1. Conservar las tradiciones – Navidad (1)
Los niños querrán participar de las tradiciones de su ambiente. Nada mejor que
contarles las cosas tal como son o han sido en el tiempo, ya no repetimos relatos
fantásticos, si los hubo son parte de esas mismas tradiciones.
Por ejemplo, cuenta Desmond Morris en su libro “Tradiciones de Navidad” cuál es el
origen del árbol de Navidad. Parece ser que hace mil doscientos años, en especial los
germanos paganos, veneraban al roble. Se intentó convertirlos al cristianismo, pero su
adoración arbórea había calado demasiado hondo y resultó difícil removerla. En
consecuencia los misioneros cristianos adoptaron su ya conocido procedimiento de
absorber la costumbre pagana en lugar de intentar prohibirla.
Cristianizaron la adoración del árbol reemplazando el roble por el abeto, porque el abeto
visto de costado tiene forma triangular, y se explicó a los germanos que las tres puntas
del triángulo representaban la Santa Trinidad. Los germanos, por agradar a la mayor
cantidad posible de dioses, aceptaron el cambio y así nació el moderno árbol de
Navidad.