2. Las tubulopatías o enfermedades tubulares renales se definen como alteraciones clínicas en las que
existe una disfunción tubular específica, con escasa o nula afectación de la función glomerular.
Desde un punto de vista fisiopatológico, las tubulopatías podrían englobarse en diferentes categorías
según predominen trastornos en los mecanismos de reabsorción tubular, en la secreción o en los
mecanismos de respuesta de las células tubulares a determinadas hormonas.
TUBULOPATIAS
DEFINICION
3. Las tubulopatías primarias tienen, en general, un carácter congénito; se les reconoce un carácter
hereditario y se manifiestan en la infancia. Las secundarias aparecen en cualquier grupo de edad, y
son la consecuencia de procesos generales que afectan al riñón, o se producen tras la administración de
fármacos o tóxicos.
Tubulopatías simples y/o complejas.
TUBULOPATIAS
DEFINICION
7. Glucosuria Renal
Es un defecto hereditario de reabsorción de
glucosa en el túbulo proximal que se caracteriza
por glucosuria constante, glucemia normal,
utilización normal de los hidratos de carbono y
ausencia de otras alteraciones tubulares.
Es una enfermedad benigna, relativamente
frecuente (incidencia de un caso por cada 500
nacimientos).
El gen responsable es el SGLT-2, que transporta
una molécula de sodio y una de glucosa en el lado
epitelial de la célula tubular proximal.
No requiere tratamiento.
11. Fosfaturias. Raquitismo hipofosfatémico
Los pacientes con esta enfermedad presentan raquitismo,
deformidades óseas, baja estatura, debilidad muscular y dolor
óseo, causadas por una anomalía tubular hereditaria que da origen
a hiperfosfaturia e hipofosfatemia.
Se ha identificado como responsable el gen denominado PHEX,
enzimas que intervienen en la degradación del FGF-23, una
hormona polipeptídica secretada por el osteoblasto y que inhibe la
reabsorción tubular proximal de fosfato, disminución de la
síntesis de 1,25-(OH)2 vitamina D por una menor actividad de
la 1 a-hidroxilasa renal.
12.
13. Recientemente se ha publicado que el HHRH
se debe a mutaciones en el gen SLC34A3,
localizado en el locus cromosómico 9q34
que codifica el cotransportador sodio-
fosfato IIc (NaPi-IIc), que se expresa en la
membrana apical de las células tubulares
proximales renales y que normalmente regula
la reabsorción del fosfato filtrado, bajo el
control de la PTH y del factor de crecimiento
fibroblástico (FGF 23).
Fosfaturias. Raquitismo hipofosfatémico
15. Aminoacidurias: CISTINURIA
Es la aminoaciduria más frecuente. Está
alterado el transporte específico de cistina y
de los aminoácidos dibásicos lisina, arginina y
ornitina en el túbulo renal y el intestino.
Se hereda con carácter AR y deriva de
mutaciones del gen SLC3A1 que un
transportador de aminoácidos básicos de gran
afinidad (rBAT)
16. Se caracteriza por cálculos de cistina que pueden aparecer en la
infancia, grandes cálculos coraliformes.
El diagnóstico se basa en la demostración de la
hiperaminoaciduria dibásica mediante cromatografía, y debe
sospecharse cuando aparecen abundantes cristales de cistina
en la orina.
Suele ser eficaz el incremento de la ingesta acuosa, la
alcalinización constante de la orina a un pH mayor de 7,5 y un
régimen bajo en sodio que disminuye la cistinuria.
Aminoacidurias: CISTINURIA
19. Disfunción tubular renal múltiple o síndrome de
Fanconi
Se trata de una disfunción múltiple del túbulo proximal, caracterizada por un trastorno de la reabsorción
de glucosa, aminoácidos, fosfato y, con frecuencia, también de bicarbonato.
Se expresa clínicamente por glucosuria, aminoaciduria generalizada no específica, hiperfosfaturia y
acidosis tubular renal (ATR) proximal.
20. anomalías eventualmente presentes son
proteinuria de tipo tubular, hiperuricosuria,
conservación inadecuada de sodio y
potasio e incapacidad para concentrar la
orina, con poliuria y polidipsia.
Hoy día, el término de síndrome de
Fanconi se utiliza indiscriminadamente
para designar cualquier disfunción tubular
proximal compleja.
Síndrome de Fanconi
22. Disfunción tubular renal múltiple o síndrome de
Fanconi
Dependen del grado de afectación tubular y de la etiología del síndrome. En la infancia se manifiesta
por retraso en el crecimiento y lesiones de raquitismo. Es frecuente la poliuria y puede ocasionar
cuadros de deshidratación. En el adulto los dolores óseos por osteomalacia y alteraciones
neuromusculares por hipocaliemia son los síntomas más frecuentes.
MANIFESTACIONES CLINICAS
23. En la analítica se observa hipofosfatemia con normocalcemia, acidosis hiperclorémica e hipocaliemia.
En la orina es característica la presencia de glucosuria, proteinuria de tipo tubular, hiperaminoaciduria
generalizada, hiperfosfaturia e hiperuricosuria.
El pH urinario es superior a 5,5, con cifras normales de excreción de acidez titulable y de amonio.
También se observa una pérdida renal de sodio, con hiponatremia moderada.
Disfunción tubular renal múltiple o síndrome de
Fanconi
MANIFESTACIONES LABORATORIALES
24. El específico de la causa, si se conoce.
Aportes de cloruro sódico, potasio, fósforo y bicarbonato/citrato por vía oral.
Metabolitos de la vitamina D.
Libre acceso al agua.
Los aportes intravenosos pueden ser necesarios al diagnóstico y en descompensaciones por
enfermedades intercurrentes. Es importante realizar rehidratación de forma temprana en las situaciones
en que se incremente la pérdida de líquidos y electrolitos.
Disfunción tubular renal múltiple o síndrome de
Fanconi
TRATAMIENTO
26. La ATR representa un síndrome clínico caracterizado por acidosis metabólica hiperclorémica causada
por un defecto de reabsorción tubular renal de bicarbonato y/o de excreción urinaria de ion
hidrógeno.
Aunque desde el punto de vista etiológico responde a numerosas causas, endógenas o exógenas,
fisiopatológicamente, la ATR puede clasificarse en tres grandes categorías: ATR proximal o tipo 2, ATR
distal o tipo 1, y ATR hipercaliémica o tipo 4.
Acidosis Tubular Renal
27. Acidosis tubular renal proximal (tipo 2)
Se caracteriza por una acidosis hiperclorémica secundaria a un defecto en la reabsorción de bicarbonato y
son normales los mecanismos de acidificación distales de la orina.
La regeneracion del 80-90% del bicarbonato filtrado tiene lugar a través de unos mecanismos de
transporte que incluyen la función de un contratransportador Na+ /H+ en la membrana luminal (NHE-3) y
de un cotransportador Na+ / HCO3 – (NBC-1) en la membrana basolateral.
Definición
28. A nivel tubular existen dos tipos de anhidrasa carbónica (AC): la AC tipo iV de acción luminal y la tipo ii
que es intracelular, un defecto en la AC tipo iV daría una ATR proximal; mientras que si el defecto es en la AC
tipo ii se produciría una acidosis combinada, proximal y distal asociada a osteopetrosis.
Patogenia
29. Existe una forma esporádica en lactantes, manifestada por un retraso del crecimiento, con buena
respuesta al tratamiento y que desaparece espontáneamente a la evolución.
Las formas persistentes suelen tener un carácter familiar; existe una forma de herencia AD que se
acompaña de retraso en el crecimiento; y otra AR donde el hipocrecimiento va asociado con retraso
mental y anomalías oculares.
La mayoría de las formas secundarias se asocia a otras anomalías tubulares en el contexto del
síndrome de Fanconi.
Acidosis tubular renal proximal (tipo 2)
Manifestaciones clínicas
30. El tratamiento de la ATR proximal debe ir dirigido a compensar la pérdida urinaria de bicarbonato:
administración de dosis elevadas de bicarbonato (o citrato), hasta 10-20 mEq/kg.
La hidroclorotiacida puede facilitar la corrección de la acidosis con dosis menores de alcalinos.
Acidosis tubular renal proximal (tipo 2)
Tratamiento
31. Acidosis tubular renal DISTAL (tipo 1)
Se debe a un defecto en los mecanismos de acidificación distal de la nefrona. El resultado es un
balance positivo de ácidos.
Las formas secundarias se han descrito asociadas a enfermedades genéticas (osteopetrosis,
eliptocitosis hereditaria,), procesos autoinmunes (síndrome de Sjögren), nefrocalcinosis
(hipervitaminosis D, , hiperparatiroidismo).
Con la administración de medicamentos y tóxicos (anfotericina B, sales de litio, amilorida, tolueno).
Definición
32. Las formas primarias dependen fundamentalmente
de un defecto de secreción de H+. La forma AD
depende de mutaciones del gen SLC4A1 que
codifica el recambiador de aniones basolateral de
las células intercaladas del túbulo colector cortical, la
llamada proteína banda 3 o AE1.
La forma AR con sordera nerviosa es debida a
mutaciones del gen ATP6V1B1 que codifica la
subunidad B1 de la H+-ATPasa vacuolar trans-
portadora de H+.
Patogenia
Acidosis tubular renal DISTAL (tipo 1)
33. La forma primaria suele manifestarse de manera florida después de los dos primeros años de vida:
vómitos, poliuria, deshidratación y falta de ganancia de peso. El fallo del crecimiento se hace cada vez
más evidente a medida que avanza la edad del niño.
La litiasis renal es más frecuente en adultos. La poliuria es constante y la hipocaliemia por pérdida
urinaria de potasio.
Manifestaciones clínicas.
Acidosis tubular renal DISTAL (tipo 1)
34. En la analítica aparece acidosis metabólica hiperclorémica, hipocaliemia y moderada hiponatremia.
El pH urinario es inapropiadamente elevado (superior a 5,5) en presencia de acidosis; la excreción
urinaria de acidez titulable y de amonio están disminuidas.
La coexistencia de hipercalciuria e hipocitraturia determina la precipitación cálcica en el tejido renal y
las vías urinarias.
Manifestaciones LABORATORIALES
Acidosis tubular renal DISTAL (tipo 1)
35. El tratamiento se basa en la administración de bicarbonato (o citrato) en cantidad suficiente para
compensar la producción endógena de hidrogeniones.
Los niños mayores o adultos suelen requerir alrededor de 1-3 mEq/kg al día de bicarbonato o citrato, a
la vez sódico y potásico.
El tratamiento correcto normaliza el crecimiento, corrige la hipercalciuria y la hipocitraturia y evita la
progresión de la nefrocalcinosis y el deterioro del filtrado glomerular.
Tratamiento
Acidosis tubular renal DISTAL (tipo 1)
36. Acidosis tubular renal hipercaliémica (tipo 4)
Se caracteriza por acidosis hiperclorémica con hiperpotasemia secundaria a una disfunción del
túbulo distal.
La anomalía tubular parece situarse en el túbulo distal y colector cortical y, específicamente, en el segmento
de intercambio donde actúa la aldosterona. La deficiencia de aldosterona, o una disminución de su acción
producen una disminución en la eliminación de potasio y en la secreción de hidrogeniones mediada por
aldosterona.
39. Síndrome de Bartter
Descrita en 1962 por Bartter, se caracteriza por
alcalosis metabólica, hipocaliemia,
hiperaldosteronismo con presión arterial normal.
Existe un defecto genético que altera el transporte de
sodio a nivel de la porción gruesa ascendente del
asa de Henle.
La llegada masiva de cloruro de sodio (ClNa) a
niveles más distales de la nefrona aumenta el
intercambio con potasio y conduce a una marcada
caliuresis con hipocaliemia secundaria.
40. Este síndrome se hereda de manera AR y es
genéticamente homogéneo, causado por
mutaciones del gen SLC12A3 que codifica el
cotransportador del túbulo distal Na-Cl sensible a
las tiacidas (NCC).
En sangre se observa hipocaliemia,
hipomagnesemia y alcalosis metabólica. En la
orina el hallazgo más característico, además de las
pérdidas elevadas de potasio y magnesio, es la
hipocalciuria.
Síndrome de Gitelman
42. Síndrome de Liddle
Aumento excesivo de la reabsorción tubular de
ClNa. El resultado es: expansión del volumen
extracelular, hipertensión arterial, inhibición del eje
renina-angioensina- aldosterona, hipocaliemia y
alcalosis metabólica.
El defecto genético se sitúa en uno los genes
codificadores de las subunidades del canal epitelial
de sodio sensible a amiloride (ENaC).
El tratamiento se basa en la administración de
sales de potasio y de un diurético tipo triamtereno.
48. Estudio del equilibrio hidrosalino con la determinación de iones (sodio [Na], potasio [K], cloro [Cl], calcio
[Ca], fósforo [P], magnesio [Mg]) en sangre y orina simultáneamente, de las excreciones en orina
minutada de 24 h y los índices en micción, así como las excreciones fraccionales (EF) o los índices de
excreción (IE).
a) EFNa (%): 0,6 ± 0,35
b) EFK (%): 9,6 ± 4
c) EFCl (%): similar a la de sodio, ligeramente más elevado.
ENFOQUE DIAGNOSTICO DE LAS TUBULOPATIAS
49. Para valorar la reabsorción de fósforo, se utiliza la tasa de reabsorción tubular de fosfato (RTP = 1 –
EFP), que en lactantes debe ser 78,7 ± 8,4%, y en niños mayores de 2 años, 92 ± 4,2%.
El gradiente transtubular de potasio (GTTK) aporta información acerca de la acción de la aldosterona:
(GTTK: [Ko +/(osmolaridado /osmolaridads )]/Ks ). Valores inferiores a 4-5 asociados a hiperpotasemia
indican hipoaldosteronismo.
La tira reactiva de orina y el análisis del sedimento urinario nos van a permitir conocer el pH (normal
< 5,5) y la densidad urinarios, así como la presencia de proteinuria, glucosuria y de cristales
característicos
ENFOQUE DIAGNOSTICO DE LAS TUBULOPATIAS
50. Ante el hallazgo de proteinuria, debemos diferenciar la proteinuria tubular o de bajo peso molecular
(ß2 -microglobulina, proteína ligadora del retinol, a1 -microglobulina y lisozima) de la glomerular,
realizando un perfil proteínico en orina de 24 h.
Estudio de la capacidad de concentración con la evaluación del volumen de orina en 24h. Éste es uno
de los indicadores más importantes de función tubular.
Para completar el estudio del metabolismo fosfocálcico, se realizará además la determinación de la
parathormona (PTH) y de metabolitos de la vitamina D, radiografías óseas para valorar raquitismo y
densitometría.
ENFOQUE DIAGNOSTICO DE LAS TUBULOPATIAS