Este documento habla sobre enamorarse después de los cuarenta años. Explica que a esta edad el amor ha recorrido un largo camino con altibajos, pero que se ha aprendido sobre el amor. El amor maduro llega despacio y se queda, existe complicidad y espontaneidad entre la pareja. Enamorarse a esta edad es llevar ternura en la mirada y desear no equivocarse, para construir una relación basada en el querer y en dos almas y corazones que aman.