El documento explica cómo hacer yogurt casero de forma sencilla. Describe los ingredientes necesarios como leche y yogurt natural, y los pasos del proceso que incluyen calentar la leche y agregar el yogurt para que las bacterias se reproduzcan. Explica que el yogurt resultante debe mantenerse en un lugar cálido y luego refrigerarse.
3. El yogurt es un ser vivo: son millones de
bacterias que se forman dentro de la
leche y le dan esa deliciosa textura y
sabor. Así que para hacer este divino
elixir, lo que hace falta es cultivar estas
bacterias para que se reproduzcan una
y otra vez. En esta guía te enseñaremos
a hacer yogurt de forma sencilla y
natural.
4. El yogur es uno de los alimentos más
saludables en la dieta de los niños, como así
también de los adultos, y lo mejor de todo es
que se trata de un producto que a los
pequeños les gusta mucho para disfrutar
como postre e incluso para acompañar
algunas comidas.
La gran cantidad de nutrientes que aporta el
yogur en la dieta diaria, hace que este sea
uno de los alimentos indispensables para la
correcta alimentación de nuestro hijos, por lo
que los médicos pediatras suelen recomendar
la ingesta cotidiana de yogur.
5.
6. Leche (la cantidad a utilizar dependerá de la
cantidad de yogur que deseemos elaborar)
Una proporción pequeña de yogur natural sin
azúcar
Botes de vidrio en los que se volcará la leche.
Una cuchara limpia.
Un aislante para conservar el calor. Puede ser
papel de diario, caja de corcho, termo,
manta o otros.
De ser posible utilizar un termómetro que
llegue hasta los 90ºC.
7. Comenzamos por colocar un litro de leche en una
ollita, y la llevamos a fuego lento hasta calentar a una
temperatura que permita introducir un dedo por 5
segundos sin quemarnos. En ese momento, retiramos la
leche del fuego, e incorporamos ágilmente el pote o la
porción de yogurt. Si queremos una consistencia mas
untuosa y cremosa, podemos agregarle una
cucharada de leche en polvo.
Pasamos esta mezcla a un recipiente adecuado. Si
contamos con yogurtera de plástico mejor (la línea de
Tupperware dispone de unas muy bonitas y útiles), sino
podemos colocarlo en un contenedor plástico común,
que cuente con tapa y cierre hermético. Dejaremos
nuestro yogurt casero allí dentro, cubierto por un
repasador y en un lugar cálido y seco, durante
aproximadamente un día.
8. Pasado este tiempo, llevamos el producto a la
heladera, no sin antes reservar una porción en un
contenedor pequeño, para usar la próxima vez
que hagamos nuestro propio yogurt casero.
Si no conseguimos yogurt natural, podemos
hacerlo con yogurt de vainilla o de otro sabor,
aunque para lograr un producto bien saborizado
requeriremos de algún aditamento, como algún
saborizante, o jugo y pulpa de frutas. Para ello, en
nuestro artículo "Cómo saborizar los yogures
caseros", encontraremos muchas ideas para
enriquecer el sabor del mismo.
Recordemos que de no agregar aditivos o
saborizantes, con cada tanda de elaboración este
sabor se irá perdiendo, hasta lograr un yogurt de
sabor natural apto para utilizar en nuestras
próximas preparaciones
9.
10. La leche tiene varios derivados, uno de ellos es el yogurt,
el cual se elabora a partir de bacterias “buenas” . La
leche se inocula con éstos microorganismos, para que la
lactosa se convierta en ácido láctico.
Si comparamos el yogurt natural y la leche entera se
observa que una taza de yogurt contiene mas proteína y
calcio que una taza de leche y un poco menos de sodio.
(Obviamente esto depende de la manera en que se
elabora el yogurt y de la marca del mismo).
El yogurt contiene poca grasa; un yogurt normal contiene
8.7 g de grasa mientras que el yogurt light contiene 2.3 g
de grasa aproximadamente. Además siendo un producto
de origen animal, contiene muy poco colesterol: 29 mg
comparado con 33 mg que contiene la leche.
Para las personas que son intolerantes a la lactosa, que es
el hidrato de carbono de la leche, ésta es una buena
noticia, ya que el yogurt contiene menos lactosa que la
leche y algunas personas lo toleran mejor.