Mais de Lilly Soto Vásquez. Universidad Pontificia de Salamanca, Universidad Galileo; Universidad Rafael Landívar y Universidad de San Carlos de Guatemala , Universidad Mariano Gálvez
Mais de Lilly Soto Vásquez. Universidad Pontificia de Salamanca, Universidad Galileo; Universidad Rafael Landívar y Universidad de San Carlos de Guatemala , Universidad Mariano Gálvez (20)
Con pedro joaquìn en el Hospital manolo morales en 1978
1. Con Pedro Joaquìn, en el Hospital Manolo Morales en 1978.
Lilly Soto Vàsquez
Es interesante conocer còmo vivimos los periodistas ese dìa. Fue un dìatràgico, pero con una
gran convicciòn de dar a conocer al pueblo lo que ocurrìa. Extravisiòndestacò a todos sus
equipos. Al equipo que coordinaba le tocò ir al Hospital Manolo Morales y entablamos fuertes
discusiones con los mèdicos que estaban realizando su trabajo con el cuerpo acribillado de
Pedro Joaquìn. Ellos sostenìan que el periodismo debìa dejarles hacer su trabajo mèdico y
nosotros que el pueblo necesitaba ver a Pedro. Al final aceptaron nuestros razonamientos
porque la multitud comenzaba a tomarse el propio hospital. Pero hoy, 34 años despuès
debemos rendirles homenaje a los mèdicos que permitieron que el equipo entrara a ver y
filmar a Pedro. Si no, no se sabrìa de la atrocidad que se habìa cometido con
un periodista, escritor y lìder popular nicaraguense.
Esas imàgenes son muy duras, muy crudas y para nosotros, fue tambièndurìsimo. Ver a Pedro
Joaquìn, el periodista amigo, que apreciàbamos y admiràbamos por su valentìa y coraje para
librar una oposiciòn propositiva contra Somoza y que denunciaba a travès de "La Prensa" los
atropellos a las libertades pùblicas, acribillado con màs de 33 perdigonazos, en todo su cuerpo,
ensangrentado y en proceso de lavar el cadàver.
Todos los 10 de Enero revivo esos momentos. Ver a Doña Margarita Chamorro, la mamà de
Pedro Joaquìn rodeada del pueblo, de mujeres, de hombres curtidos por el sol, de obreros,
dàndole valor en el Hospital para que pudiera asumir la verdad de la muerte de su hijo. Y
luego, su pregunta ¿Lo viste?.Sì- le afirmè y tambièn le dije: Lo filmè para que el pueblo lo vea
y sepa lo que pasò.
Ahora, ese film es un documento històrico y una referencia en cada uno de los y las
nicaraguenses que han visto ese reportaje. No se puede olvidar un asesinato atroz. Fue un
asesinato del cuerpo, pero no de la palabra ni del espiritu de Pedro Joaquìn.
La vigencia de su pensamiento es cada vez màs rediviva. En polìtìca, mantener la repùblica; en
los valores, la moral y la ètica; mantener las libertades pùblicas y la democracia y siempre
hacer una oposiciòn responsable y propositiva.
Su continuo batallar por la democracia el pueblo nicaraguense no lo olvida y por ello, todos los
gobernantes desde 1985 asumen su responsabilidad de naciòn los dìas 10 de enero, para que
cumplan con la naciòn y para que fortalezcan a la repùblica como lo hizo Pedro Joaquìn
Chamorro Cardenal.
Luego, cubrimos la vela, el entierro y los enfrentamientos en el Cementerio General, pero eso
se los contarè en otra oportunidad. Pero si les dirè algo que todavìa me impresiona, es la
dignidad con que asumieron los hechos, Doña Violeta y sus hijos e hijas. Todo el pueblo
nicaragüense y los pueblos del mundo que vieron las noticias son testigos de ello.
Guatemala de la Asunciòn, 10 de enero de 2012.