Ser fuerte se trata de ocultar los propios sentimientos de infelicidad, angustia o dolor para apoyar a otros o mantener la calma en situaciones desesperadas. Requiere amar en silencio, perdonar a quien no lo merece, sonreír a pesar de querer llorar y tener fe aunque sea difícil. Lo fundamental es continuar amando y siendo fuerte a pesar de las dificultades de la vida.