1. ANESTESIA EN PACIENTE
EMBARAZADA CON PATOLOGIA
NEUROQUIRÚRGICA
Marco Antonio Yepiz Lachica R3A
Módulo: Neuroanestesiología
Profesor titular: Miguel Ángel López Oropeza
2. INTRODUCCIÓN
El manejo anestésico en una paciente embarazada con patología intracraneal
requiere el conocimiento de los cambios fisiológicos durante la gestación y la
repercusión del efecto farmacológico y fisiológico sobre el producto.
El tipo de patología que lleva a la paciente al quirófano, la edad gestacional y
el estado neurológico son determinantes para normar el manejo a seguir,
con el objeto de garantizar una adecuada neuroprotección y proteger al
producto contra una posible teratogenicidad.
16. TERATOGENICIDAD
• EL riesgo potencial de teratogenicidad y toxicidad de los fármacos
administrados debe ser valorado con el beneficio
CLASIFICACIÓN DE LOS FÁRMACOS DURANTE EL EMBARAZO, FDA
Categoría A Estudios controlados en humanos no muestran riesgo.
Categoría B No hay pruebas de riesgo, pero se han documentado
estudios controlados.
Categoría C Riesgo en humanos no ha sido excluido.
Categoría D Evidencia positiva de riesgo para humanos de estudios en a
nimales y seres humanos.
Categoría X Contraindicado en humanos.
17. Teratogenia: puede ocurrir en tres fases diferentes
• Embrionaria
• Comprende de 0-20 días de gestación. Periodo en que los fármacos siguen la ley
del todo o nada. Matan al zigoto o ni siquiera lo afectan
• Organogénesis
• Comprende desde la 3ª a la 8ª semana de gestación (15-60 días). Periodo en que se
produce la diferenciación celular y la formación de órganos.
• Fetal
• Comprende desde 9ª semana de gestación hasta el nacimiento. Periodo en que se
produce el crecimiento de estructuras y el desarrollo de funciones fisiológicas normales
18. PATOLOGÍA NEUROQUIRÚRGICA
ENFERMEDAD
VASCULAR
CEREBRAL
-Causa de 3.5 a 26 casos de disfunción neurológica por cada 100 000 nacimientos
-Más de 12% de muertes maternas. La incidencia en la edad reproductiva es de 10.7 casos
por cada 100 000 mujeres
MALFORMACIÓN
ARTERIOVENOSA
Y ANEURISMA
-La HSA secundaria a ruptura de aneurisma, o MAV, se presenta en 1 a 5 de cada
10 000 embarazos con una incidencia de 0.01 a 0.05%
-77% de los eventos hemorrágicos durante el embarazo se presentan como HSA
secundaria a ruptura de aneurismas y 23% son secundarios a sangrado de la MAV.
-La mortalidad materna tiene un riesgo de 30 a 40%.
NEOPLASIAS
CEREBRALES
-Las neoplasias intracraneales durante el embarazo tienen la misma incidencia que la
observada en la población general.
-Su incidencia es de 4 a 5% por cada 100 000 habitantes y no se modifica por el embarazo.
-El tipo de neoplasia más frecuente son los gliomas (40%), los meningiomas (30%) y otras
neoplasias como los neurinomas, los papilomas de plexo coroides y los meduloblastomas.
19. CUADRO
CLÍNICO
Los síntomas que indican un incremento de la
PIC en la paciente embarazada, como náusea y vómito, pueden
estar presentes desde el inicio de
La gestación y enmascarar dicho aumento.
Las causas más frecuentes de deterioro neurológico son la
preeclampsia y la eclampsia, que presentan vasoespasmo,
hipertensión y cefalea intensa
20. DECISIÓN DE MANEJO
DEPENDERÁ DEL TIPO DE PATOLOGÍA, LAS CONDICIONES
GENERALES DE LA PACIENTE Y LA EDAD GESTACIONAL
QUE IMPIDA O PONGA EN PELIGRO LA INTERRUPCIÓN
DEL EMBARAZO.
EL LÍMITE SON LAS 30 SDG.
21. VALORACIÓN
OBSTÉTRICA
• Edad gestacional: factor clave en la paciente que requiere
cirugía.
• Objetivo principal del obstetra: vigilancia del bienestar
materno y fetal.
CIRUGIA EN TRIMESTRE: CONSIDERACIONES
PRIMER TRIMESTRE -El principal riesgo es la teratogenicidad y la posibilidad de aborto
antes de la intervención quirúrgica
-Debe realizarse un USG para corroborar la edad gestacional, la
vitalidad fetal y la evaluación de frecuencia cardiaca.
SEGUNDO TRIMESTRE -El USG puede detectar malformaciones fetales, evaluación
cualitativa del líquido amniótico, alteraciones placentarias (como
hematomas por trauma) o hipertensión grave.
22. SDG
Más de 30
Se puede
efectuar cesárea
y craneotomía
Menos de 30
Se ponde en
riesgo la
viabilidad fetal
23. VALORACIÓN
FETAL
¿Existe alguna patología o
condición de base que comprometa
la oxigenación fetal?
• Objetivo primario: evitar una
disminución de flujo sanguíneo
hacia las arterias uterinas o una
disminución en el contenido de
O2.
24. Hiperventilación mecánica excesiva------ Reducción del retorno venoso
Alfa--adrenérgicos, dopamina y epinefrina------ Reducción del flujo
uteroplacentario
Considerar:
Desplazamiento uterino
Manejo con líquidos
Posición de Trendelenburg,
Elevación de miembros inferiores
Vendas compresivas.
O2 suplementario
26. MANEJO ANESTÉSICO
• Objetivos de la anestesia: garantizar la recuperación de
la madre y la continuación de la gestación sin secuelas
para el feto.
• La paciente embarazada necesita: adecuado flujo
uteroplacentario, para prevenir hipoxia fetal,manejo de
vía aérea difícil y riesgo elevado de broncoaspiración
27. VIA AEREA
La intubación es difícil o fallida en 5%
• incidencia de 1 en 30 en pacientes
embarazadas: ocho veces mayor que en
la población general
CAMBIOS QUE
DIFICULTAN LA
VIA AEREA
Edema de VR
Aumento de
peso
Aumento
mamario
PREDICTORES DE VAD
antecedentes en las
vías respiratorias
•cirugías, traumatismos y
malformaciones congénitas;
dentición prominente y
sobremordida;
cuello grueso o corto, o
con las dos
características;
distancia
tiromentoniana < 7
cm;
movilidad anormal
dela mandíbula;
distancia entre los
incisivos menor de
dos dedos;
mandíbula en
retroceso;
menos de tres dedos
entre el mentón y el
borde superior del
cartílago tiroides,
Mallampati y Belhouse
Doré desfavorables.
28. • Sospecha de VAD: proceder a la
ventilación con mascarilla laríngea (LMA),
fastrack, ctrach o el sistema de intubación
airtraq.
• El empleo de fibroscopia
para intubación con la paciente despierta
no está indicado en situaciones de PIC
aumentada o limítrofe, debido a
la posibilidad de incrementos súbitos de
la PIC.
29. • Medidas preventivas
contra broncoaspiración:
• Ayuno de 12 h
• Incrementar el vaciamiento gástrico y elevar el
pH gástrico
• La paciente gestante se considera con estómago
lleno
• No se recomiendan los ansiolíticos por la posible
depresión neonatal
30. Monitoreo
• Monitoreo invasivo
• Trazo electrocardiográfico en DII y V5
• Oximetría de pulso
• Presión arterial no invasiva (PANI)
• Capnografía
• Temperatura esofágica
• Monitoreo de relajación neuromuscular
• Gasto urinario
• Catéter de presión venosa central
• Línea arterial para medición de presión invasiva y
determinación de gases arteriales y electrólitos séricos
• Cardiotocógrafo ó Doppler.
31. Posición
• Durante el segundo trimestre se debe colocar
una cuña (almohadilla) debajo de la cadera
derecha de 10 a 15 cm
32. Inducción
anestésica
• Debe evitar incrementos
adicionales en la PIC en
presencia de una lesión
ocupativa o prevenir el
sangrado de una lesión
vascular.
35. Manejo de
líquidos
Administrar soluciones
isotónicas para prevenir
edema cerebral
Monitoreo adecuado
develectrólitos séricos
La glicemia debe mantenerse
alrededor de los 100 mg/dL
Cifras superiores a los 200
mg requieren manejo con
inSulina
El manitol en dosis mayores
de 1 g/kg atraviesa la barrera
placentaria
Usarse en dosis de 0.25 a
0.5 g/kg
Las pérdidas hemáticas deben reponerse 100%.
36. CESÁREA Y
CRANEOTOMÍA
COMBINADAS
• Ventaja: el producto no está expuesto a los efectos de los
anestésicos
• Cuando el producto alcanza las 28 SDG el embarazo puede
ser interrumpido
• La interrupción puede ser más segura sí el producto
alcanza entre 30 y 32 SDG
• Monitoreo es de tipo invasivo, como el indicado para la
craneotomía
• No puede realizarse una inducción de secuencia rápida
• Luego de la extracción del producto y el alumbramiento se
inicia la administración de oxitocina o carbetocina
• Evitar ergonovina
• Concluida la cesárea, se inicia la craneotomía estándar
• Infusión de oxitocina durante el transoperatorio
37. BIBLIOGRAFIA
• JOHNSON-CIPOLLAThe Cerebral Circulation During Pregnancy: Adapting to Preserve
Normalcy. Physiology (Bethesda). 2015 Mar; 30(2): 139–147.
• ANESTESIA DURANTE EL EMBARAZO PARA CIRUGÍA NO OBSTÉTRICA. Autores: Dra. Susana
Manrique, Dra. Carmen Fernández, Dra. Concepción Muñoz, Dra. Ana Plaza, Dra. Pinar de Santos,
Dra. Beatriz Tena y Carmen Suescun Coordinadora: Dra. Carmen Fernández Grupo de Anestesia
Obstétrica de la SAP Societat Catalana d’Anestesiologia, Reanimació i Teràpia del Dolor
• Bustamante. Manejo anestésico de la paciente de urgencia embarazada. Rev Chil Anest 2021; 50:
171-195
• Carrillo. Neuroanestesiologia y cuidados intensivos neurológicos. Edicion 1, 2007. Capítulo 21,
Neuroanestesiología en la paciente embarazada
Notas do Editor
Fig. 2.1 Central Hemodynamic Changes at Term
Gestation. Changes are relative to the nonpregnant
state. CO, cardiac output; SV, stroke volume; HR,
heart rate; LVEDV, left ventricular end-diastolic
volume; LVESV, left ventricular end-systolic volume;
EF, ejection fraction; LVSWI, left ventricular stroke
work index; PCWP, pulmonary capillary wedge pressure;
PADP, pulmonary artery diastolic pressure;
CVP, central venous pressure; SVR, systemic vascular
resistance; NC, no change. (Data from Conklin
KA. Maternal physiological adaptations during gestation,
labor, and puerperium. Semin Anesth. 1991;10:
221–234.)
Fig. 2.2 Cardiac Output during Pregnancy, Labor, and the Puerperium.
Values during pregnancy are measured at the end of the
first, second, and third trimesters. Values during labor are measured
between contractions. For each measurement, the relative contributions
of heart rate (HR) and stroke volume (SV) to the change in
cardiac output are illustrated.
Fig. 2.3 Left ventricular function in late phase of third-trimester normotensive
pregnant patients. LVSWI, left ventricular stroke work
index; PCWP, pulmonary capillary wedge pressure. (Modified from
Clark SL, Cotton DB, Lee W, et al. Central hemodynamic assessment
of cardiac function. Am J Obstet Gynecol. 1989;161:439–442.)
Fig. 2.5 Changes in airflow mechanics during pregnancy. The magnitude
of the increase in flow rates is small. The forced expiratory
volume in one second (FEV1) is within the normal range of predictive
values for nonpregnant individuals. FVC, forced vital capacity; PEF,
peak expiratory flow. (Based on data from Grindheim G, Toska K,
Estensen ME, Rosseland LA. Changes in pulmonary function during
pregnancy: a longitudinal study. BJOG. 2012;119:94–101.)
Adaptive response to pregnancy at the blood-brain barrier
Throughout gestation, the maternal circulation is flooded with many serum factors, including permeability factors and seizure-provoking constituents (24). Simultaneously, expression and/or activity of main efflux transporters Pgp and Mrp1 increase at the BBB, potentially in response to increased circulating factors that serves to protect the brain from these factors (20, 29). Black arrows indicate expulsion of circulating factors by Pgp and Mrp1 during pregnancy and protection of the brain from such seizure-provoking factors. Circulating permeability factors VEGF and PlGF increase during pregnancy but are unable to exert an effect on BBB permeability due to concurrent increases in sFlt-1 that limit their bioavailability (14, 76). Pregnancy does not affect tight junction proteins or paracellular permeability of the BBB (26). Centrally, microglia remain in an inactive state; however, AQP4 expression on astrocytes is increased over the course of gestation (48, 68). Furthermore, GABAA receptor subunits are downregulated in the cerebral cortex and hippocampus, resulting in increased neuronal excitability (48, 54).
Structural changes of cerebral arteries and arterioles during pregnancy
The cerebral arteries on the brain surface undergo little to no change in luminal diameter or vessel wall thickness during pregnancy. However, intraparenchymal arterioles that branch off the pial surface arteries and perfuse the brain parenchyma undergo outward hypotrophic remodeling, resulting in larger vascular lumens and thinner vessel walls compared with the nonpregnant state (26). Structural remodeling of cerebral arterioles is through a mechanism involving increased circulating relaxin that crosses the BBB and activates PPARγ on astrocytes and neurons, production of VEGF, and activation of matrix metalloproteinases (17, 26). In addition, capillary density increases in the posterior brain region during pregnancy through a similar mechanism (26). These changes may be occurring due to increased demand of blood supply in neuroendocrine glands that enlarge during pregnancy (e.g., the pituitary gland) (43) or areas involved in production and/or secretion of pregnancy hormones. The increase in vascular volume of the cerebral circulation during pregnancy combined with expanded plasma volume may underlie the susceptibility to edema formation during acute hypertension and other forms of brain injury such as seizure. Figure was adapted with permission from Ref. 26.
Cerebral blood flow autoregulatory curves in the pregnant and nonpregnant state
Within the arterial pressure range of ∼60–160 mmHg, cerebral blood flow is relatively constant due to cerebral arteries and arterioles that constrict in response to increased pressure and dilate in response to decreased pressure (52, 60). At pressures in excess of the upper limit of autoregulation, forced dilatation of cerebral arteries and arterioles occurs, causing hyperperfusion and a linear relationship between flow and pressure (52). At pressures below the lower limit of autoregulation, flow drops in response to decreased pressure when vasodilation of cerebral vessels cannot compensate (52). The drop of cerebral blood flow during hypotension can cause ischemic brain injury. Impaired autoregulation of cerebral blood flow occurs at both pressure extremes, and flow becomes linearly related to pressure. Pregnancy extends the cerebral blood flow autoregulatory curve at both ends, shifting both the lower and upper limits modestly (18, 22). The leftward shift of the lower limit may be due to the enhanced vasodilation of cerebral arteries that occurs during pregnancy in response to decreased intravascular pressure, whereas the outward remodeling of penetrating arterioles may contribute to the rightward shift in the upper limit. Overall, the extension of autoregulation to higher and lower pressures may be protective of the brain, especially during parturition. There is no significant change in basal cerebral blood flow in the pregnant compared with the nonpregnant state, which is only ∼10% increased globally (15, 26).
Figure 4. Summary of cerebrovascular changes associatedwith hypertension, pregnancy, and preeclampsia.
In the hypertensive, non-pregnant state, wall thickness increases and lumen diameter decreases. In
pregnancy, there is an adaptive outward remodeling while in preeclampsia, there is a lack of inward
remodeling in response to hypertension, causing cerebral blood vessels to be more susceptible to blood
brain barrier (BBB) disruption and micro-bleeds. In chronic hypertension, pregnancy reverses the
in-ward remodeling of the cerebral vessels. Increased blood pressure and velocities in vessels with
thin walls can cause transmittal of pressure to the micro-vessels causing BBB leakage and micro-bleeds.
This induces increases in glial cells and chronically, neuroinflammation. Tube-like structures represent
capillaries, star-shaped cells represent glia, and red mini-circles represent micro-bleeds.
Cuando una paciente embarazada requiere cirugía, el
riesgo potencial de teratogenicidad y toxicidad de los
fármacos administrados como anestésicos o adyuvantes
en el tratamiento debe ser valorado con el beneficio
La Federal Drug Administration
(FDA) clasifica los fármacos que se administran
durante el embarazo en cinco categorías:
S Categoría A: estudios controlados en humanos no
muestran riesgo.
S Categoría B: no hay pruebas de riesgo, pero se han
documentado estudios controlados.
S Categoría C: riesgo en humanos no ha sido excluido.
S Categoría D: evidencia positiva de riesgo para humanos
de estudios en animales y seres humanos.
S Categoría X: Contraindicado en humanos.
las acciones teratógenas pueden ocurrir en tres estadios diferentes: - Fase embrionaria. Comprende de 0-20 días de gestación. Periodo en que los fármacos siguen la ley del todo o nada. Matan al zigoto o ni siquiera lo afectan. Se produce aborto o regeneración. Las células que no mueren tienen una capacidad multipotencial de regenerarse. - Fase de organogénesis o embrionaria o de máximo riesgo. Comprende desde la 3ª a la 8ª semana de gestación (15-60 días). Periodo en que se produce la diferenciación celular y la formación de órganos. El efecto teratógeno puede manifestarse desde nada hasta un aborto espontáneo o un defecto anatómico, 6 metabólico o funcional, pudiendo ser letal o manifestarse durante la vida. Si ello es posible, durante este periodo el tratamiento con fármacos deberá ser pospuesto. - Fase fetal. Comprende desde 9ª semana de gestación hasta el nacimiento. Periodo en que se produce el crecimiento de estructuras y el desarrollo de funciones fisiológicas normales. El efecto teratógeno, con mucha probabilidad, originará alteraciones en el ritmo normal de crecimiento o bien interferencias en el desarrollo funcional de órganos específicos
Los síntomas que indican un incremento de la PIC
en la paciente embarazada, como náusea y vómito, pueden
estar presentes desde el inicio de la gestación y enmascarar
dicho aumento.1,3,5,7,9
Las causas más frecuentes de deterioro neurológico
son la preeclampsia y la eclampsia, que presentan vasoespasmo,
hipertensión y cefalea intensa
Si el producto tiene 30 semanas o más se puede detener
al embarazo y hacer la craneotomía; antes de que sea
posible garantizar la viabilidad del producto es preferible
realizarle la cirugía a la paciente.2 Si el estado neurológico
lo permite y de acuerdo con el tipo de lesión y su
adecuada respuesta almanejomédico, o en el caso de las
MAV que son extirpadas durante el embarazo e incrementan
la morbimortalidad por mayor sangrado transoperatorio
cuando la resección se realiza después del segundo
trimestre, es posible llevar el embarazo a término
y la resolución generalmente será por vía abdominal.
1,5,12
Los tumores intracraneales se controlan al principio
con esteroides, ya que los diuréticos osmóticos, como el
manitol, ocasionan deshidratación fetal y materna. En
ocasiones se realiza una biopsia estereotáctica del tumor
bajo anestesia local y, si el tumor es de bajo grado
y no hay deterioro neurológico, se espera lamaduración
ventilatoria del producto.
En el caso de ruptura aneurismática es necesario realizar
un clipaje, debido al riesgo de resangrado.2,10--12
LasMAVse pueden controlar de forma conservadora
o con la interrupción del embarazo por vía abdominal y
el posterior tratamiento quirúrgico definitivo. Si la paciente
se encuentra en el primero o segundo trimestre es
posible realizar una craneotomía para exéresis tumoral
o clipaje de aneurisma y que el embarazo prosiga, pero
si la paciente lleva 30 SDG se le debe hacer la cesárea
y después la craneotomía.2,10,11,14,15 También se pueden
hacer cirugías para derivación de hidrocefalia y apertura
de ventriculostomía hasta llevar a la paciente al manejo
definitivo.
En la actualidad el manejo de aneurismas por embolización
endovascular tiene auge, pero existen pocos casos
realizados en pacientes embarazadas,14 ya que el
riesgo de ruptura durante el procedimiento es elevado
y la exposición a la radiación y la administración de antiagregantes
o anticoagulación y de dosis altas de medios
de contraste limita estas técnicas.
El manejo médico de edema cerebral con esteroides
puede ocasionar supresión adrenal e hipoadrenalismo
en el producto.2 La fenitoína tiene efectos mínimos sobre
el feto y los diuréticos de ASA u osmóticos pueden
provocar deshidratación y alteraciones hidroelectrolíticas
graves.1,2,5,12
Es de vital importancia conocer los factores que afectan
el flujo placentario, sin olvidar que éste depende de
la presión de perfusión media y carece de autorregulación.
Todos los factores que ocasionan hipotensión,
como el uso de inductores, hipovolemia por sangrado o
restricción de volumen, administración de diuréticos y
compresión aortocava por compresión uterina, repercutirán
directamente sobre la PAM, disminuyendo el flujo
placentario.2
El incremento en la PIC debido a lesión tumoral, hemorragia
intracraneal subaracnoidea o intraparenquimatosa
secundaria a ruptura de aneurisma cerebral,
malformaciones arteriovenosas (MAV), hidrocefalia o
hipertensión materna, que condicionan un deterioro
neurológico grave, requieren un manejo neuroquirúrgico
de urgencia.
La edad gestacional es el factor clave en la paciente que
requiere cirugía. El objetivo principal del obstetra es la
vigilancia del bienestar materno y fetal. Si la cirugía se
realiza durante el primer trimestre, el principal riesgo es
la teratogenicidad y la posibilidad de aborto antes de la
intervención quirúrgica;
Si el producto tienen más de
30 SDG, pueden efectuarse la cesárea y la craneotomía,
previo esquema de maduración pulmonar fetal de ser
posible. Antes de las 30 SDG se pone en riesgo la viabilidad
fetal por inmadurez,
La
hiperventilación mecánica excesiva puede reducir el retorno
venoso y, por lo tanto, la poscarga, lo cual se traduce
en una disminución neta en el flujo uterino. Los medicamentos
como agentes alfa--adrenérgicos, dopamina
y epinefrina pueden reducir el flujo uteroplacentario si
se utilizan para tratar la hipotensión materna. Se deben
considerar maniobras como desplazamiento uterino a la
izquierda, manejo con líquidos, posición de Trendelenburg,
elevación de miembros inferiores o uso de vendas
compresivas.18 La administración de oxígeno incrementa
la oxigenación fetal sin riesgo de hiperoxia fetal dado
que la tensión de oxígeno no excede nunca los 65 mmHg.
Comienza con el historial clínico y una exploración
neurológica completa, para valorar el estado funcional
del cerebro. La mayor parte de la información relativa
al progreso del paciente antes, durante y después del tratamiento
proviene de la exploración secuencial del estado
de conciencia, de los nervios craneales y de la función
motora y sensitiva de las extremidades, así como
de la presencia de reflejos patológicos.
Los objetivos de la anestesia durante el embarazo consisten
en garantizar la recuperación de la madre y la continuación
de la gestación sin secuelas para el feto. La
tarea del anestesiólogo es vigilar a los dos pacientes.
La paciente embarazada necesita un control que garantice
un adecuado flujo uteroplacentario, para prevenir
hipoxia fetal,manejo de vía aérea difícil y riesgo elevado
de broncoaspiración; sin embargo, existe el riesgo
de pérdida fetal por parto pretérmino o aborto y teratogenicidad.
2,4
La intubación es difícil o fallida en 5%de las anestesias
generales en obstetricia, con una incidencia de 1 en 300
en pacientes embarazadas: ocho veces mayor que en la
población general. Los cambios fisiológicos relacionados
con las vías respiratorias que predisponen a la vía
aérea difícil en la embarazada son edema de las vías respiratorias,
aumento de peso y agrandamiento de las mamas.
antecedentes en las
vías respiratorias como cirugías, traumatismos y malformaciones
congénitas; dentición prominente y sobremordida;
cuello grueso o corto, o con las dos características;
distancia tiromentoniana < 7 cm; movilidad anormal dela mandíbula; distancia entre los incisivos menor de dos
dedos;mandíbula en retroceso; menos de tres dedos entre
el mentón y el borde superior del cartílago tiroides,
y valoraciones de Mallampati y Belhouse Doré desfavorables.
La
Si se sospecha que la intubación mediante laringoscopia
será difícil o se presenta de imprevisto, se debe
proceder a la ventilación con mascarilla laríngea
(LMA), fastrack, ctrach o el sistema de intubación airtraq.
Hay que considerar el empleo de tubos endotraqueales
de menor calibre de acuerdo con la talla y el
peso (cuadro 21--4).21 El empleo de fibroscopia para
intubación con la paciente despierta no está indicado en
situaciones de PIC aumentada o limítrofe, debido a la
posibilidad de incrementos súbitos de la PIC.
La paciente debe recibir medidas preventivas contra
broncoaspiración, como ayuno de 12 h, para garantizar
un adecuado aporte calórico vigilando estrechamente
las cifras de glicemia; está indicada la administración de
ranitidina y metoclopramida, con el fin de incrementar
el vaciamiento gástrico y elevar el pH gástrico. La pa
ciente
gestante se considera con estómago lleno, por lo
que durante la intubación deberá emplearse la maniobra
de Sellick. No se recomiendan los ansiolíticos por la po
sible
depresión neonatal
El monitoreo es de tipo invasivo, trazo electrocardiográfico
en DII y V5, oximetría de pulso, presión arterial
no invasiva (PANI), capnografía, temperatura esofágica,
monitoreo de relajación neuromuscular, gasto urinario,
catéter de presión venosa central (figura 21--3), línea
arterial para medición de presión invasiva y determinación
de gases arteriales y electrólitos séricos.