2. E – 26-006-A-10 ¶ Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés
Esta evolución se manifiesta por una modificación e
innovaciones en la práctica, que está en función de los
datos epidemiológicos actuales y las prospectivas.
Hechos históricos y evolución
profesional
Antes de abordar las prácticas actuales y con el fin de
comprender esta evolución, es interesante situar algunas
referencias históricas de la ergoterapia, en particular en
Francia.
Si bien la actividad ha mostrado desde la Antigüedad
sus beneficios en materia terapéutica, la ergoterapia ha
conocido un auge particular, como otras profesiones
sanitarias, como resultado de grandes acontecimientos
sanitarios mundiales.
Los datos literarios históricos de la ergoterapia [1-4]
muestran su desarrollo inicial en torno a los problemas
psiquiátricos, pero progresivamente los «efectos beneficiosos de la actividad en los pacientes» abrieron perspectivas variadas y adaptadas a un encuadre nosológico
mayor. En particular, los dos grandes conflictos del siglo
XX han catalizado las modalidades de una reinserción
eficaz, rápida y organizada de los heridos de guerra [5, 6].
En paralelo, aprovechando un mismo impulso de
búsqueda y de dinámica socioeconómica propicia, se
hicieron grandes evoluciones medicoquirúrgicas alrededor de problemas de salud que hasta entonces habían
tenido consecuencias muy invalidantes, incluso letales.
Se citan algunos tipos de etiologías que habitualmente
se ven en medicina física: la cirugía protésica de cadera
y, más tarde, de rodilla, la microcirugía tendinosa o
nerviosa, los protocolos de reanimación y del despertar
del coma, los antiespasmódicos, los antiparkinsonianos,
etc. Es así como las afecciones reumáticas y las enfermedades ortopédicas y neurológicas se han visto beneficiadas por programas terapéuticos multidisciplinarios
innovadores, en los cuales una gran parte ya no va
destinada sólo a la terapéutica farmacológica, sino sobre
los agentes físicos y la reeducación.
Dentro de este mismo período se reforzaron los
acercamientos pluridisciplinarios de estas enfermedades
tan a menudo invalidantes y el proceso de acompañamiento se amplió: el acercamiento esencialmente sanitario se completa con intervenciones medicosanitarias
donde secuelas e incidencias funcionales, a veces evolutivas, se toman en cuenta prioritariamente dentro del
seguimiento de los pacientes que las sufren.
Es dentro de este contexto que se desarrolla la ergoterapia en Europa, donde ha demostrado ser una terapéutica no farmacológica con una complementariedad
eficaz en las intervenciones reeducativas y readaptativas.
Morel-Bracq [7]ha narrado la mutación de la ergoterapia en relación a las evoluciones del concepto de la
discapacidad y, más precisamente, del paso de una
organización lineal, en un principio propuesta por
Wood en la década de 1980 [8] , a una organización
multifactorial e interdependiente de la clasificación del
funcionamiento, la discapacidad y la salud promulgadas
por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en
2001 [9].
Botokro [10] y Bourrelis [11] han descrito, de igual
modo, la evolución de la ergoterapia refiriéndose a la
noción de actividad como determinante de salud.
Botokro se apoya sobre la pluralidad de ejercicios (en
diversos lugares y con distintos modelos) reunidos
alrededor de una misma estructura basal que es la
actividad como vector de terapia. Bourrelis revisita la
historia de la profesión desde cuando era una conducta
casi intuitiva, salida de la pura observación clínica,
hasta los escritos profesionales reforzados por las teorías
cognitivoconductuales más actuales.
En Francia, dos leyes han favorecido la evolución de
la práctica de la ergoterapia: la una «orientada a favor de
2
las personas discapacitadas» y otra «por la igualdad de
derechos y oportunidades, la participación y la ciudadanía de
las personas con discapacidad». Estas leyes sitúan claramente la preocupación por la inserción y el acompañamiento ciudadano de las personas en situación de
discapacidad. La ley ha definido de manera muy clara
los cinco dominios de la discapacidad: psíquica, sensorial, mental, cognitiva y física.
Es, pues, una coyuntura multifactorial la que ha
supuesto una modificación y una adaptación de las
prácticas de ergoterapia. Se describen aquí cuatro
factores de influencia:
• En primer lugar se encuentran la demografía y las
preocupaciones de la sanidad pública francesa. La
investigación «discapacidad-incapacidad-dependencia»
(realizada por el INSEE en 1998-2002) demuestra que
cerca de una persona de cada tres encuentra dificultades, ya sean de tipo motor, sensorial, intelectual o
mental en la realización de sus actividades comunes.
A esta constante hay que añadir en envejecimiento de
la población, así como los riesgos sanitarios y sociales
que engendra esta evolución demográfica.
• El segundo factor es la transferencia de las innovaciones tecnológicas a los dominios de la salud y las
situaciones de discapacidad. Existen además otras
investigaciones fundamentales o clínicas que quieren
impactar directamente sobre las consecuencias de las
afecciones degenerativas, neurológicas o traumáticas
(estimulación eléctrica funcional, proyecto «RESCUE»
[Research Endeavor for Spinal Cord in United Europe]
de reparación de los traumatismos medulares [proyecto coordinado por un equipo del INSERM en
Montpellier], proyecto de exoesqueleto «REWALK»
[exoesqueleto destinado a la marcha de los pacientes
parapléjicos desarrollado en Israel], etc.), todas las
ayudas tecnológicas que se han desarrollado considerablemente en los últimos 20 años (conducción de
automóviles, robots de asistencia, sistemas de control
del entorno y comunicación, etc.) han puesto al
servicio de las personas discapacitadas las últimas
innovaciones en robótica y domótica.
• El tercer factor de influencia es la concretización de
los aspectos legales y reglamentarios, de los cuales, los
más recientes son los surgidos tras la segunda ley.
Varias instituciones gubernamentales para las personas mayores y las personas discapacitadas como la
Caja Nacional de Solidaridad para la Autonomía de
Ancianos y Personas Discapacitadas, han permitido
una muy esperada apertura para los ergoterapeutas,
para que puedan ejercer sus actividades bajo un
mismo contexto sanitario. Las estructuras que pertenecen al desarrollo del acompañamiento a las personas en situación de discapacidad (equipos técnicos de
emplazamiento de vida autónoma [SVA], servicio de
acompañamiento a la vida social [SAVS], servicio de
acompañamiento medicosocial para adultos discapacitados [SAMSAH]) confirman este movimiento progresivo de la actividad de los ergoterapeutas desde el
sector sanitario hacia el sector medicosocial.
• Por último, es esencial considerar las influencias
extranjeras sobre la práctica francesa. Si no es necesario dar pruebas de la influencia anglosajona (America
del Norte, Australia) [12-16], hay igualmente un
impacto de los estudios del Consejo de Terapeutas
Ocupacionales de Países Europeos (COTEC) y del
grupo de la Red Europea de Terapia Ocupacional en
la Educación Superior (ENOTHE) quienes en
2005 promulgaron el texto de referencia de las competencias del ergoterapeuta [17] . Este texto define
35 competencias que deben adquirirse en una formación inicial, alrededor de seis campos:
C el conocimiento de la ergoterapia;
C el proceso de intervención y el razonamiento
profesional;
Kinesiterapia - Medicina física
3. Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés ¶ E – 26-006-A-10
C las relaciones y las asociaciones profesionales;
C la autonomía y la responsabilidad profesional;
C la investigación y el desarrollo de la ergoterapia en
las ciencias la actividad humana;
C la gestión y la promoción de la ergoterapia.
Fundamentos y conceptos
Definición de la profesión
La definición más reciente de la literatura francófona
es la que propone la Asociación Nacional Francesa de
Ergoterapeutas (ANFE) en su guía práctica [18] : «La
ergoterapia es una terapia a través de la actividad. La
ergoterapia está dirigida a las personas con enfermedades o
deficiencias de naturaleza somática, psíquica o intelectual, a
las personas que presentan incapacidades o a las personas en
situación de discapacidad temporal o definitiva. El objetivo
de la ergoterapia es permitir a estas personas mantener o
desarrollar su potencial de independencia y de autonomía
personal, social, escolar o profesional. La ergoterapia es una
profesión de la salud que interviene en el terreno de la
reeducación, de la readaptación y de la reinserción. Se refiera
a las ciencias humanas, médicas, psicológicas, sociales y
técnicas».
Detraz, en 1992 [19], ya había evocado tres aspectos de
esta profesión: la reeducación, la readaptación y el
consejo. Estas tres modalidades de intervención se
completan por la definición de acciones precisas, que a
su vez dan lugar a distintas propuestas frente a las
actividades de referencia solicitadas por el ministerio
dentro del marco de la redefinición de las profesiones
de la salud.
Las prácticas de ergoterapia se articulan en torno a los
temas siguientes:
• la evaluación de las deficiencias y de sus consecuencias, así como de los componentes del entorno
humano y material, integrados dentro de las actividades sociales, escolares o profesionales. Dicho de otro
modo, no es el síntoma clínico el que interesa prioritariamente al ergoterapeuta (si bien se debe tener en
conocimiento dentro del marco del diagnóstico
médico) sino la incidencia de este síntoma;
• la utilización de actividades y escenificaciones elegidas por su pertinencia y su rendimiento terapéutico o
por su aptitud para desarrollar nuevas competencias o
nuevas estrategias que reduzcan las situaciones de
minusvalía o dependencia. Es necesario igualmente, a
través de estas acciones, mantener un potencial de
actividad en los planos tanto físico como cognitivo o
relacional;
• el acompañamiento en el proyecto de vida individual,
para el desarrollo de soluciones personalizadas y no
de una terapéutica estandarizada o de una recomendación sistematizada;
• la realización de aparatos ortopédicos y de dispositivos para el posicionamiento;
• el análisis de los lugares en que se hace vida, en
particular de la vivienda según de las disposiciones
técnicas y arquitectónicas;
• la propuesta de ayudas tecnológicas y sobre todo el
aprendizaje para su utilización perenne.
Finalidades actuales de la ergoterapia
En la actualidad, tras haber conocido en Francia un
período de búsqueda de identidad en la década de 1970,
la ergoterapia ha sido claramente clarificada.
En primer lugar, se trata de participar en acciones
terapéuticas en el terreno de la reeducación. Estas
acciones están limitadas y claras; esencialmente, tienen
un enfoque funcional e integrador.
También se han desarrollado acciones dentro del
terreno de lo cognitivo y del comportamiento. Pero este
Kinesiterapia - Medicina física
aspecto está siendo sustituido progresivamente por el
campo de la readaptación y la reinserción.
En la actualidad, las primeras demandas formuladas a
los ergoterapeutas son la evaluación de la dependencia,
la búsqueda de soluciones compensatorias de las situaciones de dependencia, la preparación a las actividades
de la vida diaria explotando las capacidades restauradas,
así como el acondicionamiento de los lugares en que se
hace vida y las actividades personales (profesión, aficiones, etc.).
Esta misma evolución es la que intensifica las prestaciones en educación terapéutica del paciente, así como
de su entorno.
Soportes teóricos y desarrollo de la ciencia
de la actividad humana
¿Cómo actúa la ergoterapia? ¿Cuáles son los fundamentos teóricos de su intervención?
Se han desarrollado diferentes modelos para explicitar
sus registros de intervención. En Francia, no existe una
referencia teórica, elaborada por un grupo de trabajo
francófono, que se recomiende como única referencia;
por eso, los ergoterapeutas se inspiran en su desarrollo
en los países anglosajones.
Morel-Bracq [7]ha definido dos tipos de referencias
teóricas:
• los modelos explícitos de la salud y la discapacidad
(procesos de producción de una minusvalía [PPH] de
Fougeyrollas [20], clasificación internacional de funcionamiento [CIF] [9] , sistema de identificación y
medida de una discapacidad [SIMH] [21]);
• los modelos desarrollados por los ergoterapeutas para
dar sentido a sus acciones (modelo canadiense del
rendimiento ocupacional [MCPO] [22] , modelo de
la ocupación humana [MOH] de Kielhofner [14] o
el occupational performance model [OPM] [23] en
Australia).
Dentro de la segunda referencia, existe un vínculo
entre los distintos acercamientos: se trata de las investigaciones desarrolladas dentro del marco de la ciencia de
la actividad humana. Ampliamente practicada en los
Estados Unidos, en el Reino Unido, en Canadá en
Australia y en Japón, abre hoy día recorridos de doctorado y numerosos ejes de investigación sobre la metodología de las ciencias humanas.
Según Whiteford [24], la ergoterapia ha encontrado
dentro de esta disciplina los fundamentos de las interacciones entre «lo que la gente hace y su propio estado de
salud o de bienestar». Siempre según Whiteford, los
estudios realizados dentro de la ciencia de la actividad
humana contribuyen a mejorar positivamente los
servicios rendidos a los beneficiarios de prestaciones de
ergoterapia y facilitan la inclusión de estas intervenciones dentro del complejo panorama de las prácticas
profesionales de la salud y los actores sociales.
Una referencia consensual: la clasificación
internacional de funcionamiento
Dentro de los países francófonos, se desarrollan dos
corrientes históricas. Los ergoterapeutas belgas, suizos y
sobre todo de Quebec, han integrado, de manera más o
menos importante la ciencia de la actividad humana
como base de trabajo y fundamento del ejercicio profesional, mientras que en Francia, es esencialmente la
modulación de la CIF la que orienta la reflexión
profesional.
Aunque estas tendencias no son en ningún caso
antinómicas, se traducen en una serie de prioridades de
intervención que no son en absoluto asimilables las
unas a las otras.
La CIF es compartida por la mayor parte de los
intervinientes en la readaptación, tanto en el plano del
diagnóstico clínico como sobre la evaluación e, incluso,
sobre la organización de las acciones.
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4. E – 26-006-A-10 ¶ Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés
Para la ergoterapia, el interés de la CIF reside en
varios cambios respecto a la clasificación internacional
antigua de la discapacidad (CIH): para empezar, la CIF
incluye los factores del entorno que son uno de los ejes
de preocupación prioritaria del ergoterapeuta dentro de
su análisis de la situación de discapacidad. Además, hay
una modificación en la conducta misma del avance del
análisis: la CIH abordaba la discapacidad tan sólo a
través de elementos negativos (deficiencias, incapacidades, desventajas) mientras que la CIF recomienda un
análisis que integre los aspectos «constructivos» de la
persona (actividades, participación). No se trata de
identificar lo que no funciona, sino las razones de estas
disfunciones.
Esta clasificación presenta en todos los casos un
límite no despreciable: la complejidad de su cotización,
la cual necesita un conocimiento preciso del proceso de
codificación. Esta complejidad ha podido influir negativamente en su democratización y utilización.
El desarrollo de centros de investigación así como los
enlaces con otros países (europeos, norteamericanos,
australianos) han hecho evolucionar los elementos de la
CIF y han conducido sin duda a una definición mejor
adaptada a las realidades sociológicas francesas, incluso
respecto a sus obligaciones económicas y demográficas.
Por ahora, la CIF queda como un valor consensual que
apoya las acciones de un mayor número de
profesionales.
Gestiones y procesos de intervención
Como toda intervención de la salud, la ergoterapia
responde a un proceso riguroso y, a través de procedimientos reconocidos, cada vez más estandarizado.
Según el país, este proceso está descrito con más o
menos cantidad de etapas. Por ejemplo, Meyer compara
las tres etapas del proceso definido por la Asociación
Estadounidense de Ergoterapeutas a las once etapas
propuestas por el Colegio Inglés de Ergoterapeutas [25].
En cualquier caso, se trata siempre de ergoterapia; el
hilo conductor de la intervención queda sin cambiar.
El proceso de intervención francés, descrito en
2000 por Detraz [26]en su guía práctica, se define, de
manera consensuada, en cinco fases:
• la evaluación inicial;
• la determinación de los objetivos que se quieren
alcanzar;
• la selección de los modos de intervención;
• la puesta en marcha de la intervención;
• la evaluación intermedia o final.
La evaluación intermedia sirve para ajustar el plan de
intervención inicial, en particular en el caso de limitación en la progresión, para poder ver las complicaciones
intercurrentes que necesiten redefinir nuevos objetivos.
Importancia de la evaluación inicial. Noción
de diagnóstico de ergoterapia
El proceso de evaluación en ergoterapia es, sin duda,
lo que más ha evolucionado en la práctica profesional.
A finales de la década de 1990, la metodología de
evaluación sufrió dos grandes reformas implícitas.
Para empezar, la evaluación se ha convertido en un
proceso sistemático, riguroso y cada vez más estandarizado. Ninguna de las etapas de ergoterapia se realiza sin
esta etapa previa. La información recogida se pueden
procesar gracias al soporte que constituye el informe del
paciente en ergoterapia recomendado por la Alta Autoridad Sanitaria (HAS) [27].
Además, las herramientas de evaluación se adaptan
con rapidez a las necesidades de estandarización, rigor
metrológico o coherencia de contenidos. Por eso,
las herramientas validadas de recogida de datos han
sustituido progresivamente a las evaluaciones
empíricas [28-31].
4
Estas herramientas o soportes de evaluación reagrupan los instrumentos que aseguran la valoración cuantitativa de un estado, pero también los métodos
cualitativos, entre los que se encuentran los procesos de
autoevaluación, utilizados ampliamente, en particular
dentro del marco de las afectaciones crónicas o dentro
del contexto de enfermedades con consecuencias gravemente invalidantes [32].
Los profesionales están de acuerdo hoy día en distinguir como mínimo dos contextos específicos de evaluación [33]:
• en primer lugar el contexto sanitario, en el cual se ha
de medir la separación entre las capacidades observables y una capacidad teórica para realizar una acción.
Este contexto es el mismo donde se hace la evaluación de las necesidades y los deseos de la persona.
Existen numerosas pruebas y protocolos de evaluación, algunos de los cuales son compartidos con otras
profesiones de la salud. Cabe recalcar que, dentro del
ámbito de la independencia, el uso de la medida de
independencia funcional (MIF) [34], si bien es discutida, permanece como una herramienta de evaluación
utilizada con frecuencia para valorar las capacidades
funcionales de la persona. También recalcar el débil
porcentaje de pruebas de origen francófono o traducidas y revalidadas por equipos franceses. La mayoría
de pruebas utilizadas surgen del «hábito» profesional;
• en el contexto de la reinserción social y profesional,
la evaluación de las capacidades queda presente, pero
se trata sobre todo de integrar dentro de las dificultades de la persona su relación con sus condiciones de
vida, con su actividad profesional y con su espacio de
trabajo o, incluso, con su contexto arquitectónico o
urbano. Esta segunda dimensión de la evaluación es
compleja y necesita tener en cuenta numerosos
factores.
Una de las herramientas desarrolladas actualmente
dentro de este terreno, es la guía de evaluación multidimensional (GEVA) de la Caja Nacional para la Solidaridad y la Autonomía (CNSA). Su utilización se enmarca
dentro de la «misión de evaluación de las necesidades de la
persona en su proyecto de vida».
Es necesario añadir a esta guía otros instrumentos de
medida más especializados (estudios ergonómicos,
evaluaciones arquitectónicas, etc.), de las cuales muy
pocas están validadas actualmente.
Dentro de la propuesta de los procesos de intervención, Meyer [35] recomienda dos tipos de evaluación que
utilizan la terminología de las ciencias de la educación.
La práctica de la evaluación formativa implica al conjunto de los recursos de puesta en marcha para elaborar
la situación-problema definida como diagnóstico de
ergoterapia. La evaluación sumativa mide los resultados
de la intervención, la cual queda como el «pariente
pobre» dentro de las prácticas profesionales sometidas a
obligaciones temporales y organizativas; por tanto, la
cualidad de la intervención de ergoterapia y así mismo
su reconocimiento y su promoción, están ligadas directamente a esta acción evaluadora del impacto del
trabajo realizado con el beneficiario y según su apreciación. El terapeuta puede estar enteramente satisfecho de
una prestación sin que el paciente o su entorno compartan este punto de vista.
La finalidad de la evaluación es proponer un diagnóstico profesional [36] . Esta noción de diagnóstico de
ergoterapia no ha dado, por el momento, lugar a un
reglamento y a una definición legal. De todos modos,
este diagnóstico se pide explícitamente en todas las
intervenciones de ergoterapia.
Es entonces lícito proponer referencias simples para la
elaboración del diagnóstico de ergoterapia. Si se conserva la CIF como la referencia más consensuada dentro
de las prácticas de ergoterapia, sus distintos componentes influirán a todas las actividades. Ésta es, sin duda, la
Kinesiterapia - Medicina física
5. Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés ¶ E – 26-006-A-10
razón por la cual esta noción de actividad es el centro
de todas las representaciones esquemáticas de la CIF. La
restricción de las actividades es una de las primeras
constataciones. Si bien no es la primera causa de consulta, se asocia de modo prácticamente sistemático a la
expresión estética o motora del problema por el que se
consulta. «Tengo dolor y éste me impide realizar mi trabajo», etc. Se propone entonces definir la actividad
como el soporte del diagnóstico de ergoterapia.
Este diagnóstico se expresa en dos niveles:
• la realización de la actividad se ve imposibilitada o
restringida; éste es el análisis «cuantitativo» de la
alteración de la actividad;
• además, hay que precisar la vastedad «aspecto cuantitativo» que se establece sobre el análisis realizado
por el ergoterapeuta, que se puede expresar temporalmente y, en ocasiones, en relación con el entorno
situacional.
Se mencionarán dos ejemplos: «Imposibilidad temporal
para lavarse solo en el baño» y «Dificultades permanentes
para ducharse con riesgo de caída». Se trata de la misma
actividad (la higiene), pero de dos contextos de entorno
diferentes (baño y ducha); en cada caso, la alteración es
perenne o temporal. El lector habitual habrá dilucidado
rápidamente, tras estos dos ejemplos, contextos nosográficos simples tales como una lesión traumática o una
cirugía ortopédica del miembro inferior en el primer
caso y las consecuencias de un accidente cerebrovascular
en el segundo. Cabe señalar que también puede variar
el contexto clínico: el primer caso podría ser también
un paciente amputado por problemas arteriales sin
aparato ortopédico y el segundo una persona víctima de
una lesión tumoral cerebelosa grave.
Esto demuestra la importancia del análisis del contexto que se realiza previamente de estas investigaciones, aunque también es la consecuencia de la afectación
lo que interesa, de manera prioritaria, al ergoterapeuta.
El impacto de la enfermedad o la disfunción sobre la
actividad no es suficiente para establecer el diagnóstico
de ergoterapia. Esto último permite precisar de entrada
el o los sectores donde será sin duda necesario intervenir, pero será insuficiente si las causas de esta limitación
no se definen. De este modo, la segunda parte del
diagnóstico de ergoterapia requiere determinar la etiología de la alteración.
Lo interesante aquí, reside en «cruzar» los datos
recogidos previamente gracias a los distintos instrumentos de medición.
A modo de ejemplo: una evaluación de las actividades
de la vida diaria en una persona hemipléjica anciana, ha
permitido observar una limitación de las capacidades de
transferencia durante el curso de las actividades del baño.
Esto se confirma por dos pruebas: la de la motricidad global
del miembro inferior pléjico (como la prueba de Manoli), la
cual es deficitaria, así como las prueba de Tinneti. Se ha de
precisar aquí la limitación de la actividad ligada a un déficit
del control voluntario asociada a un problema de equilibrio.
Si ninguna otra afección (laberíntica, cerebelosa o sensitiva)
se confirma, ya sean los datos del estudio médico clínico
como el resto de pruebas practicadas, se hace entonces
evidente que el problema en el control voluntario y la
ausencia de reacciones reflejas protectoras son la causa
principal de la limitación de la actividad.
Mientras que la CIH propone una descripción lineal
de la situación de discapacidad «desventaja» (cuyo
origen ha sido constituido por la deficiencia) este
acercamiento propone una reflexión prácticamente
inversa y con conclusiones plurimodales. En este sentido, la alteración de la actividad puede estar causada
por varios factores, a menudo orgánicos, pero también
del entorno o sociales. Estos factores pueden reforzar el
trastorno orgánico o crear la inadecuación con las
necesidades de la persona.
Kinesiterapia - Medicina física
A menudo es necesario asociar a estas nociones el
pronóstico conocido o hipotético de la evolución de la
clínica o de los factores contextuales.
La alteración de la actividad se puede traducir por un
estado de dependencia que refuerza así la evaluación
cualitativa.
Siempre a modo de ejemplo, uno puede formular un
diagnóstico de ergoterapia sobre este modelo: «La señora
X es particularmente dependiente para las actividades de la
vida diaria. En particular, en este momento, no puede
realizar sola ni las transferencias ni la higiene en el baño.
Las dificultades de la señora X están relacionadas con una
hemiplejía braquifacial derecha de buen pronóstico, que
actualmente se traduce en un déficit de control voluntario a
nivel del hemicuerpo derecho así como una amiotrofia de
este mismo lado (medidas comparativas). Los trastornos
sensitivos son menores, si bien se debe tener en cuenta que
existe riesgo de traumatismo. No se ha demostrado una
alteración de las actividades de comunicación y las relaciones son fáciles y espontáneas».
Cuanto mejor y más precisa sea la evaluación de las
causas de la alteración de la actividad, más adaptado
estará el programa de intervención.
Cabe señalar que este acercamiento no contradice los
protocolos de intervención estandarizados llegados de
las declinaciones prácticas de las recomendaciones
profesionales. Al contrario, permite validar la pertinencia de estos programas así como su utilización y, de
igual modo, acompañar estos programas con otras
intervenciones complementarias a fin de considerar
todas las soluciones al problema de alteración de la
actividad.
Por otra parte, Meyer [25] muestra como esta actividad
se inscribe en lo que Rogers y Masagatani [37] han
definido como el método de razonamiento diagnóstico.
Sin embargo, parece que este acercamiento no corresponde a todas las prácticas de ergoterapia (en particular
en salud mental o dentro del marco de las intervenciones medicosociales).
Por eso, los autores de este artículo proponen dos
niveles de elaboración diagnóstica:
• el prediagnóstico corresponde a dos pasos clásicos para
el ergoterapeuta: la entrevista y la observación. Estas
dos primeras fuentes de información permiten al
profesional seleccionar con más pertinencia los
instrumentos de medición adaptados a la situación en
seguimiento. A partir de este análisis del resultado de
la evaluación y sus medias, se puede realizar el
diagnóstico de ergoterapia;
• el diagnóstico se realiza después, cuando se obtiene la
interpretación y el razonamiento clínico resultado de
la recogida de información.
También es corriente ver el diagnóstico de ergoterapia
formulado como una «situación-problema», visto como
un conjunto de problemas, cada uno justificando la o
las intervenciones terapéuticas, de disposición o de
compensación, que se realizan dentro del programa de
ergoterapia [38].
Prioridades de intervención
Una vez se realiza el diagnóstico, resulta posible
elaborar un programa de intervención respaldado por la
formulación de objetivos.
Detraz [39] propone una clasificación simple pero
explícita de estos objetivos en cuatro secciones definidas
según la finalidad de la intervención:
• los objetivos tienen en cuenta los factores de riesgo,
que se centran esencialmente en las acciones sanitarias y preventivas (protección articular, etc.);
• los objetivos centrados en los factores ambientales
dependen de la influencia reconocida que tengan los
factores ambientales dentro del diagnóstico de ergoterapia;
5
6. E – 26-006-A-10 ¶ Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés
• los objetivos centrados en los factores personales:
incluyen la reducción de las incapacidades o el
aumento de la capacidad de realización;
• los objetivos centrados sobre la entidad «individuo/
entorno», donde se deben modificar los hábitos de
vida o los comportamientos; se busca una adaptación
del individuo a una serie de restricciones invariables
o que se considere que no justifican ningún cambio
(se trata, por ejemplo, de reentrenar en una actividad
de cocina a una persona que sufra una disminución
de la movilidad de los miembros superiores o incluso
de hacer un entrenamiento sobre las actividades
domésticas para un paciente con lumbalgia, etc.).
Actualmente, estos objetivos a menudo se elaboran
dentro de un contexto de equipo pluridisciplinario y
pueden evolucionar según las evaluaciones intermediarias programadas.
Definición y elección de los programas
de intervención
Una vez se deciden los objetivos de la intervención,
el ergoterapeuta hace operativa su acción. Sin pretender
establecer un listado exhaustivo de programas de ergoterapia, es posible definir varios tipos.
Se describen esencialmente cuatro tipos de programas,
teniendo en cuenta que esta lista se puede completar
según la evolución de los datos demográficos o de las
políticas de salud:
Se trata de:
• programas terapéuticos;
• programas de readaptación y de reinserción;
• programas educativos;
• prestaciones específicas (fuera de los campos sanitarios o medicosociales).
Pero, antes de describir rápidamente estos diferentes
programas, es importante precisar la evolución. El
desarrollo de la práctica de ergoterapia y de las técnicas
empleadas se hace esencialmente a través del modo
«experimental», es decir, a través de una metodología de
tipo «investigación-acción»; las modificaciones de los
programas responden así a las evoluciones generales de
los tratamientos. En la década de 1990, en paralelo a la
voluntad de mejorar la calidad de los cuidados, los
protocolos de toma de tratamiento se han desarrollado
en los servicios de ergoterapia. Estos protocolos pueden
así integrarse dentro de los procedimientos de acreditación controlados y seguidos por la HAS [40].
Estos protocolos se elaboran a partir de la experiencia
de los profesionales, pero también se van integrando
según avanza la práctica probada. Este avance de la
práctica fundada en las pruebas se comparte hoy
ampliamente y se ve reforzada por el desarrollo de
varios centros de investigación donde están implicados
ergoterapeutas (Célula de Investigación en Ergoterapia
Aplicada [CREAP], Asociación para la Promoción de las
Nuevas Tecnologías a favor de las Personas con Pérdida
de Autonomía [APPROCHE], Centro de Recursos Discapacidad y Movilidad [CEREHM], iniciativa de la Asociación Francesa contra las Miopatías [AFM], Red de
Nuevas Tecnologías de la Asociación de Paralíticos de
Francia [RNT-APF], etc.).
Dentro de este contexto, es cada vez más frecuente
recurrir a la revisión literaria y a una metodología de
ensayo clínico. Dos bases de datos anglófonas enumeran
actualmente las producciones literarias: OTDBASE, desde
2006, indexa la revisión «ErgOThérapies» y OTSEEKER
computa más de 4.500 referencias. Esta última tiene
también la vocación de iniciar a los profesionales en la
práctica fundamentada en las pruebas a través de varias
herramientas pedagógicas.
En Europa, existe un grupo de discusión salido de
ENOTHE que desarrolla los cambios en materia de
investigación en ergoterapia y, de modo más preciso,
6
utiliza el proceso de la práctica basada en la evidencia;
se trata del subgrupo ECOTROS-EBP.
Elegir un programa de intervención responde a los
objetivos que se asuman, pero necesita también una
información precisa para el beneficiario o su entorno.
Una vez este programa haya sido presentado y comprendido, se podrá llevar a cabo eficazmente.
Finalmente, como se ha precisado anteriormente, la
actividad es el núcleo de todas las intervenciones de
ergoterapia. Esta actividad sostiene el conjunto de los
programas.
Dentro del marco de los programas terapéuticos, el
principio de intervención es sencillo: la actividad posee
«virtudes terapéuticas» al igual que los agentes físicos o
químicos usados clásicamente en los tratamientos
farmacológicos o de otro tipo. Estas virtudes terapéuticas
se activan de manera espontánea o surgen de la utilización particular de los componentes de la actividad.
La mayoría de los programas terapéuticos utilizan el
análisis de los componentes de las actividades para
utilizar su efecto sobre una alteración funcional, pero
también sobre un problema de comportamiento o una
dificultad de tipo cognitivo. Por eso, es interesante
analizar los componentes motrices de la actividad
(motricidad segmentaria y aspectos neuromotores),
sensitivos y sensoriales, cognitivos y psicodinámicos,
con el fin de hacer un inventario global de los recursos,
aislados o combinados que pueda presentar esta práctica. Los ergoterapeutas han sacado provecho de los
componentes de la actividad derivados de algunos
oficios artesanales, pero también de actividades lúdicas
o creativas. De todas, ellas, estas últimas son las más
practicadas en Francia hoy día.
Dentro de estos programas terapéuticos, también hace
falta integrar la totalidad de las acciones poco conocidas
realizadas directamente sobre el paciente. Se trata en
particular de las prácticas de equipamiento ortésico y de
las prestaciones de posturología preventiva (por ejemplo, en los servicios de neurología o geriatría) o de
adaptación (esencialmente en los niños o dentro del
contexto de enfermedades evolutivas o degenerativas).
Hay que recalcar que el equipamiento ortésico y las
ayudas posturales son esencialmente prestaciones
manufacturadas. Se trata, pues, de realizaciones únicas,
morfológica o funcionalmente adaptadas a una persona
concreta.
Las técnicas empleadas ponen de relieve los procesos
clásicos de fabricación del equipamiento ortésico
(medida, moldeado, trabajo de la espuma, fijación, etc.).
El equipamiento o las ayudas a la postura realizadas de
este modo necesitan siempre un seguimiento regular y
observar las modificaciones programadas en función del
objetivo propuesto o de la técnica quirúrgica que haya
inducido la prescripción.
Según el contexto de vida de la persona implicada y,
sobre todo, según su proyecto de vida los programas de
readaptación y de reinserción, presentan múltiples
aspectos.
Sin embargo, es posible definir algunas referencias
clásicas dentro de estos programas:
• el reentrenamiento de las actividades de independencia;
• la escenificación de situaciones de actividades complejas;
• el estudio de la situación escolar o laboral;
• el equipamiento de los lugares donde se vive.
El reentrenamiento de las actividades de independencia se realiza a partir de la escenificación de situaciones
concretas. Se trata de sesiones donde las transferencias,
la higiene, vestirse y las funciones alimentarias se
prueban y después se entrenan. Este entrenamiento
puede consistir simplemente en estimular a retomar
estas actividades sin modificar su proceso de realización.
Esta situación se encuentra a menudo en geriatría o en
Kinesiterapia - Medicina física
7. Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés ¶ E – 26-006-A-10
el despertar del coma, donde hay un enlentecimiento
global de todas las funciones y una relativa lentitud
ideatoria. Se puede tratar igualmente de llevar a cabo
situaciones integrando una consigna de realización
particular (técnica específicas de vestirse del paciente
hemipléjico, por ejemplo) o una ayuda técnica que
permita suplir una incapacidad temporal o definitiva
(ayudas técnicas para vestirse o para la alimentación,
por ejemplo).
Los programas de readaptación pueden cubrir igualmente actividades mucho más complejas, que necesiten
de una capacidad de adaptación a las variaciones del
contexto. Se citan a modo de ejemplo la realización de
actividades domésticas (como la preparación de una
comida), la habilidad de un trabajo secuenciado y de
sucesiones lógicas (informarse de horarios de transporte,
elegir uno en función de una finalidad definida previamente, su utilización, etc., también buscar ofertas de
empleo, seleccionar las adecuadas a sus competencias,
pedir cita para una entrevista, etc. Cabe señalar que
estos últimos ejemplos constan en el registro de programas cognitivos que se practican cada vez más).
Estas escenificaciones buscan automatizar el uso de
las ayudas técnicas propuestas por el ergoterapeuta o
facilitar la apropiación de procedimientos y estrategias
definidas para suplir una incapacidad, sobre todo en el
terreno cognitivo.
Es necesario aislar de estas escenificaciones de situaciones complejas el caso particular de la conducción de
un automóvil, que necesita un programa particular a la
vez que una evaluación (en situación real y en el
simulador) y el entrenamiento en el uso de aparatos
específicos. La dificultad más frecuente en este aspecto
está relacionada con las consecuencias de problemas
cognitivos, discretos o variables según el contexto, cuyo
impacto a término medio es imprevisible. Todas las
dificultades motrices han sido prácticamente superadas
gracias a una tecnología avanzada que posibilita, hoy
día, la conducción a un máximo de personas pese a
lesiones somáticas graves (tetraplejía, enfermedad
muscular degenerativa, etc.). Por desgracia, los riesgos
asociados con la conducta no permiten la adecuación
sistemática del permiso de conducir por las comisiones
especializadas tras la opinión del ergoterapeuta.
La acción de análisis de la situación escolar o laboral
se integra hoy día dentro de las misiones de las MDPH
que se han sustituido por las CDES y COTOREP. Lo más
normal es que se inicie dentro de los centros sanitarios
o medicosociales en las que permanece el paciente, en
particular en las intervenciones en el medio escolar
(ejemplos de los servicios de educación especial y de
cuidado a domicilio [SESSAD]).
Los programas de readaptación que se encargan de
acondicionar los lugares en los que se vive son los que
más sistematizada tienen su puesta en práctica. Las
barreras arquitectónicas, en particular de la vivienda,
son, a menudo, fuente de limitaciones importantes de la
actividad. Siguiendo las normas de accesibilidad [41], es
necesario realizar un estudio personalizado de la
vivienda y definir, más precisamente, las zonas de riesgo
respecto a la seguridad. El acondicionamiento de la
vivienda responde a un protocolo riguroso y metodológico [42]. Sus acciones se realizan en el momento del
seguimiento institucional de la persona [43] o bien a la
salida de una hospitalización o cuando la enfermedad
ha evolucionado y los lugares en los que se habita pasan
a ser una preocupación para la persona y su entorno.
Este tipo de intervención puede igualmente estar relevado por los medios asociados (equipos especializados
por una vida autónoma a domicilio [ESVAD] de la APF,
los servicios regionales de la AFM, etc.).
Las intervenciones de los ergoterapeutas se inscriben
también dentro del contexto más general de la educación terapéutica del paciente (ETP), que responde a las
Kinesiterapia - Medicina física
recomendaciones de la OMS [44] y de la HAS [45].
Durante una largo tiempo, las intervenciones de ETP en
ergoterapia se limitaron a las afecciones crónicas (más
precisamente a las enfermedades reumáticas), a las
enfermedades neurológicas degenerativas y a las neuromusculares, si bien naturalmente se han ido multiplicando hacia todas las situaciones de discapacidad.
A través de un seguimiento individual o más a
menudo en grupo y con la colaboración de otros profesionales de la salud, se pueden abordar las dificultades
para retomar o mantener las actividades. Pueden hacerse
propuestas generales o personalizadas para responder a
las preocupaciones de cada persona.
La parte esencial de la participación del ergoterapeuta
en la ETP reside en la escenificación de los datos
adquiridos recientemente. Así, se puede reforzar la
evaluación de las situaciones-problemas y así adaptar
mejor las soluciones educativas propuestas (citamos, a
modo de ejemplo, la «secuencia verbalizada», que puede
utilizarse en actividades no seguras para un paciente que
presente dificultades de transferencias).
También hay que citar los programas específicos que
no salen directamente del campo sanitario ni de las
prestaciones realizadas dentro del centro de acogida o
en los lugares en los que viven las personas en situación
de discapacidad. La valoración forma parte de estas
prestaciones en constante progresión. Se trata de asociar
un ergoterapeuta especializado en la evaluación del
daño corporal consecutivo a una situación relevante, ya
sea con un acompañamiento jurídico o con una fuerte
implicación de un régimen póliza de seguros. La finalidad aquí es esencialmente evaluadora, pero debe también permitir elaborar proposiciones en materia de
compensación y acondicionamiento.
El otro ámbito en crecimiento surge de la preparación
de las MDPH y de los equipos pluridisciplinarios definidos en este marco.
Hace falta igualmente citar las intervenciones de
opinión en equipamientos y en ayudas técnicas que se
obtiene o bien de centros asociativos (Centro de Informaciones y Consejo sobre las Ayudas Técnicas [CICAT])
o bien de centros descentralizados (Centro Local de
Información y de Coordinación [CLIC]). Tanto a través
de las MDPH, los CICAT o los CLIC, no se trata realmente de programas de intervención con una estructura
duradera y la búsqueda de una progresión de las prácticas de ergoterapia, sino sobre todo de prestaciones de
servicio que responden puntualmente y con la máxima
pertinencia a las demandas de los usuarios.
Algunos ejemplos de intervenciones realizadas dentro
de estas estructuras se exponen en el epígrafe siguiente.
Sectores de intervención
Advertencia previa: Para permitir al lector identificarlos
mejor, se presentan aquí los principales sectores de
intervención de la ergoterapia a través de las acciones
más clásicas, pero no la totalidad de los programas o
prestaciones de ergoterapia. Este epígrafe debe ser, por
tanto, considerado, para empezar, como una ilustración
concreta de la profesión de ergoterapeuta más que una
lista exhaustiva de su actividad.
Intervenciones dentro del contexto
de estructuras de atención de seguimiento
y de reeducación
En 2007, la ANFE estimó que cerca del 40% de los
ergoterapeutas ejercía en centros de reeducación y
readaptación del adulto [46].
Una investigación sobre las prácticas de formación
inicial [47]muestra que la población que más seguimiento de ergoterapia tiene es la que padece afecciones
7
8. E – 26-006-A-10 ¶ Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés
neurológicas centrales o periféricas, seguida por igual de
las enfermedades reumáticas y las consecuencias de
lesiones traumáticas.
Éstos son los diferentes sectores para los cuales los
programas de intervención terapéuticas están más
desarrollados, con la búsqueda de una restauración de
un potencial funcional máximo.
Cada vez con más frecuencia, los programas de
readaptación completan la permanencia en un centro
especializado. En la práctica, la gravedad de las secuelas
o las enfermedades asociadas (por ejemplo relacionadas
con la edad) hacen temer una desadaptación tras la
salida del centro. Por eso se utilizan las «ventanas
terapéuticas», durante las cuales la persona puede
constatar las problemáticas potenciales ligados, por
ejemplo, con su vuelta al domicilio. Ésta es también la
razón por la cual se han desarrollado numerosos «apartamentos terapéuticos» en los centros de readaptación:
permiten una «confrontación controlada» a la realidad
y a posibles dificultades futuras.
Intervenciones en salud mental
En Francia, el tratamiento de los pacientes psiquiátricos está regido por la sectorialización. Así, es posible
distinguir las intervenciones dentro del centro hospitalario especializado o el servicio de sector y las acciones
en exterior del hospital pero limitadas a un sector
definido. La base de este dispositivo, aparte de las
admisiones de urgencia, es el centro medicopsicológico
(CMP), que acoge, orienta y organiza la atención ambulatoria, las acciones de prevención y las intervenciones
en el domicilio. A partir del CMP también se elaboran
los proyectos alternativos a la hospitalización. Los
ergoterapeutas intervienen esencialmente dentro de
centros como:
• los centros de acogida terapéutica a tiempo parcial
(CATTP), caracterizados por llevar a cabo varios
talleres terapéuticos. Los pacientes se benefician de un
programa de atención y acompañamiento personalizado que los incluye dentro de uno o de varios de
estos talleres, ya sea a diario o con sesiones más
espaciadas o limitadas en el tiempo;
• los hospitales de día (HDJ), organizados sobre el
mismo modelo que los CATTP, que dependen de un
centro hospitalario. La acogida se hace de día o a
tiempo parcial. Los HDJ pueden llevar a cabo varias
tipos de cuidados (y tienen un precio de día) y
proponer talleres terapéuticos;
• los talleres terapéuticos, en los cuales la finalidad es
la búsqueda de una salida profesional;
• los apartamentos terapéuticos, que constituyen un
lugar dentro de la búsqueda de autonomía social; la
duración de la estancia es, a priori, limitada;
• los apartamentos asociativos y las casas compartidas,
que permiten una reinserción social; los pacientes
realizan solos su vida diaria con un seguimiento
médico y de enfermería;
• los centros de posthospitalización, que intervienen
tras la hospitalización.
Como en todas las prestaciones de ergoterapia, existen intervenciones centradas sobre la progresión terapéutica (atención psicoterapéutica a través de
actividades terapéuticas) y sobre acciones de readaptación y de acompañamiento a la reinserción. Se realizan
en su mayoría con equipos pluridisciplinarios en
cotratamiento [48-50].
Intervenciones en niños y adolescentes
La intervención en niños y adolescentes está estrechamente ligada al contexto patológico dentro del que
se desarrolle. Los centros de acogida agrupan las poblaciones de niños y adolescentes en función del predominio de su alcance. Se define su tipología en cinco
categorías.
8
Los institutos medicoeducativos (IME) (que reagrupan
a los institutos medicopedagógicos [IMP] y los institutos
medicoprofesionales [IMPro]) acogen a los niños y
adolescentes de 3-20 años aquejados por una deficiencia
predominantemente intelectual relacionada con problemas neuropsíquicos. Las intervenciones de ergoterapia
se definen en el programa educativo, así como a través
del proyecto de vida del joven. Las acciones terapéuticas
están por lo general centradas en las técnicas de relación
y comunicación. Dentro de estos centros se practican
con frecuencia las sesiones de cotratamiento con psicomotricistas y ortofonistas. Muchos de los puestos son
empleos a tiempo parcial. La ergoterapia no está presente dentro de todas las instituciones de este tipo, pero
desde hace varios años han aumentado las intervenciones específicas con niños autistas.
Los institutos de educación motriz (IEM) son centros
de cuidado y de educación especializados en los niños
en los que el problema principal sea predominantemente motriz. La población está constituida en su
mayoría por niños y adolescentes con lesiones cerebrales; alrededor del 60% padece enfermedades motrices
cerebrales o de origen cerebral (fuente APF, base de
datos «archivo informatizado de epidemiología y estadística» [FIESTA]). Estas instituciones buscan la adquisición de la máxima autonomía para poder seguir un
recorrido educativo y escolar lo más largo posible. De
manera prácticamente constante, los ergoterapeutas
forman parte del personal sanitario de estos centros. Sus
intervenciones son en reeducación (técnica de reeducación neuromotriz, búsqueda de eficiencia gestual,
reeducación de los problemas cognitivos de tipo dispraxias, problemas de orientación o déficit mnésico,
etc.), pero también y sobre todo están centradas en el
acompañamiento a la vida escolar y social. Dentro de
esta finalidad se desarrollan, en colaboración con los
equipos educativos, los «talleres de vida práctica»
(confección de una comida, actividades domésticas
elementales, cursos, salidas al exterior, etc.) y también
los «restaurantes pedagógicos», los «circuitos de sillas de
ruedas» y multitud de puestas en situación, a veces
lúdicas o expresivas (grupos, «teatro», grupos de «periodismo», etc.) que buscan confrontar al niño con el
máximo de situaciones de la vida diaria para mejorar su
independencia y entrenarlo en la posible utilización de
ayudas técnicas más o menos complejas (del simple
andador a la síntesis vocal). Las acciones compartidas
con el personal educativo y los docentes son numerosas;
la adecuación de los espacios escolares, así como las
reflexiones didácticas, son llevadas a cabo por el equipo
con el fin de permitir un aprendizaje óptimo en función
de las capacidades del niño.
Los centros medicoeducativos (CME) acogen a los
niños y adolescentes de 3-20 años aquejados de polidiscapacidad (deficiencia mental o física) o de pluridiscapacidad (problemas intelectuales profundos y deficiencia
física). Prodigan la atención y una educación especializada en el terreno motor, físico, intelectual, social y
afectivo con el objetivo de desarrollar su autonomía y
su capacidad de comunicarse. Los métodos empleados
son cercanos a las que ponen en práctica los ergoterapeutas en los IEM. Siempre se da más importancia a la
acción en ayudas posturales, prevención de las complicaciones ortopédicas o a la acentuación de los problemas cognitivos o relacionales.
Los centros medicopsicopedagógicos (CMPP), definidos por la ley que renueva la acción social y medicosocial, son los centros autorizados para dispensar la
atención en los niños y adolescentes de 0-20 años que
presenten problemas neuropsíquicos o problemas de
comportamiento que produzcan trastornos o retraso
escolar. El tratamiento es ambulatorio. Son pocos los
ergoterapeutas que trabajan en estos centros y su acción
está orientada sobre todo a la expresión, la regulación
Kinesiterapia - Medicina física
9. Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés ¶ E – 26-006-A-10
del estado de ánimo y la participación en programas de
mejora de los problemas de aprendizaje.
Los institutos de educación sensorial acogen a los
niños de entre 3-12 años víctimas de pérdidas auditivas
o visuales. Los programas de ergoterapia son específicos
y necesitan a menudo un complemento de formación o
la adquisición mínima de técnicas de comunicación
adaptada (lenguaje de signos, lectura y escritura braille,
etc.). La ergoterapia está esencialmente orientada hacia
la adquisición de una independencia en las actividades
escolares y sociales. Las ayudas tecnológicas se desarrollan específicamente en respuesta a sus problemas
(sistema de lectura, reconocimiento vocal, etc.).
Las SESSAD, instauradas a partir de la ley «por la
igualdad de derechos y de oportunidades, la participación y
la ciudadanía de las personas discapacitadas», se han
convertido en centros muy presentes en el panorama de
los centros que intervienen en la integración y el
acompañamiento escolar de los niños en situación de
discapacidad. Estos centros tienen vocación de intervenir en los lugares de vida del niño y en el medio escolar.
Lo ergoterapeutas están encargados de la evaluación
ergonómica de la situación escolar (accesibilidad,
mobiliario escolar, material pedagógico, equipo informático adaptado, etc.) y también de acompañar en el
tratamiento de los problemas motores, ortopédicos o
cognitivos que limiten el aprendizaje. El trabajo conjunto tanto con la familia como con los docentes es
primordial.
Los centros de acción medicosocial precoz (CAMPS)
acogen a niños que presenten déficits sensoriales,
motores o mentales desde el primer y segundo año de
vida. Su intervención es esencialmente ambulatoria. La
ergoterapia desarrolla intervenciones educativas y
preventivas y también una gran parte de la educación
terapéutica de las familias con el fin de asegurar una
continuidad de las atenciones. Este sector de intervención es, del mismo modo, el lugar de desarrollo de
técnicas específicas para esta población infantil, como la
integración neurosensorial (acercamientos sensitivomotrices aplicados al niño).
Intervención en geriatría
Sin lugar a dudas, es dentro de las instituciones y los
centros que acogen a las personas ancianas donde se
hace la mayor y más significativa parte de las prestaciones de ergoterapia. Existe actualmente una importante
diversidad de estructuras de acogida, atención y alojamiento de las personas mayores.
Esquemáticamente, se pueden dividir las prestaciones
de terapia ocupacional en:
• intervención dentro de los centros sanitarios (unidades de medicina geriátrica, unidades de atención y
seguimiento): se trata de una prestación de complemento reeducativo y de entrenamiento para retomar
actividades de independencia. En caso de alteración
del potencial funcional, se pueden igualmente recomendar ayudas técnicas (en concreto sillas de ruedas
y ayudas con los métodos de desplazamiento adaptados), asesoramiento en optimización de los espacios
en los que se desarrolla la vida (sobre todo verificar la
ausencia de riesgos de caídas en el domicilio y la
disposición ergonómica de los espacios, lavabos,
dormitorio y cocina) así como una información
precisa e incluso un aprendizaje de técnicas que
faciliten las ayudas naturales en caso de secuelas
invalidantes;.
• intervenciones en la unidad de cuidados de larga
duración: las personas mayores que se acogen aquí se
benefician de una vigilancia médica y de tratamiento
prolongado. El equipo define un proyecto de vida
para cada residente y sus principales intervenciones se
articulan alrededor de la conservación de los potenciales funcionales y de las relaciones. El ergoterapeuta
Kinesiterapia - Medicina física
interviene en las acciones de comunicación y de
expresión, pero también de conservación de las
competencias individuales (actividades de independencia elemental, salidas al exterior, confección de
comidas, escritura, etc.);
• intervención en los hogares del jubilado: bajo esta
denominación se incluyen muchos tipos de centros
de acogida (asilos para personas mayores dependientes, casas de acogida para personas mayores dependientes, etc.). Pueden coexistir además varios tipos de
centros bajo la misma razón social. La intervención
de la ergoterapia está igualmente centrada en mantener las habilidades funcionales y de relacionarse a
través de actividades de independencia, de relaciones
sociales e intergeneracionales.
A estas intervenciones, se les añaden las prestaciones
en los hospitales de día, centros de acogida de día y la
hospitalización en el domicilio. La ergoterapia está
centrada en la restauración de las potencialidades
funcionales, cognitivas y la capacidad de relación. Cabe
señalar que los centros de acogida de día responden a
las preocupaciones de las familias cuyos progenitores
estén afectados por la enfermedad de Alzheimer o
problemas similares. También hay que destacar el
desarrollo de las prestaciones en el seno de los centros
de actividades relacionadas con ocupaciones útiles
(CANTOU), que son pequeños centros que acogen a una
docena de personas mayores que sufren de problemas
de comportamiento, desorientación o están afectados
por la enfermedad de Alzheimer.
En el seno de los organismos sociales es posible dar
otras prestaciones de ergoterapia; en el contexto de
geriatría, estos organismos son esencialmente las CLIC,
en concreto para informar a las personas mayores y a su
entorno de las posibilidades de acondicionar los lugares
donde se vive y de la utilización de ayudas técnicas.
Para acabar, después de la década de 1990, se han
desarrollado también prestaciones específicas de ergoterapia en los servicios de cuidados paliativos.
Intervenciones en centros medicosociales
Animados por la ley «reforzando la acción social y
medicosocial» y «por la igualdad de derechos y oportunidades, la participación y la ciudadanía de las personas en
situación de minusvalía», las intervenciones de ergoterapia se han acrecentado en los centros medicosociales
(residencias especializadas y servicios de asistencia
permanente para adultos discapacitados). Todos ellos
están básicamente orientados hacia la inserción y el
mantenimiento de las actividades sociales. En según que
centros, también se interviene en la instalación de
ayudas para la comodidad, ayudas posturales y también
en la utilización de las ayudas técnicas, tecnológicas o
de sistemas de comunicación complejos.
Las actividades en las unidades de evaluación, reentrenamiento y orientación social y profesional (UERO),
puestas en funcionamiento en 1996, benefician principalmente a las personas con problemas cerebelosos
(traumatismo craneal, accidente cerebrovascular, tumor
encefálico, etc.) cuya orientación presenta dificultades
particulares que no hayan podido ser resueltas por la
Comisión de Derechos de la Autonomía de las Personas
con Minusvalía (CDAPH), sobre todo a la hora de
retomar una actividad profesional. El ergoterapeuta
evalúa las capacidades y aptitudes, tanto sobre el plano
motor como sobre el cognitivo o la capacidad de relacionarse en el mismo centro o en situaciones reales de
empresa. En paralelo, el ergoterapeuta explota sus
conocimientos de ergonomía para evaluar las restricciones del o los puestos de trabajo vistos por el candidato.
Los resultados de las evaluaciones y propuestas se
transmiten de inmediato a las comisiones técnicas de
orientación y de reorientación profesional (a través de
las MDPH).
9
10. E – 26-006-A-10 ¶ Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés
Particularidades de la práctica liberal
Aunque fue prácticamente inexistente a finales del
siglo XX, la práctica liberal no para de crecer. A pesar de
que sólo un pequeño número de profesionales ejercen
por libre, este sector presenta sin duda la mayor tasa de
crecimiento de la actividad en ergoterapia.
Carlino (Sindicato Nacional Francés de Terapeutas
Ocupacionales Liberales) [51, 52] identifica cuatro tipos de
prestaciones regulares de los terapeutas ocupacionales
que trabajan de forma autónoma:
• la atención y la reeducación;
• la prestación exclusiva de opinión profesional;
• la enseñanza y la formación;
• el peritaje en la valoración del daño corporal.
La dificultad de expansión del sector, si bien está
sujeto a una fuerte demanda, reside en la ausencia de
reembolso de las prácticas de ergoterapia por parte de
los seguros médicos. A pesar de las soluciones de acuerdos con las Cajas Primarias de Seguros Médicos (CPAM),
las participaciones en mutuas o asociaciones de usuarios
y, más recientemente, un marco específico para la
infancia elaborado por la CNSA, las prácticas realizadas,
en su mayoría, quedan a cargo del paciente o la familia.
Se ha solicitado a los poderes públicos, a través de los
diferentes organismos profesionales, poder dar un mejor
acceso a las prestaciones de ergoterapia.
sistema «licenciatura-máster-doctorado» (LMD) para la
totalidad de la formación sanitaria y social.
Sin detallar su contenido, la formación de terapia
ocupacional reposa en tres grandes ejes temáticos:
• ciencias fundamentales:
C ciencias de la vida;
C ciencias humanas y sociales;
C ciencias clínicas;
• ciencias ergoterapéuticas:
C fundamentos teóricos;
C metodología profesional;
C tecnología;
C intervenciones;
• actividades de integración profesional:
C prácticas clínicas;
C desarrollo personal y profesional;
C actividades de evaluación e investigación.
Los nuevos institutos de formación (Alençon, Bercksur-mer, Bordeaux, Créteil, Lyon, Montpellier, Paris,
Nancy, Rennes) preparan alrededor de 400 nuevos
profesionales cada año.
Los institutos de formación son centros públicos o
privados. Los centros públicos están adscritos a una
universidad o a un centro hospitalario universitario. Los
institutos privados funcionan de manera aislada o
dentro de un contexto pluriprofesional (masokinesiterapeuta, pedicura-podología).
Centros de investigación [53-55]
El desarrollo de una profesión y su adaptación a las
evoluciones contextuales no se puede hacer más que
con el apoyo de los estudios de investigación. Tras haber
abordado la integración de la práctica concluyente entre
las preocupaciones de los profesionales, conviene
presentar sucintamente los grandes ejes de investigación
que se llevan a cabo en ergoterapia.
El principal es el de la ciencia de la actividad
humana, cuyas primeras repercusiones concretas permiten clarificar los modelos de práctica [7].
También se inician numerosos ensayos clínicos en
Francia con el fin de aumentar la eficiencia y pertinencia de los cuidados de la ergoterapia y de programas de
intervención más complejos (intervención en geriatría,
validación de las herramientas de evaluación, etc.) [56].
Cabe recalcar también el auge de las investigaciones
conducidas en lugares descentralizados del INSERM, las
empresas, las agencias del estado o las asociaciones para
las ayudas técnicas. Los institutos de formación representan también un potencial y una cantera sólo con el
acompañamiento de los estudiantes en sus investigaciones de fin de estudios, de igual forma que lo hacen los
institutos de formación de los ejecutivos de la salud.
La ANFE ha situado la investigación siguiendo los ejes
prioritarios de su proyecto asociativo.
Hay un número creciente de profesionales que integran los recorridos tipo máster en los terrenos tecnológico o de las ciencias humanas.
Formación inicial
En Francia, la profesión de ergoterapia está protegida
por un diploma del Estado [57] reconocido en el nivel
3 de enseñanza superior, como la mayoría de los diplomas de profesiones sanitarias. El acceso a la formación
se realiza después del bachillerato y según las modalidades de selección reglamentarias [58]. El desarrollo de los
estudios se efectúa en tres años, a menudo precedidos
de un año preparatorio para los institutos incorporados
por concurso. El principio de la formación reside en la
alternancia [59] entre los contenidos teóricos y las
prácticas.
El programa de formación se define a través del
ministerio de sanidad. Próximamente deberá evolucionar en función de una reflexión global siguiendo el
10
■ Ergoterapia y kinesiterapia
Parece difícil evocar las complementariedades y
diferencias de la ergoterapia y la kinesiterapia, dentro de
sus determinantes y motivaciones, sin conceptualizar un
poco sus acercamientos.
La búsqueda del sentido
Primero construida sobre su tecnología, la masokinesiterapia comienza a explicitar los conceptos que la
sustentan. Tanto si esta materia de valorización y de
investigación interesa aún poco a los kinesiterapeutas,
corresponde a una necesidad fundamental de posicionamiento de la identidad, tanto en términos de sanidad
pública como respecto a otras profesiones de la salud, de
prevención o simplemente de bienestar. Los riesgos
residen en exacerbar los corporativismos, limitados por
las representaciones erróneas o ausentes, situar los
tecnicismos como una finalidad y conducir a un desmenuzamiento de sus responsabilidades.
Mucho antes del comienzo visible del ejercicio (las
acciones), son las misiones, los valores y procesos de
pensamiento los que determinan una profesión.
Campo de implicación
De manera global, el campo de implicación de la
kinesiterapia no para de reforzarse y extenderse a
medida que se van descubriendo sus potenciales. Se han
constituido nuevos territorios; dentro de otras disciplinas, modos de evaluación modernos han podido objetivar su eficacia. Por ejemplo, la reeducación vestibular,
respiratoria, ámbito de los grandes quemados, han
progresado considerablemente.
La masokinesiterapia se implica también en la esfera
de la estética y el deporte y se cruza con la ergoterapia
en el ámbito de la reeducación, la readaptación y la
prevención.
Su situación en el ámbito sanitario es similar; no es
la enfermedad la que prevalece sino las consecuencias
del trastorno o del propio tratamiento (intervención
quirúrgica, inmovilización ortopédica, etc.). Si la enfermedad es el dominio de la medicina que la diagnostica
y trata, el ergoterapeuta y el kinesiterapeuta se interesan
Kinesiterapia - Medicina física
11. Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés ¶ E – 26-006-A-10
por las consecuencias que tiene esta enfermedad. Esto
no significa que ignoren el trastorno, sólo que lo
consideran un marco nosológico de intervención y
evolución posibles. Los acercamientos cambian; se habla
menos de enfermedad y más de problemas de salud.
¿Cuáles son las consecuencias de la enfermedad? Se
han propuesto distintos referentes teóricos para modular
los acercamientos terapéuticos (cf supra). Cualquiera que
sean los términos utilizados, a menudo consideran tres
dimensiones interdependientes de arraigo de la discapacidad: la estructura, la función o la situación. Estas
dimensiones determinan la base semántica de cualquier
reeducación/readaptación. Así, se puede coincidir en el
hecho de que las dos profesiones se interesan globalmente por las consecuencias estructurales, funcionales y
situacionales de la enfermedad.
Cada una tiene su propia intensidad: se puede describir el mismo objeto desde dos puntos de vista distintos,
la kinesiterapia se refiere a la autonomía gestual [60] del
paciente, mientras que la ergoterapia mira a la actividad [10, 11]. La autonomía gestual permite la actividad,
pero no se limita a ella; la actividad mantiene la autonomía gestual a la vez que la finaliza. Puede extraerse
una complementariedad sentida que a menudo está mal
expresada.
Así se comprende mejor por qué la kinesiterapia está
más reconocida dentro de la dimensión estructural (más
a menudo al principio del tratamiento), mientras que el
ergoterapeuta se ha investido de la integración en
situación (más a menudo en la finalización del tratamiento). Se comprende entonces mejor por qué se
encuentra primero a los kinesiterapeutas en los servicios
agudos y a los ergoterapeutas dentro de los centros
medicosociales.
Todo esto no está en absoluto fijo, ni se trata de
polarizaciones esquemáticas en la escala de profesiones.
La segmentación profesional se puede ver como la
ocupación de territorios decididos de modo artificial,
infranqueables o como factores de una adaptabilidad
útil al paciente.
En este último caso, la proximidad de las profesiones
se ve como una oportunidad.
Procedimientos terapéuticos
Si en el marco de la discapacidad las misiones de la
ergoterapia y de la kinesiterapia son complementarias,
es interesante constatar que su proceso de toma de
decisiones es muy similar.
Partiendo del principio de adaptación de la acción a
las necesidades específicas del paciente, las dos profesiones han sistematizado más o menos conscientemente su
proceso operativo.
Detraz [26], ya citado, describe los procesos de intervención de los ergoterapeutas franceses en cinco fases:
Gedda [61] propone una sinopsis del proceso de
kinesiterapia, fundamentado en cinco etapas críticas que
él llama Ypro (Fig. 1). Según él el proceso de la toma de
decisión en masokinesiterapia es más ajustado que sus
técnicas, que son variables y diversificadas según el
contexto del ejercicio profesional.
Si bien su desglose difiere, los dos modelos activan los
mismo mecanismos de toma de decisiones:
• evaluación previa a toda acción y recurrente;
• visualización de la problemática de la situación
general del paciente;
• jerarquización de los objetivos;
• acción autoprescrita y repetitiva.
Del mismo modo, los principios de base son muy
cercanos:
• personalización gracias a la evaluación de las necesidades específicas del paciente (observación);
• contractualización por la expresión de los objetivos de
intervención que impliquen las vivencias y proyectos
del paciente;
Kinesiterapia - Medicina física
Problema
de movimiento
Proyecto
del paciente
Medidas clínicas
Observar
Acercamiento humano
Problemática
gestual
Analizar
Diagnóstico
Planificar
Propuesta
de intervención
Objetivos
Tratar
Programa
de tratamiento
Modos
Figura 1. Sinopsis de la toma de decisiones del proceso Ypro
en kinesiterapia.
• adaptación permanente que surge de la interacción y de
la retroacción casi inmediata de las puestas en situación;
• autonomización del paciente a través de la transferencia de competencias.
Además de los esquemas de procesamiento, la ergoterapia y la kinesiterapia comparten diversos valores:
• tecnicidad: la intervención responde a una metodología precisa y codificada;
• creatividad: la intervención se inventa de forma
singular para cada situación del paciente;
• generosidad: la intervención es dependiente del
operador y requiere una inversión poco cuantificable.
Estas afinidades refuerzan la implicación del paciente,
que se implica en su propia progresión. No es sorprendente que las dos profesiones se apropien fácilmente de
la educación terapéutica del paciente (ETP) como
manera de autonomización recomendada por la
OMS [44], la HAS y la INPES [45].
Se señala también que, si bien las finalidades se
imbrican, los procesos activan componentes análogos.
Estas disposiciones potencian una verdadera interdisciplinariedad de enriquecimiento mutuo.
Fisionomías
Si las misiones de la ergoterapia y la kinesiterapia son
a menudo complementarias, si sus procesos de toma de
decisión son muy similares, sus fisionomías, sin
embargo, difieren de manera no despreciable (Cuadro I).
Demografía
En Francia, los miembros de las dos profesiones se
sitúan en una proporción de un ergoterapeuta por cada
diez kinesiterapeutas. Sin embargo, ambas profesiones
pueden aún progresar.
La densidad de ergoterapeutas queda globalmente por
debajo de la del resto de países europeos con un contexto económico equiparable. En Francia, en 2008 la
densidad era de 10 ergoterapeutas por cada
100.000 habitantes, frente a 43 en Alemania o 60 en
Bélgica [62].
La kinesiterapia está marcada actualmente por la falta
de profesionales, tanto en el ámbito ambulatorio como
hospitalario [63]; esta situación se ha visto agravada por
las primeras jubilaciones y el crecimiento de las
necesidades.
11
12. E – 26-006-A-10 ¶ Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés
Cuadro I.
Síntesis de las modalidades de formación, accesibilidad y práctica, en Francia en 2008.
Ergoterapia
Masokinesiterapia
Términología anglosajona
Occupational therapy
Physical therapy, physiotherapy
Federación mundial
World Federation of Occupational Therapists
World Confederation for Physical Therapy
http://www.wfot.org
http://www.wcpt.org
Año de creación de la diplomatura
en el estado Francés
1970
1946
Número de profesionales en ejercicio
6 553
65 931
Media de edad
37,6 años
42,9 años
Tasa de feminización
86%
45%
Proporción de ejercicio
96,8% asalariado
20,7% asalariado
asalariado/autónomo
3,2% autónomo
79,3% autónomo
Número de institutos de formación
9 (4 públicos + 5 privados)
39 (14 públicos + 25 privados)
Cuota anual de admisión de estudiantes
Sin cuota de admisión
1.999 sin contar los deficientes visuales
de los cuales 4 son para deficientes visuales
Duración de la formación
3 años (primer ciclo de 1 año + segundo ciclo de 2 años)
Terapéutica de primera intención
No autorizada
Reembolso por el seguro de enfermedad
obligatorio
No
60%
Reembolso por mutuas
Posible parcialmente
Sí
La masokinesiterapia empieza un período de envejecimiento, mientras que la ergoterapia es todavía una
profesión joven, con la mitad de sus profesionales con
una edad por debajo de los 35 años [64].
Esta profesión se mantiene esencialmente femenina y
asalariada, mientras que en la kinesiterapia la práctica es
mayoritariamente liberal, con una tasa de feminización
todavía por debajo del 50% [65].
Formación inicial
Las formaciones iniciales de las dos profesiones son
relativamente simétricas. Se desarrollan en alternancia
sobre dos ciclos de idéntica duración (1 y 2 años); su
contenido, sin embargo, no se imparte igual:
• ergoterapia:
C C primer ciclo, seis módulos: metodología general;
formación en la relaciones; anatomía, biomecánica,
cinesiología; fisiología; metodología profesional;
tecnología;
C C segundo ciclo, nueve módulos: psicología, pedagogía, sociología; afecciones neurológicas; psiquiatría;
enfermedades osteoarticulares y musculares; gerontología, geriatría; afecciones diversas; tecnología;
aparatos ortopédicos; legislación y deontología;
• kinesiterapia:
C C primer ciclo, cuatro módulos: anatomía, cinesiología, biomecánica del aparato locomotor; fisiología
humana; patología y psicología; tecnología masokinesiterapéutica;
C C segundo ciclo, 12 módulos; masokinesiterapia,
tecnología; psicología y readaptación; reeducación
y readaptación en traumatología y ortopedia;
reeducación y readaptación en neurología; reeducación y readaptación en reumatología; reeducación
y
readaptación
en
la
enfermedad
cardiovascular; reeducación y readaptación en
enfermedades respiratorias y reanimación; kinesiterapia en medicina, geriatría y cirugía; patología
infantil; prevención, promoción de la salud y
ergonomía; kinesiterapia y deporte; legislación,
deontología, gestión.
La formación en kinesiterapia es accesible con ciertas
condiciones a los atletas de alto rendimiento y a los
invidentes.
Las prácticas clínicas representan alrededor del 50%
del tiempo total de la formación en kinesiterapia y el
40% en ergoterapia.
12
Ambas formaciones se validan tras presentar una
tesina: los estudiantes de ergoterapia también están
sometidos a una prueba práctica final, mientras que las
notas de la evaluación continuada de segundo ciclo
cuentan para la mitad de la nota final de kinesiterapia.
Ambas profesiones aspiran a una mejora de sus conocimientos a través de un acceso más sólido a la investigación clínica, pero a menudo se encuentran con los
mismos problemas de fiabilidad (la práctica imposibilidad
de los dobles ciegos, la débil capacidad de escoger una
muestra homogénea de pacientes, la pobreza de la literatura, que no haya doctorado francés, etc.).
Modalidades de ejercicio y organización
Ambas profesiones forman parte de las definidas por
el código III de la sanidad pública como auxiliares de
medicina; integran el subgrupo de profesiones de
reeducación y readaptación. Su ejercicio está definido y
protegido mediante decretos; está sometido a prescripción médica cuando se aplica a fines terapéuticos.
Los ergoterapeutas son esencialmente asalariados
mientras que los kinesiterapeutas franceses ejercen la
mayoría la profesión libre y casi exclusivamente por
convenio. Esta particularidad no es banal dentro de la
estructuración profesional y limita la comparación entre
ambas profesiones en términos de organización, representación y remuneración.
Desde 2004, la masokinesiterapia está dotada de una
asociación [66], con estructura de derecho privado con
una misión pública con delegación de justicia: «la
asociación de los masokinesiterapeutas vela para mantener los principios de moralidad y de probidad indispensables para el ejercicio de la masokinesiterapia y la
observación, por parte de todos sus miembros, de los
derechos, deberes y obligaciones profesionales». Esta
asociación se encarga también de organizar la evaluación de las prácticas profesionales (EPP) de la profesión.
En esta misma línea, el código deontológico [67]de los
masokinesiterapeutas precisa las normas y deberes
generales de los kinesiterapeutas.
Por otro lado, ambas profesiones se benefician del
acceso a un diploma encuadrado en la sanidad, que
desemboca en la gestión de los servicios activos y en la
formación de los futuros profesionales.
Si bien no se reconoce ninguna especialización,
algunas sociedades científicas se estructuran para dar
valor y mejorar ámbitos específicos de la kinesiterapia
(reanimación, consejo jurídico, etc.).
Kinesiterapia - Medicina física
13. Ergoterapia y kinesiterapia: complementariedades en evolución; ejemplo del caso francés ¶ E – 26-006-A-10
■ Conclusión
En definitiva, la pequeña separación que hay entre la
ergoterapia y la kinesiterapia aparece manifiesta. Si bien
las afinidades son numerosas, las diferencias reales
permiten, sin embargo, especificar dos entidades distintas por su identidad y vocación.
Cada vez más solicitada en el contexto de la readaptación y en las actividades extrainstitucionales, la
intervención del ergoterapeuta puede:
• integrarse en programas pluriprofesionales, donde
acaba de completar a la masokinesiterapia, la ortofonía, la psicomotricidad, etc.;
• proponer situaciones en psicoterapia y de relación
mediatizada dentro del contexto de las afecciones
psiquiátricas;
• acompañar el mantenimiento o inserción social,
escolar o profesional proponiendo y entrenando a la
persona para explotar sus capacidades y, si es necesario, recomendando las ayudas técnicas indispensables.
Las preocupaciones sociales a favor de la inserción de
las personas en situación de discapacidad llevan a los
profesionales a aumentar sus acciones en los procesos de
investigación y desarrollo respondiendo a las exigencias
de una práctica basada en la evidencia.
Al margen de la interdisciplinariedad de la práctica
corriente terapéutica, existen acercamientos entre las
dos profesiones sanitarias, ya sea a través de la formaciones inicial o continuada como, en ocasiones, con
proyectos comunes, manifestaciones, prospecciones,
publicaciones.
Se ha de animar a este tipo de iniciativas, ya que éstas
son las que hacen evolucionar la realidad.
.
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le Code de la santé publique) et Art. 109 (modifiant le Code
de la sécurité sociale).
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associative. Décret n°2008-1135 du 3 novembre 2008,
portant
code
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déontologie
des
masseurskinésithérapeutes.
Para saber más
www.anfe.fr.
www.otdbase.org.
www.otseeker.com.
www.enothe.hva.nl.
http://claude.hamonet.free.fr/fr/art.htm
M. Gedda, Directeur Général de l’A-3PM (Institut de Formation en Ergothérapie et en Masso-Kinésithérapie de Berck-sur-Mer)
(direction@a-3pm.org).
P. Guillez, Directeur Pédagogique de l’Institut de Formation en Ergothérapie de Berck-sur-Mer (A-3PM).
A-3PM, Institut de Formation en Ergothérapie et en Masso-Kinésithérapie de Berck-sur-Mer, avenue du Phare, BP 62,
62600 Berck-sur-Mer, France.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo original: Gedda M., Guillez P. Ergothérapie et kinésithérapie : des
complémentarités en évolution. EMC (Elsevier Masson SAS, Paris), Kinésithérapie-Médecine physique-Réadaptation, 26-006-A-10, 2009.
Disponible en www.em-consulte.com/es
Algoritmos
14
Ilustraciones
complementarias
Vídeos /
Animaciones
Aspectos
legales
Información
al paciente
Informaciones
complementarias
Autoevaluación
Caso
clínico
Kinesiterapia - Medicina física