Venus es el planeta más parecido a la Tierra en tamaño y masa, pero su densa atmósfera provoca un intenso efecto invernadero que eleva la temperatura a 480°C. A pesar de su formación similar, Venus carece de océanos y su superficie volcánica es mucho más joven que la de la Tierra. El 85% del planeta está cubierto por roca volcánica, incluyendo largos surcos de lava de hasta 7.000 km.