1. Capítulo 4
Date la buena vida
“Date la buena vida” tiene implícito el concepto de la libertad humana, si
deseamos darnos la buena vida es por nuestra propia elección, desde nuestro
propio punto de vista y de lo que uno crea que más le conviene, deseamos esto, o
aquello, y lo hacemos porque somos libres: “estamos condenados a la libertad”.
No debemos confundirnos cuando decimos “haz lo que quieras” con que hagas "lo
primero que te venga en gana" la idea es que hagas lo que creas que para ti es
más conveniente. Tenemos que ser capaces de ver más allá de lo que nos
apetece en cierto momento y lo que realmente queremos como finalidad. Puede
que queramos tener todas las riquezas y facilidades del mundo, y tener personas
que hagan las cosas por nosotros, pero esto podría significar sacrificar relaciones
de afecto fundamentales en la relaciones humanas, finalmente luego de tenerlo
todo nos daríamos cuentan que lo más valioso fue, es y será el afecto humano.
Por lo que la buena vida humana está en estrecha relación con las sociedades
humanas; en su lenguaje y por lo tanto todos estamos es proceso de tener una
Buena vida y nos apoyamos unos a otros sin darnos cuenta para alcanzarla.
Análisis:
En el transcurso de la vida nos preguntamos siempre hacia dónde ir, que elegir
especialmente cuando damos el paso hacia la vida adulta, muchas inquietudes,
prejuicios, lo que quiere la familia para nosotros y lo que queremos. La ética nos
enseña que lo que queremos es lo que debe guiar nuestras decisiones porque
somos libres de elegir como será nuestra “buena vida” y como vivirla. Teniendo en
cuenta que no somos animales, ya que hemos sido capaces de crear complejos
sistemas sociales y organizaciones muy complejas gracias a nuestra herramienta
básica que es el lenguaje, el cual nos permite expresar emociones, sentimientos,
ideas, etc. Que van dirigidas a otro ser humano que tiene las mismas
potencialidades que nosotros, capaz de comprender, de analizar y en base a esto
2. crear y evolucionar en distintos aspectos. Es la relación entre humanos (familia,
amigos, compañeros, paciente, etc.) que nos permite evidenciar la libertad
humana y elegir nuestra buena vida, compartirla con otros y dar buena vida. A
todos nos gustaría ser tratados con respeto, que valoren más allá de la situación
en sí, nuestro sentir, nuestras dificultades y más importante aún destaquen
nuestras aptitudes para alcanzar una buena vida, y así también los demás puedan
dar ese buen vivir a alguien más. La esencia de la vida humana es la interacción
humana como tal, basada en el lenguaje que nos permite visualizar diferencias y
semejanzas entre cada uno de nosotros las que nos hacen respetarnos,
admirarnos y amarnos y establecer relaciones afectivas estables en el tiempo
siempre considerando lo humano como propio, convirtiéndolo en una virtud para
así “darnos la buena vida”.