1. PERIODO INFANTIL
Uno de los supuestos más importantes de
Freud (1905/1953b, 1923/1961b) es que
los niños poseen una vida sexual y viven
un periodo de desarrollo sexual pregenital
durante sus primeros cuatro o cinco años
de vida.
Freud (1917/1963) dividió el periodo
infantil en tres fases, en función de la zona
erógena que experimente el mayor
desarrollo. La fase oral es la primera,
seguida de la fase anal y la fase fálica . Las
tres fases infantiles se sobreponen una a
otra, y cada una de ellas continúa después
del comienzo de fases posteriores.
2. FASE ORAL
Dado que la boca es el primer órgano que proporciona placer a un niño, la
primera fase de desarrollo infantil de Freud es la fase oral. Los niños obtienen
el alimento que necesitan para vivir a través de la cavidad oral pero, además
de esto, también experimentan placer durante el acto de mamar.
La meta sexual de la fase oral temprana es incorporar o tener dentro del
propio cuerpo el objeto elegido, es decir, el pezón de la madre. Durante esta
fase oral de succión , los niños no sienten ninguna ambivalencia hacia el
objeto que les da placer y sus necesidades suelen quedar satisfechas con un
mínimo de frustración y ansiedad.
3. SEGUNDA FASE ORAL (FASE ORAL SÁDICA)
La defensa de los niños contra el entorno
recibe un gran impulso cuando aparecen
los dientes. En este momento, pasan a
una segunda fase oral, que Freud
(1933/1964) denominó la fase oral sádica
. Durante esta fase los niños responden a
los demás mordiendo, arrullando,
cerrando la boca, sonriendo y gritando.
Su primera experiencia autoerótica es
chuparse el dedo, una forma de defensa
contra la ansiedad que satisface sus
necesidades sexuales pero no las
nutricionales.
4. FASE ANAL
Las pulsiones agresivas , que durante el primer año de vida adoptan
la forma de sadismo oral , alcanzan un mayor desarrollo durante el
segundo año, cuando el ano aparece como una zona sexualmente
placentera.
Como este periodo se caracteriza por la satisfacción que
proporcionan la conducta agresiva y la función excretora, Freud
(1933/1964) la denominó fase anal sádica , o fase anal. Esta fase se
divide en dos subfases, la primera fase anal y la segunda fase anal .
5. PRIMERA FASE ANAL
Durante la primera fase anal, los niños
obtienen satisfacción con la
destrucción o pérdida de objetos. En
este periodo, la naturaleza destructiva
de la pulsión sádica es más fuerte que
la erótica y los niños suelen
comportarse de manera agresiva con
sus padres porque estos les provocan
frustración al pretender enseñarles a
controlar los esfínteres .
6. SEGUNDA FASE ANAL
Cuando los niños entran en la segunda fase anal, pueden mostrar un cierto
interés en sus heces, interés que procede del placer erótico que les
proporciona la defecación. A menudo, los niños presentarán sus heces a los
padres como un premio valioso (Freud, 1933/1964). Si este comportamiento
es aceptado y elogiado por los padres, es probable que los niños lleguen a ser
adultos generosos y desinteresados.
Pero si su “regalo” es rechazado de manera punitiva, los niños podrían buscar
otra manera de obtener el placer anal, reteniendo las heces hasta que la
presión llegue a ser dolorosa y también eróticamente estimulante. Esta forma
de placer narcisista y masoquista sienta las bases del carácter anal : como el
de las personas que obtienen satisfacción erótica de la posesión de objetos y
de su disposición excesivamente ordenada
7. Freud (1933/1964) planteó la hipótesis
de que las personas que adquieren
caracteres anales, como los niños,
oponen demasiada resistencia al control
de esfínteres y, con frecuencia, retienen
las heces y prolongan el tiempo de
control más de lo normal. Este erotismo
anal llega a transformarse en la tríada
anal de orden , tacañería y obstinación
que tipifica al carácter anal adulto .
8. FASE ORAL Y ANAL EN EL DESARROLLO
PSICOSEXUAL
Durante las fases oral y anal, no existen diferencias importantes entre el
desarrollo psicosexual masculino y el femenino. Los niños de uno y otro
género pueden desarrollar una orientación activa o pasiva. La actitud activa se
suele caracterizar por lo que Freud (1933/1964) consideró las cualidades
masculinas de dominación y sadismo, mientras que la orientación pasiva suele
estar determinada por las cualidades femeninas de voyeurismo y
masoquismo. Las dos orientaciones, o una combinación de ambas, pueden
darse tanto en niñas como en niños.