El documento habla sobre la tentación de Jesús en el desierto luego de ayunar por 40 días y noches. Describe cómo el hombre sometido a la prueba intenta someter a Dios a prueba también. Explica que tentamos a Dios cuando nos ponemos en peligro esperando que Él nos salve, cuando adoramos otras cosas en lugar de a Él, o cuando nos llamamos hijos de Dios pero olvidamos a nuestros hermanos. Concluye agradeciendo a Jesús por habernos mostrado la fidelidad al Padre a través de su
4. El ser humano ha de preguntarse
por las hondas razones
que le mueven a caminar.
Ha de plantearse el porqué
y el para qué
de sus elecciones.
La gran tentación es
la de volver la espalda a la verdad.
5. 2, 13-17
El hombre sometido a la prueba,
trata de someter a la prueba al mismo Dios.
6. El evangelio ha puesto en boca de Jesús
uno de los mandatos
del Deuteronomio.
2, 13-17
7. Tentamos a Dios cuando nos ponemos
osadamente en un peligro y pretendemos
que Él venga a librarnos en el último momento.
8. Tentamos a Dios cuando olvidamos su amor
y adoramos a otras cosas como si fueran un Dios que
puede salvarnos.
9. Tentamos a Dios cuando nos llamamos hijos suyos
y olvidamos a nuestros hermanos
que también lo llaman “Padre”.
10. Señor Jesús,
tentado como nosotros,
te damos gracias
por habernos revelado,
con el ejemplo de tu
insobornable fidelidad
al Padre, el camino
que nos lleva a la felicidad.
Amén.
11. José Román Flecha Andrés
DIOS CON NOSOTROS–Salamanca
Presentación: Antonia Castro Panero