La Biblia fue escrita por autores de diferentes épocas y culturas, pero su mensaje es coherente y armonioso de principio a fin. Aunque Dios dirigió su escritura, los autores escribieron con sus propias palabras. La Biblia ha sido transmitida con gran fidelidad a través de los siglos, como lo demuestran los miles de manuscritos antiguos que han sido preservados.
2. Sus escritores vivieron en épocas
diferentes. Aun así, la Biblia no se
contradice, porque su mensaje es el
mismo de principio a fin.
Al comienzo explica cómo
empezaron los problemas. Y al final,
cómo Dios los solucionará.
3. Aunque sus escritores venían de culturas
distintas, toda la Biblia está en perfecta
armonía.
La Biblia ofrece una esperanza a las
personas de todas razas, culturas o
etnias diferentes.
Es un libro para toda la humanidad, sin
hacer distinciones; posición social, color
de la piel etc.
4. Dios dirigió la escritura de la Biblia como un
profesor le dicta a un alumno lo que este
debe escribir ¿Cómo fue esto posible?
Ejemplo:
La NASA recibe cada día información de la
sonda espacial Voyager a pesar de encontrarse
a 23.000 millones de kilómetros de la tierra.
5. Si hemos sido capaces de
esto ¿No podría el Creador
comunicarse con hombres
para que estos escribieran
su propósito?
6. La Biblia se ha copiado y transmitido
hasta nosotros con exactitud.
Así lo atestiguan los manuscritos
conservados hasta hoy, seis mil de las
Escrituras Hebreas y cinco mil de las
Escrituras Griegas Cristianas.
7. El biblista alemán
Tischendorf descubrió en
el monasterio de Santa
Catalina el Códice
Sinaítico, uno de los
manuscritos antiguos que
se conoce.
Codex Sinaiticus
8. Con los Rollos del mar
Muerto se pudo comparar
los textos disponibles con
estos rollos bíblicos mil
años más antiguos.
La conclusión “ofrece prueba
irrefutable de que la transmisión del
texto bíblico a lo largo de más de mil
años a manos de los copistas judíos
fue sumamente fiel y cuidada”.
9. “Ningún otro libro dispone de
testimonios tan abundantes, y
ningún estudioso imparcial negaría
que el texto que ha llegado hasta
nuestros días es sumamente
fiable” (Frederic Kenyon).
“Puede decirse con toda
seguridad que ninguna otra
obra de la antigüedad se ha
transmitido con tanta exactitud”
(William Henry Green).