2. Como en todos los cuentos existe un lindo y hermoso caballero, Había una vez uno de estos caballeros que derrotan a todos, es el protagonista y héroe de este cuento; este apuesto caballero se llama Simon. Su valentía era tan grande y su deseo por salvar vidas de personajes de temibles criaturas, malvados brujos, madrastras a la que atemorizar y frustrado al no encontrar dragones, ogros y monstruos de cuento en cuento, decidió viajar a la vida real .
3. Simón llego al mundo real y lo único que encontró fue mujeres y hombres preocupados, estresados del trabajo, mal humor y con las mismas expresiones de todos aquellos personajes que había salvado en los cuentos de dragones, madrastras malvadas y ogros. Simón analizaba cada paso y comportamiento de cada una de las personas, observaba como iban de un lado a otro, con prisa y sin hablar con nadie, como si algo terrible fuera a ocurrir. Pero al acabar el día, nada malo había ocurrido. Y así un día, y otro, y otro.
4. Simón pensó que esta situación seria la aventura más heroica y resolvió dedicarse por completo a encontrar cual era el misterio de las angustias, el mal carácter y estrés de las personas que viven la vida real. Buscó, investigo, preguntó, hablo con la gente y no encontró nada. Dispuesto a no rendirse, regresó a su mundo de cuentos para hablar con el todo poderoso de uno de sus cuentos, el señor Jacob.
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7. Simon regresó a la vida real, llevando consigo todas sus armas. Y uno tras otro, quiso ayudar, pero nadie le hizo caso, sólo encontró indiferencia y mal humor. Finalmente, agotado y confundido, arrojó sus armas al suelo y se dirigió hacia un Café bar para tomar algo y meditar. Allí tropezó con una linda mujer su mirada se veía muy triste pero al verlo con su atuendo ella comenzó a reír a carcajadas, tanto que casi no podía mantenerse en pie. El caballero se enojó, pero al mirar a la linda mujer, observó en sus ojos el brillo alegre que no había encontrado en la vida real.
