2. Había una vez un hombre con
cuatro hijos.
El deseaba que sus hijos
aprendieran a no juzgar las cosas
tan rápido.
Así que los envió a cada uno a una
gran Aventura; su objetivo … ir en
búsqueda de un árbol, que se
encontraba a una gran distancia
3. El primer hijo se fue en invierno.
El segundo se fue en primavera.
El tercero en verano, y
El más joven en otoño.
5. El primer hijo comentó que el árbol era horrible,
doblado y torcido.
El segundo hijo comentó que el árbol estaba cubierto
de un hermoso follaje y flores.
6. El tercer hijo estuvo en desacuerdo. Comentó que el árbol
estaba lleno de brotes, que desprendían un aroma dulce,
fresco y hermoso. Era lo más hermoso jamás visto
El último estaba en total desacuerdo con los anteriores.
Dijo que el árbol estaba cargado de frutos, lleno de vida y
esplendor..
7. Entonces el hombre explicó a sus cuatro hijos, que todos
tenían la razón.
Porque cada unos de ellos había observado solamente una
temporada en la vida de aquel árbol.
8. Les explicó que no pueden juzgar a nadie solamente por
una temporada de su vida.
La esencia de las cosas y de quienes somos, así como los
placeres, alegrías, y el amor proveniente de la vida, solo
puede ser medida al final, cuando todas las etapas de su
vida se han realizado
9. Si te das por vencido cuando es invierno,
perderás las bellezas de la primavera,
las oportunidades del verano,
y las promesas del otoño.
10. No dejes que el dolor de una temporada, destruya el gozo
de las demás.
Y no juzgues la vida por tan sólo una época difícil..