Louis Jean François Lagrenée. Erotismo y sensualidad. El erotismo en la Hist...
83 ataduras.diciembre 2013
1. Efrén Martín, gerente de FV y profesor de Deusto Business School
AAttaadduurraass
Nº 83 Diciembre 2013 http://confidenciasdeungerente.blogspot.com www.fvmartin.net
Nuestro pensamiento y conocimiento, ¿nos humaniza y conecta a la realidad, o nos aliena y desconecta? Alienación es el alejamiento del ser humano respecto de sí mismo, al suplantar la Identidad a la Autenticidad; lo que nos dicen y creemos ser, a lo que somos.
Según John Lennon “la vida es aquello que te va sucediendo mientras te empeñas en hacer otros planes”; mientras para Gregory Bateson “tan sólo un esquizofrénico es capaz de comerse la carta del menú, en lugar de los platos que en él se indican”.
Somos locos que depositan demasiada fe en sus planes y menús, sufriendo cada vez que la inoportuna realidad derriba nuestra montaña de naipes; para reiniciar, como Sísifo, un nuevo ciclo de expectativas.
Quizá no somos muy distintos a un camello; viviendo atados a palabras e imágenes que, apareciendo y desapareciendo, programan nuestra vida. Nos creemos conscientes porque verbalizamos e imaginamos; cuando estas capacidades tienen, sobre todo, el poder hipnótico de sumergirnos en la inconsciencia.
¿Podríamos dejar de reaccionar según este automatismo condicionado y, sencillamente, responder a los acontecimientos tal cual son? Quizá, tomando plena conciencia de nuestra falta de conciencia plena, mediante la atención consciente. Meditación llamada Mindfulness.
Además, recuperar nuestros sentidos perdidos -por abstraídos- requiere: Valor. Para buscar respuestas en nosotros mismos en lugar de recurrir ansiosamente a autoridades externas. En asuntos tan íntimos, nuestra propia visión es infinitamente más útil que la opinión de cualquiera. Paradójicamente, puede servir de espuela un temor mayor: que la vida pase sin haberla comprendido y disfrutado, por la enajenación que nos imponen nuestros estereotipos. Des-identificación. No es lo mismo sentir la realidad como el camello que como el amo del camello: prestar atención al engaño lo alimenta; mientras que observar “desde fuera”, sin identificarse, hace palpable la diferencia entre lo pensado y lo real. Aceptación. La negación es nuestra opción favorita; pero al dejar de obsesionarnos en que las cosas sean como queremos, inmediatamente las aceptamos como son. Cesando nuestra resistencia, finaliza el dolor que la propia resistencia genera.
Pero toda tesis tiene su antítesis: vivir alienados tiene su ventaja. No siendo conscientes ni responsables de nosotros mismos podemos culpar de nuestros males a quien nos ata. Sin embargo, la paradoja es que nadie -salvo nosotros mismos- nos ata.
¡Desatémonos!
“Al acampar, los caravaneros no tenían más que 19 estacas para atar a sus 20 camellos. Cuando lo consultaron al amo, éste les dijo:
- Simulad que claváis una estaca cuando lleguéis al camello número 20. El camello es un animal tan estúpido, se creerá que está atado.
Efectivamente, así lo hicieron, y a la mañana siguiente todos los camellos estaban en su sitio. Al desatarlos para marcharse, todos se pusieron en movimiento menos el número 20 que seguía quieto, sin moverse, junto a su invisible estaca. Entonces el amo dijo:
- Haced el gesto de desatar la estaca de la cuerda, pues el tonto aún se cree atado.
Así lo hicieron y el camello entonces se levantó y se puso a caminar con los demás”. (Cuento oriental)