3. LA SOCIEDAD Y LA LITERATURA EN EL
SIGLO XV (I)
El siglo XV responde a un periodo de crisis, transición y transformación que se manifiesta en
cambios a diversas escalas: políticos, sociales, económicos y culturales. La Edad Media llega a
su fin y comienzan a desmoronarse los pilares que sustentaban la sociedad medieval
(cristianismo y feudalismo).
• La unión de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón comporta la unión política de la
península y el nacimiento de una España como estado moderno centralizado.
• Crecen los conflictos entre los reyes y la nobleza: se la somete, atrayéndola a las cortes para
tenerla más controlada y evitar la inestabilidad política que producía su poder (lo que a su
vez favorece el desarrollo de la cultura y literatura cortesana).
4. LA SOCIEDAD Y LA LITERATURA EN EL
SIGLO XV (II)
• Con la unificación y la toma de Granada, se decreta que todos los musulmanes y judíos
escojan convertirse al cristianismo o abandonar el territorio:
- A los judíos que deciden marcharse se les conocerá como “judíos sefardíes”; en
cambio, a los que se quedaron, como “judíos conversos” (aunque estos sufrirán cierta
discriminación).
- La mayoría de musulmanes se quedarán y, aparentemente, se convierten, a los que se
les conocerá como “moriscos” hasta su expulsión definitiva en el siglo XVII.
- Nacerá el tribunal de la Santa Inquisición, con el motivo de vigilar a estos “nuevos
cristianos” y con la competencia de juzgarlos y condenarlos a cárcel e incluso a muerte.
Poco a poco va ampliando sus competencias: brujerías, herejías o cualquier amenaza a
la doctrina cristiana (llega a condenar a filósofos y a científicos).
- La sociedad queda dividida en “cristianos viejos” y en “cristianos nuevos”, una división
cada vez más obsesiva y acentuada con respecto a los que no tenían “limpieza de
sangre”.
5. LA SOCIEDAD Y LA LITERATURA EN EL
SIGLO XV (III)
• La burguesía (artesanos y comerciantes) cobra cada vez más poder económico, pese a seguir
formando parte de los estamentos no privilegiados. Sus valores van cobrando más significado:
el trabajo personal por encima del apellido, el materialismo, el sentido práctico, el
individualismo… y sobre todo una actitu más vitalista. Se gesta la figura del mecenas.
• La religiosidad medieval pierde fuerza y empiezan a surgir corrientes religiosas que daban más
importancia a la espiritualidad interior.
• Además de la guerra, se valora la cultura como virtud imprescindible del hombre moderno,
especialmente el conocimiento de los autores clásicos (como aspecto precursor del
humanismo).
• En esta época tienen lugar grandes descubrimientos que abren paso a la Edad Moderna:
- El descubrimiento de América en 1492.
- La brújula y nuevas formas de comunicación.
- La pólvora.
- La imprenta, el 1450, por Gutenberg, que supone la difusión masiva de obras clásicas y
modernas.
- La primera Gramática castellana de Antonio de Nebrija, 1492.
6. LA SOCIEDAD Y LA LITERATURA EN EL
SIGLO XV (IV)
POESÍA CULTA O CORTESANA
- Poesía cancioneril, que imita la lírica provenzal (sur de Francia) del siglo XII. Se trata de una
poesía amorosa destinada al canto.
- Poesía alegórica, influida por la literatura clásica latina y por la obra de autores italianos (Dante
y Petrarca). Se trata de una poesía filosófica y moralizante sobre la fama, la fortuna y la
muerte.
NOVELA DE GÉNERO
- Novela de caballerías. Obras idealistas e inverosímiles que narran las fantásticas aventuras de
un caballero andante que, movido por el amor, se enfrenta a colosales peligros, de los que
resulta siempre triunfador.
- Novela sentimental. El amor frustrado lleva al amante a apartarse del mundo y a actuar como
un héroe trágico.
TEATRO
Auto de los Reyes Magos.
La danza general de la muerte.
7. Con la entrada de la nobleza en las cortes, se facilita su acceso a la cultura, escritura y
literatura. Así, surge el perfil ideal del noble diestro en las armas y en las letras capaz de
alcanzar su fama a través de la literatura.
En este contexto llega a la península la lírica trovadoresca: poemas escritos por y para nobles,
recitados o cantados por un trovador en la corte, y que nos llegan recogidos en los
“Cancioneros” (antologías, obras colectivas que recogen poemas de numerosos poetas
cortesanos como el Cancionero de Baena, cuidadosamente encuadernados, muchos de ellos
ilustrados e incluso acompañados de las partituras.).
POESÍA CULTA: LOS CANCIONEROS Y EL
AMOR CORTÉS (I)
8. Aunque también tratan otros temas (satíricos, morales o políticos), la mayoría de los poemas
que se recogen son de temática amorosa, pero entendiendo el amor como un sentimiento
convencional, artificioso y codificado: el amor cortés. Lo más frecuente es la queja amorosa del
poeta al sentirse rechazado por la dama, de la cual se considera su vasallo sentimental.
Un caballero se siente enamorado de una dama superior a él (social y moralmente), el
amor es inevitable (ella es tan bella y perfecta que es imposible no amarla), pero
imposible. El caballero se convierte en un “servidor” de la dama, como un vasallo de su
señor, y al no ser correspondido, provoca un intenso sufrimiento en el amante del que no
puede escapar, y que solo acabará con la muerte. El sentimiento es ennoblecedor,
espiritual, constante y fiel, de tal intensidad, que a veces adora a su amada tanto o más
que a Dios.
POESÍA CULTA: LOS CANCIONEROS Y EL
AMOR CORTÉS (II)
El sentimiento contradictorio que expresan estos poemas se materializa en composiciones
rebuscadas, retorcidas, abstractas, oscuras y artificiosas, en las que se despliegan un repertorio
de metáforas, juegos de palabras, paradojas y antítesis. La métrica es regular, la rima
consonante y predominan los versos octosílabos en diversas combinaciones o estrofas.
9. EL MARQUÉS DE SANTILLANA
El Marqués de Santillana (1398-1458) perteneció a una familia rica, culta y poderosa del siglo
XV. su abuelo y su padre también fueron guerreros y poetas.
Como político tuvo una gran influencia en el reino de Castilla y también mantuvo relaciones con
el reino de Aragón durante el reinado de Alfonso V. Conoció la cultura renacentista italiana, fue
un gran admirador de Dante y su Divina comedia y de Petrarca. De ellos aprendió en uso del
endecasílabo, fue el primer poeta de la literatura española en utilizar el soneto al estilo
petrarquiano.
Además de cultivar la lírica culta, sus obras más famosas son las serranillas: canciones
populares en versos cortos en las que un caballero solicita el amor de una campesina.
10. JORGE MANRIQUE (1440-1479)
Jorge Manrique, criado en el seno de una de las familias castellanas más poderosas (sobrino del
Marqués de Santillana), también fue guerrero y poeta. Aunque escribió muy poco, una de sus
obras, Coplas a la muerte de su padre, es una de las obras líricas más famosas de la literatura
española, escrita a partir de la reflexión y los sentimientos que provocaron en él la muerte
debida al cáncer de su padre, Rodrigo Manrique, en 1476.
Se trata de una elegía con una reflexión filosófica sobre la fugacidad de la vida, el valor
liberador de la muerte y un homenaje a su padre.
El lenguaje es sencillo y natural, aunque muy cuidado, propio de la lírica culta del siglo XV.
Introduce la copla de pie quebrado, también conocida como estrofa manriqueña.
11. LAS COPLAS A LA MUERTE DE SU PADRE
PRIMERA PARTE: La vida en la tierra (coplas de la 1 a la 14). Trata sobre la necesidad de vivir
cristianamente para alcanzar la vida eterna después de la muerte. Se trata la muerte desde un plano
general, como el fin igualador de todos los seres humanos que no tiene en cuenta las diferencias sociales
y económicas que hay entre las personas.
12. LAS COPLAS A LA MUERTE DE SU PADRE
SEGUNDA PARTE: La vida mortal, perecedera (coplas de la 15 a la 24). El poeta exalta el esplendor de las
cortes medievales (fiestas y riquezas), para remarcar que todo pasa y que de las alegrías y ambiciones,
con el paso del tiempo, no queda nada. La muerte aparece como el fin de los hombres poderosos y de las
bellas damas de la corte.
13. LAS COPLAS A LA MUERTE DE SU PADRE
TERCERA PARTE: La vida eterna y la fama (coplas de la 25 a la 40). La muerte aparece en un primer
plano, con la muerte de un hombre concreto llamado Rodrigo Manrique, la figura de su padre, el
comendador Manrique. Alaba sus cualidades y su valentía al enfrentarse sin miedo a la muerte,
aceptándola como el final y el transcurso al paraíso.