3. Cindy Sherman empezó a
interesarse por el arte
después de encontrar un
libro con
reproducciones de
artistas como Picasso y
Dalí. La artista comenzó
sus estudios de arte en la
Universidad Estatal de
Búfalo en 1972, donde
pronto abandonó la
pintura para centrarse en
la fotografía, arte que
considera más atractivo
e inmediato.
En 1976, después de
graduarse, Sherman se
mudó a la ciudad de
Nueva York.
Allí, comenzó a trabajar
sola en su
estudio, asumiendo todos
los roles: era al mismo
tiempo la autora y la
protagonista de sus
fotografías.
Para Sherman, tanto el
cine como la televisión
tienen una influencia
determinante en la
configuración de los
estereotipos de género.
En sus fotografías, analiza
de forma crítica lo que
hay de artificial bajo esa
construcción de lo
femenino.
4.
5. Lo que nunca diríamos es
que son autorretratos.
Es verdad que es la propia
artista quien posa en sus
fotografías, pero como se
ha descrito en algún
estudio, ella pone su carne
en la imagen. Lo que se
retrata son aquellos
personajes o estereotipos
creados sobre la mujer
moderna.
6. Han descrito
su trabajo
como un
híbrido de
fotografía,
performance
solitaria y
teatro. Y sí,
Sherman se
viste, se
maquilla y se
peina ella
sola. Prepara
con
minuciosidad
el escenario e
incluso ella
misma
dispara el
obturador de
la cámara.
Sus planos
tienen
apariencia
cinematográfica
y nos
recuerdan,
sobretodo en
sus primero
trabajos, al cine
negro. En sus
trabajos más
recientes utiliza
planos enteros y
algo más
centrados,
además de
utilizar nuevas
tecnologías
como
Photoshop.
7. Lo captado no son mujeres, son los modelos, los tipos de mujer que han querido
hacernos creer que existen.
8. Cindy Sherman encarna a la
ama de casa, la secretaria, la
colegiala, la bibliotecaria, la
dama de alta de sociedad, la
reina del baile… En ocasiones
captando un instante de su
vida cotidiana o simulando
hacer un retrato tradicional
de ellas.
9. El toque maestro de
su obra es hacernos
ver exactamente lo
que quiere que
veamos. Y no vemos
personas, vemos
tipologías. En
ocasiones lo hace
con maquillajes
excesivos, que en
vez de ocultar la
arruga, la marca más
todavía. O con
distintos tipos de
prótesis, que
caracterizan al
personaje a la vez
que transmite lo
artificial y el engaño
en general de la
imagen…
10. Imagina que entras a una
sala enorme. Ves retratos de
gran formato, algunos incluso
con majestuosos marcos. A
lo lejos puedes ver una bella
mujer, de unos cincuenta
años, posando en lo que
parecen unos preciosos
jardines de una propiedad
privada. Te vas acercando y
vas comprobando cómo ese
bello rostro está terriblemente
marcado por arrugas y cómo
el maquillaje y los terribles
pendientes dan un aspecto
ridículo. Compruebas que lo
que veías a lo lejos no tiene
nada que ver con lo que
contemplas ahora, y esa
bombillita que todos tenemos,
se enciende. Pues ésa, ésa
es la obra de Cindy Sherman.
11.
12. Mucho más que una persona deben beber.
Mucho más que una mujer deben sentirse.
13. Tal vez usted no ha dicho lo que
pensaba decir. Tal vez debería haber
sabido reaccionar en una forma
diferente. Pero las cosas son hacer y
hacer que se queden...
14. Me salen otra vez y verás lo que yo estoy hecho de. Traicionarme nuevamente...
15. Arrugas, manchas y
bolsas de todo que
puedo ocultar.
Dolor, incertidumbre y
miedo – no con el más
pesado de cremas.