El documento habla sobre la vocación de los franciscanos seglares. Describe cómo la pandemia ha limitado la comunicación y encuentros en persona, pero que no quieren que esto se convierta en la nueva normalidad. Comparten una ponencia sobre el sentido de su vocación franciscana segla que consideran importante para su formación continua. Animan a los lectores a reflexionar sobre el tema y meditarlo.
1. La Vocación del Franciscano Seglar
Hermanos/as: hace tiempo que no tenemos contacto con vosotros,
dado el estado de excepción que nos está marcando la pandemia del Covid
19. Nos sentimos impotentes para salir de este estado de parálisis de movi-
lidad corporal al que nos obliga esta situación, pero no queremos que esto
se convierta en un modus vivendi permanente. Sentimos el deseo y la nece-
sidad de comunicarnos, de compartir nuestras inquietudes religiosas y de
vivir nuestra fe y nuestra vocación franciscana en comunidad y fraternidad.
Como sabéis, todos los años en el mes de enero, el Consejo Nacio-
nal, organiza un Encuentro de Formación a nivel nacional en Madrid. A
pesar de las dificultades, este año ha sido posible realizarlo los días 22 al
24 de enero de 2021 gracias a la técnica de las redes sociales, vía online, es
decir vía Internet.
Por esta vía nos han llegado el programa, los documentos… en una
palabra, el contenido de lo tratado y vivido en este Encuentro. De todo ello
hemos querido escoger para nuestra reflexión, la Ponencia impartida por el
Padre Manuel Díaz Buiza, O.F.M., porque la hemos considerado de gran
interés para nosotros a la hora de entender en su esencia el sentido de nues-
tra vocación como franciscanos seglares.
Os ofrecemos ahora una primera parte, para no agobiaros con una
lectura larga y quizá complicada, que podría parecerte demasiado densa.
Más adelante continuaremos con una segunda parte, para completar, lo
que, por sí solo, podría quedar incompleto. La consideramos de gran in-
terés para nuestra Formación como franciscanos seglares. Por eso quere-
mos que la consideréis un tema importante de formación y que no hagáis
de ella una simple lectura, sino que descubriendo lo que en ella se dice,
subrayéis aquello que más os interese para vivir intensamente vuestra vida
franciscana y cristiana y lo meditéis en vuestro corazón.
En folios aparte os la entregamos con Hermano Lobo de Febrero-
Marzo Paz y Bien.
El Responsable de Formación:
Lucidio Sánchez
Queridos hermanos y hermanas: Paz y Bien.
En estos momentos tan complicados que estamos
sufriendo por este Covid 19 que nos está limitando la vida
cotidiana e igualmente privados físicamente de nuestros
encuentros y celebraciones, que tanta falta nos hacen para
sentirnos vivos y en fraternidad, debemos ser fuertes , la
vida sigue y tenemos que motivar de alguna manera nues-
tra vida fraterna; para ello necesitamos tener la esperanza
de que todo pasará, la gracia del Espíritu Santo que en-
cienda en nuestro corazón la luz de la esperanza, y con la
ayuda de nuestra Madre la Virgen Santísima. Tenemos
que hacer frente a las dificultades y seguir viviendo, amándonos, ayudándonos,
viviendo como hermanos; nos necesitamos unos a otros.
Como ya sabéis este año tenemos la celebración del Capítulo Electivo, en
circunstancias normales se celebraría el 15 de abril, que es cuando se cumple el
trienio. Hace unos días, por carta dirigida a nuestra hermana Mª José Piriz, Mi-
nistra de la Zona de San Gregorio Magno, solicite la visita Fraterna y Pastoral,
igualmente la celebración del Capitulo Electivo. Dadas las dificultades que tene-
mos para que todo se desarrolle con normalidad, he dejado que la Junta de Zona y
su Ministra, Mª José Piriz decidan fecha y circunstancias para la celebración.
Os pido por favor que pongáis toda vuestra ilusión e interés en este aconteci-
miento. Buscad en el librito de nuestra Regla: página 123, art 76, todo lo referente
a las elecciones: así mismo en la página 139, art 92 tenéis todo lo relacionado con
la Visita Fraterna y Pastoral.
Son temas muy importantes y debemos conocerlos. Debemos aceptar lo que
la Fraternidad necesite de nosotros; no son cargos los que desempeñamos, son ser-
vicios; y es un gozo poder servir a los hermanos…
Espero por el bien de la Fraternidad que todo se desarrolle favorablemente.
Con todo mi cariño, y la bendición de nuestro hermano San Francisco-
Gracias por estar dispuestos a servirnos unos a otros.
Valentina Flores Sánchez
Vuestra Ministra y servidora
2. TIEMPO DE CONVERSION Y DE GRACIA
Iniciamos el camino de la Cuaresma, “el tiempo de la gracia, de la sal-
vación” como compendio de nuestra vida, que es camino, un viaje ó pe-
regrinación que nos lleva a la resurrección. Tiempo de silencio interior,
de examen de conciencia para detectar nuestras sombras e iluminarlas
con el perdón, con misericordia, con la confesión, con la conversión a
Dios. Tiempo de oración, de trato con el Señor interiorizando cada día al
igual que nuestro hermano S. Francisco fue ante todo una vuelta al Evan-
gelio como ideal y forma de vida y desde el Evangelio redescubrió esa
escala de valores que son siempre esenciales al cristianismo y aún a todo
humanismo. Tiempo de ayuno, de eliminar aquellos obstáculos que nos
impiden ser mejores, de saber elegir lo importante antes que lo urgente.
Tiempo de limosna, de saber compartir cua-
lidades, bienes, tiempo, vida. La auténtica
caridad no se limita a “dar” limosna, sino
que nos exige “darnos” a nosotros mismos.
Estos tiempos deben brotar de un corazón
limpio, honesto, que quiera vivir sin doblez
ante los demás y ante Dios. No valen los
dobles juegos, la doble cara o el vivir pen-
sando en la galería.
LA HOMILIA DEL SANTO PADRE FRANCISCO, miércoles de
ceniza nos inicia, con las palabras del profeta Joel, “Convertíos a mí de
todo corazón” (Jl 2,12). La cuaresma es un viaje de regreso a Dios.
Cuántas veces, ocupados ó indiferentes, le hemos dicho:”Señor,
volveré a Ti después, espera…Hoy no puedo, pero mañana empezaré a
rezar y hacer algo por los demás”. Y así un día y después otro. Ahora
Dios llama a nuestro corazón. En la vida tendremos siempre cosas que
hacer y tendremos excusas para dar, pero, hermanos y hermanas, hoy es
el tiempo de regresar a Dios. La cuaresma es un tiempo que implica toda
nuestra vida, todo lo que somos. Preguntémonos: ¿Hacia dónde está
orientado mi corazón? Nos ayudan los viajes de regreso que nos relata la
Palabra de Dios.
Que nuestra prioridad, cada día, sea el encuentro personal con el
Señor a través de la Palabra.
PAZ Y BIEN.
Hna. Sagrario Blázquez
DE LA ENCÍCLICA DEL PAPA FRANCISCO
“FRATELLI TUTTI”
“A veces me asombra que, con semejantes motivaciones, a la
Iglesia le haya llevado tanto tiempo condenar contundentemente la escla-
vitud y diversas formas de violencia. Hoy, con el desarrollo de la espiri-
tualidad y de la teología, no tenemos excusas. Sin embargo, todavía hay
quienes parecen sentirse alentados o al menos autorizados por su fe para
sostener diversas formas de nacionalismos cerrados y violentos, actitudes
xenófobas, desprecios e incluso maltratos hacia los que son diferentes. La
fe, con el humanismo que encierra, debe mantener vivo un sentido crítico
frente a estas tendencias, y ayudar a reaccionar rápidamente cuando co-
mienzan a insinuarse. Para ello es importante que la catequesis y la predi-
cación incluyan de modo más directo y claro el sentido social de la exis-
tencia, la dimensión fraterna de la espiritualidad, la convicción sobre la
inalienable dignidad de cada persona y las motivaciones para amar y aco-
ger a todos” (n. 86)
“El auténtico diálogo social supone la capacidad de respetar
el punto de vista del otro aceptando la posibilidad de que encierre algu-
nas convicciones o intereses legítimos. Desde su identidad, el otro tiene
algo para aportar, y es deseable que profundice y exponga su propia posi-
ción para que el debate público sea más completo todavía. Es cierto que
cuando una persona, o un grupo, es coherente con lo que piensa, se ad-
hiere firmemente a valores y convicciones, y desarrolla un pensamiento;
eso de un modo o de otro beneficiará a la sociedad. Pero esto sólo ocurre
realmente en la medida en que dicho desarrollo se realice en diálogo y
apertura a los otros. Porque «en un verdadero espíritu de diálogo se ali-
menta la capacidad de comprender el sentido de lo que el otro dice y
hace, aunque uno no pueda asumirlo como una convicción propia. Así se
vuelve posible ser sinceros, no disimular lo que creemos, sin dejar de
conversar, de buscar puntos de contacto y, sobre todo, de trabajar y lu-
char juntos” (n. 203).
No olvidéis que el Viernes Santo, aunque aún queda lejano, 2 de
abril, hacemos todos los años la colecta para mandar una ayuda a nuestros
Hermanos de Tierra Santa (por el mantenimiento de los Santos Lugares).
Sed, como siempre, generosos con esta ayuda y la que venís prestando
también a través de la bolsa de la Fraternidad.. Hacedlo con la entrega de
Hermano Lobo, ya que no podemos hacerlo de otra manera. Gracias a
todos.