 %.
"La película arrasa en el País Vasco, el cine número 1 de España en afluencia es el de
Barakaldo", aseguró a Efe GhislainBarrois, consejero delegado de Telecinco Cinema,
que ya trabaja, junto a los guionistas, en una segunda parte.

2. Mucho humor
Secuencias como la del protagonista, Dani Rovira, en plena manifestación
independentista en el centro de Getaria (Guipúzcoa), cantando "Euskadi tiene un color
especial", remiten precisamente a ese programa de humor emitido durante una
década en la televisión vasca.«Ocho apellidos vascos» ha arrasado entre el público y
ha encendido a los críticos con una premisa sencilla, los tópicos. Los andaluces son
vagos, graciosos y solo beben rebujito y escuchan flamenco. Los vascos sonbrutos,
serios y aficionados a las manifestaciones independentistas. Esa es la broma que
durante una hora y media desarrolla Emilio Martínez-Lázaro en
la película española con mejor estreno desde 2012 que solo en sus primeros días de
emisión ha recaudado 2,83 millones de euros (el 40% de la taquilla).