El portal Semana.com revela una ponencia del magistrado Jorge Pretelt en la que advierte que fumigaciones con el herbicida deben continuar para no entorpecer la lucha contra el narcotráfico.
COLOMBIA: La ponencia que aseguraría vía libre al glifosato
1. COLOMBIA: La ponencia que aseguraría vía libre al glifosato
Resumen Latinoamericano /Semana/30 de abril 2015.-
El portal Semana.com revela una ponencia del magistrado Jorge
Pretelt en la que advierte que fumigaciones con el herbicida deben
continuar para no entorpecer la lucha contra el narcotráfico.
El debate por uso del glifosato está candente. De un lado, el ministro
de Salud, Alejandro Gaviria, sigue firme en su posición de que se
abandone el uso del agroquímico para erradicar cultivos ilícitos, por
los efectos nocivos para la salud y el medio ambiente.
Del otro, el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, y el procurador
general, Alejandro Ordóñez, consideran que es una herramienta clave
para la lucha contra el narcotráfico. El tema se decidirá el próximo 14
de mayo cuando se reúna el Consejo Nacional de Estupefacientes, del
que ambos hacen parte.
Ahora la Corte Constitucional, que no pasa por su mejor momento,
está ad portas de sentar su posición respecto del tema, mediante un
fallo de tutela. Semana.com conoció la ponencia del magistrado Jorge
Pretelt en la que niega categóricamente la posibilidad de suspender la
aspersión con el químico para “no entorpecer la lucha que lleva a
cabo Colombia contra el narcotráfico y los grupos armados al margen
de la ley”.
La ponencia corresponde al proceso T-425959, en la que se niega la
suspensión del uso del glifosato en Chocó contra los cultivos ilegales.
En la ponencia, Pretelt argumenta que las condiciones de violencia e
inseguridad, así como el aumento de los cultivos ilícitos en el país en
el último año, demuestran la necesidad de continuar con la aspersión
aérea del herbicida.
2. “Suspender este programa aumentaría el riesgo de miles de soldados
que valientemente arriesgan su integridad en los programas de
erradicación”, dice el documento. Igualmente resalta que es
fundamental realizar una lucha contra los grupos al margen de la ley,
como las FARC, los paramilitares y las bacrimes.
En el proyecto del fallo se hace énfasis en que es un deber con el país
y el mundo la lucha contra el narcotráfico, “la cual se desconocería si
se suspende la erradicación de cultivos ilícitos mediante aspersión
aérea con glifosato”.
Por estos aspectos Pretelt propone negar la tutela interpuesta por el
personero del municipio de Nóvita (Chocó), Haydin Javier Valencia,
contra la Dirección de Antinarcóticos de la Policía Nacional en el
departamento.
“Según informes de alertas tempranas de la Defensoría del Pueblo, en
Chocó todavía hay presencia de los frentes 57, 34, 30 y Aurelio
Rodríguez de las FARC. Incluso en el Plan Nacional de Desarrollo se
afirma que la decisión de utilizar aspersiones aéreas con glifosato
depende de si existe presencia significativa de grupos armados
ilegales en la zona”, dice la ponencia que se encuentra en estudio de
los magistrados de la sala séptima de revisión de la Corte
Constitucional.
Observadores señalan que esta ponencia riñe con el auto 073 de la
Corte Constitucional, que en el 2014 recomendó a los Ministerios de
Salud y Ambiente hacer seguimiento a las fumigaciones con el
químico con el fin de que no dañara la salud de los colombianos y el
medio ambiente. El pronunciamiento sirvió al ministro Gaviria para
recomendar la suspensión.
Pretelt concuerda con que irá en contravía del auto (figura empleada
para realizar seguimiento a una problemática general, pero que no es
vinculante), pero que prevalecería la decisión derivada del
acogimiento de esta ponencia, puesto que adquirirá el rango de
sentencia.
El Ministro de Defensa miente, estas son las pruebas
Asociación Campesina del Catatumbo – Ascamcat /
Jueves 30 de abril de 2015
El ministro Pinzón ya no convence a nadie con sus remedos marciales
y sus muecas autoritarias, ya hemos visto cómo ni los policías ni los
militares le hacen caso cuando él les pide que no ridiculicen con
chiflidos al presidente Santos; también hemos sido testigos de cómo
la Agencia Internacional para la Investigación en Cáncer (IARC),
3. perteneciente a la Organización Mundial de la Salud y el mismo
ministro de salud Alejandro Gaviria, le han hecho quedar “como un
zapato” al reconocer públicamente que los campesinos teníamos la
razón al denunciar el daño que en nuestra salud y en el medio
ambiente ha ocasionado la aspersión violenta de glifosato como
táctica de desplazamiento forzado, auspiciada por el gobierno de
EE.UU.
Hemos presenciado cómo el señor Pinzón pasa de ser una despiadada
fiera que embiste las esperanzas de paz de los colombianos, a ser un
complaciente cachorro que calla frente a la corrupción de los mandos
militares y los proveedores del ministerio de defensa; lo sufrimos
cuando al envalentonarse contra la protesta social nos estigmatizaba
diciendo que somos guerrilleros, de la misma manera, también lo
hemos visto en su visita a EE.UU, muy dócil, pidiendo la continuidad
de la intervención militar “gringa” en nuestro país.
Pero ahora, a su desvencijada gestión se suma otro mal cálculo
político, el ministro mintió sobre la existencia de un supuesto
programa de sustitución de los cultivos de coca y aprovechó para
llamar tramposos, delincuentes y criminales a los campesinos del
Catatumbo, aquí tenemos tres pruebas para demostrar que Pinzón
mintió sobre el programa de sustitución, utilizando los medios de
comunicación para ambientar el regreso de los erradicadores al
Catatumbo y la continuidad de las destructivas fumigaciones aéreas
en todo el país:
1. No hemos incumplido el acuerdo de sustitución, por que dicho
acuerdo no existe: El ministro no puede probar que en el Catatumbo
se haya incumplido un acuerdo de sustitución de cultivos de coca,
porque sencillamente el gobierno no ha firmado ningún acuerdo de
sustitución en la Mesa de Interlocución y Acuerdo del Catatumbo. Por
nuestra parte los campesinos y campesinas organizadas en Ascamcat,
le hemos pedido con urgencia a los representantes del ejecutivo en la
MIA, que estudien nuestra propuesta de sustitución de los ingresos
que percibe la familia campesina por cultivar coca; a la fecha, el
gobierno no ha presentado contrapropuestas ni ha aceptado nuestras
demandas.
2. El acuerdo que firmamos tiene como objetivo reparar a las familias
víctimas de la doctrina de la guerra contra las drogas, víctimas de la
erradicación violenta de estos cultivos: Al contrario de lo afirmado por
el ministro, los representantes del gobierno en la MIA firmaron con
nosotros un acuerdo de reparación pos-erradicación para estabilizar
socioeconómicamente a las familias campesinas que fueron víctimas
de la erradicación violenta de los cultivos de coca. Este acuerdo,
busca atender a las campesinas y campesinos que fueron despojados
mediante la violencia del único cultivo capaz de proveer subsistencia
4. a sus familias, con este acuerdo el gobierno pretendió atender la
crisis humanitaria que él mismo creó con la implementación de la
doctrina de la lucha contra las drogas.
Como se puede leer de manera textual en aquel acuerdo firmado el
28 de agosto de 2013, la estrategia de pos-erradicación es sólo una
“parte” inicial del programa de sustitución que se debió acordar en el
marco del “Laboratorio de Paz” del Catatumbo que tanto promulgó el
presidente SANTOS en los medios de comunicacion; sin embargo, el
gobierno ha obstaculizado el avance de los diálogos por medio de
maniobras dilatorias de todo tipo, impidiendo que se firmen acuerdos
de fondo. No obstante, según verificación de la UNODC el 98% de las
familias que se comprometieron a no resembrar cultivos de coca
mientras estuvieran cobijados por la estrategia de pos-erradicación
han cumplido con su compromiso a pesar de que el gobierno no ha
observado los plazos en los que se comprometió a entregar las
reparaciones.
3. En la última sesión de la MIA los campesinos y campesinas
volvimos a presentar nuestra propuesta de un programa de
sustitución gradual, concertado, estructural y ambientalmente
sostenible: Como otra prueba de que el programa de sustitución no
se ha firmado y de que ha sido precisamente el gobierno quién no ha
mostrado interés de avanzar en este acuerdo, podemos señalar que
el acta de la última MIA del 27 de marzo, levantada por funcionarios
del PNUD, relata cómo desde Ascamcat presentamos una propuesta
de sustitución de ingresos derivados de los cultivos de coca que se
fundamenta en el PDS de la ZRC-C del Catatumbo, otra de nuestra
iniciativas que ha sido obstaculizada de manera fraudulenta por el
gobierno Santos y los grupos de presión interesados en negarnos el
derecho al territorio.
Del mismo modo en dicha sesión de la MIA se reiteró por parte de los
representantes del ejecutivo un reconocimiento al campesinado que
ha cumplido sus compromisos de no resiembra.
Las campesinas y campesinos del Catatumbo que nos hemos visto
obligados a sembrar coca como único medio de subsistencia, le
podemos decir al país que el ministro de defensa miente, y en este
caso con la peor mentira de todas: una verdad a medias; quiere
hacer pasar la reparación de las familias víctimas de la erradicación
violenta como un supuesto acuerdo de sustitución es decir, quiere
usar el fracaso de la política de guerra contra las drogas que obligó al
gobierno a reparar a las familias víctimas de la erradicación, en su
favor. El señor Pinzón olvida que hemos sido los campesinos quienes
hemos cumplido según la UNODC en un 98% los acuerdos de no
resiembra, a pesar de que el gobierno no ha cumplido en los tiempos
5. acordados con los compromisos de la asistencia alimentaria, la base
para el sostenimiento económico o el empleo temporal.
Señor Pinzón, Colombia es el único país del mundo que se dejó
imponer por los EEUU las fumigaciones aéreas con un agente
cancerígeno y destructor de la naturaleza como el glifosato. Esta
política fracasada se complementa con la criminalización de los
campesinos en el marco de la ley 30, la cual solo en el Catatumbo
tiene a 400 finqueros y recolectores de hoja en la cárcel, mientras los
verdaderos narcotraficantes se regodean en las instituciones y en la
vida económica del país.
Por lo tanto, señor Pinzón, le exigimos que demuestre lo dicho, lo
invitamos a que se responsabilice de sus afirmaciones y las
compruebe, si no lo puede hacer, como va a suceder, por lo menos
pídale disculpas al campesinado del Catatumbo, al que ha denigrado,
al cual ha satanizado y ofendido con sus palabras.