1. Cuando empleamos operadores mecánicos, su unión (o interconexión) da lugar
a un mecanismo, que a su vez puede ser considerado como otro operador si se
une con otros mecanismos para formar una máquina. Eso mismo sucede con el
resto de operadores. Veamos dos ejemplos cotidianos:
Para la construcción de una balanza romana tenemos que recurrir a la
interconexión de varios operadores mecánicos y estructurales: barra, argolla,
plato, tirantes, gancho... que en conjunto dan lugar a una palanca que se
emplea para medir la masa de los objetos.
Los operadores mecánicos son operadores
que van conectados entre si para permitir el
funcionamiento de una máquina, teniendo en
cuenta la fuerza que se ejerce sobre ellos.
Los operadores mecánicos convierten la
fuerza en movimiento.
2. MÁQUINAS SIMPLES
Una máquina simple es un artefacto mecánico que transforma un movimiento
en otro diferente, valiéndose de la fuerza recibida para entregar otra de
magnitud, dirección o longitud de desplazamiento distintos a la de la acción
aplicada.[1]
En una máquina simple se cumple la ley de la conservación de la energía: «la
energía ni se crea ni se destruye; solamente se transforma». La fuerza
aplicada, multiplicada por la distancia aplicada (trabajo aplicado), será igual a
la fuerza resultante multiplicada por la distancia resultante (trabajo resultante).
Una máquina simple, ni crea ni destruye trabajo mecánico, sólo transforma
algunas de sus características.
Máquinas simples son la palanca, las poleas, el plano inclinado, etc.
No se debe confundir una máquina simple con elementos de máquinas,
mecanismos o sistema de control o regulación de otra fuente de energía
3. PALANCAS:
La palanca es una máquina simple que tiene como
función transmitir una fuerza y un desplazamiento. Está
compuesta por una barra rígida que puede girar
libremente alrededor de un punto de apoyo llamado fulcro.
Puede utilizarse para amplificar la fuerza mecánica que se
aplica a un objeto, para incrementar su velocidad o la
distancia recorrida, en respuesta a la aplicación de una
fuerza.
Tipos de palanca
Las palancas se dividen en tres géneros, también
llamados órdenes o clases, dependiendo de la posición
relativa de los puntos de aplicación de la potencia y de la
resistencia con respecto al fulcro (punto de apoyo). El
principio de la palanca es válido indistintamente del tipo
que se trate, pero el efecto y la forma de uso de cada uno
cambian considerablemente.
4. En la palanca de primera clase, el fulcro se encuentra situado entre la
potencia y la resistencia. Se caracteriza en que la potencia puede ser menor
que la resistencia, aunque a costa de disminuir la velocidad transmitida y la
distancia recorrida por la resistencia. Para que esto suceda, el brazo de
potencia Bp ha de ser mayor que el brazo de resistencia Br.
Cuando lo que se requiere es ampliar la velocidad transmitida a un objeto, o
la distancia recorrida por éste, se ha de situar el fulcro más próximo a la
potencia, de manera que Bp sea menor que Br.
Ejemplos de este tipo de palanca son el balancín, las tijeras, las tenazas, los
alicates o la catapulta (para ampliar la velocidad). En el cuerpo humano se
encuentran varios ejemplos de palancas de primer género, como el conjunto
tríceps braquial - codo - antebrazo.
Palanca de primera clase
5. En la palanca de segunda clase, la resistencia se encuentra entre la
potencia y el fulcro. Se caracteriza en que la potencia es siempre menor
que la resistencia, aunque a costa de disminuir la velocidad transmitida y
la distancia recorrida por la resistencia.
Ejemplos de este tipo de palanca son la carretilla, los remos y el
cascanueces.
6. En la palanca de tercera clase, la potencia se encuentra entre la
resistencia y el fulcro. Se caracteriza en que la fuerza aplicada es mayor
que la resultante; y se utiliza cuando lo que se requiere es ampliar la
velocidad transmitida a un objeto o la distancia recorrida por él.
Ejemplos de este tipo de palanca son el quitagrapas y la pinza de cejas;
y en el cuerpo humano, el conjunto codo - bíceps braquial - antebrazo, y
la articulación temporomandibular.
7. Una polea, es una máquina simple que sirve para transmitir una fuerza. Se trata
de una rueda, generalmente maciza y acanalada en su borde, que, con el curso
de una cuerda o cable que se hace pasar por el canal ("garganta"), se usa como
elemento de transmisión para cambiar la dirección del movimiento en máquinas
y mecanismos. Además, formando conjuntos —aparejos o polipastos— sirve
para reducir la magnitud de la fuerza necesaria para mover un peso.
Según definición de Hatón de la Goupillière, «la polea es el punto de apoyo de
una cuerda que moviéndose se arrolla sobre ella sin dar una vuelta
completa»[1] actuando en uno de sus extremos la resistencia y en otro la
potencia.
TIPOS DE POLEAS:
POLEAS SIMPLES: esta clase de poleas se utiliza para levantar una
determinada carga. Cuenta con una única rueda, a través de la cual se pasa la
soga. Las poleas simples direccionan de la manera más cómoda posible el peso
de la carga.
8. Existen dos tipos de poleas simples:
POLEAS FIJAS: consiste en un sistema donde la polea se
encuentra sujeta a la viga. De esta manera, su propósito consiste
en direccionar de forma distinta la fuerza ejercida, permitiendo la
adopción de una posición estratégica para tirar de la cuerda. Las
poleas fijas no aportan ninguna ventaja mecánica. Es decir, la
fuerza aplicada es igual a la que se tendría que haber empleado
para elevar el objeto sin la utilización de la polea.
POLEAS MÓVILES: esta clase de poleas son aquellas que están
unidas a la carga y no a la viga, como el caso anterior. Se
compone de dos poleas: la primera esta fija al soporte mientras
que la segunda se encuentra adherida a la primera a través de
una cuerda. Las poleas móviles permiten multiplicar la fuerza
ejercida, debido a que el objeto es tolerado por las dos secciones
de la soga. De esta manera, la fuerza aplicada se reduce a la
mitad. Y la distancia a la que se debe tirar de la cuerda es del
doble.
9. POLEAS COMPUESTAS: el sistema de poleas
compuestas se utiliza con el propósito de alcanzar una
amplia ventaja de carácter mecánico, levantando objetos
de gran peso con un esfuerzo mínimo. Para su ejecución
se emplean poleas fijas y móviles. Con la primera se
cambia la dirección de la fuerza a realizar. El sistema de
poleas móviles más común es el polipasto, cuyas
características se detallan a continuación:
POLIPASTO O APAREJO: en este sistema las poleas
están ubicadas en dos conjuntos, en el primero se
encuentran las poleas fijas y en el segundo las móviles. El
objeto o la carga se acopla al segundo grupo. Los
polipastos cuentan con una gran diversidad de tamaños.
Aquellos más diminutos son ejecutados a mano, mientras
que los de mayor tamaño cuentan con un motor.
10. POLIPASTOS:
Se llama polipasto a una máquina que se utiliza para levantar o
mover una carga con una gran ventaja mecánica, porque se
necesita aplicar una fuerza mucho menor que el peso que hay
que mover. Lleva dos o más poleas incorporadas para
minimizar el esfuerzo.
Se utilizan en talleres o industrias para elevar y colocar
elementos y materiales muy pesados en las diferentes
máquinas-herramientas o cargarlas y descargarlas de los
camiones que las transportan. Suelen estar sujetos a un brazo
giratorio acoplado a una máquina, o pueden ser móviles
guiados por rieles colocados en los techos de las naves
industriales.
Los polipastos tienen varios tamaños o potencia de elevación;
los pequeños se manipulan a mano y los más grandes llevan
incorporados un motor eléctrico