La oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CM
Hoja de cantos del viernes santo
1. SAGRADA COMUNIÓN
Se traslada el Santísimo del Monumento al altar.
PADRE NUESTRO.
RITO DE LA PAZ.
COMUNIÓN.
Canto:
Cuando un niño con hambre pide pan, cuando
llora pues nunca se lo dan. Oh... tiemblo por ti,
Jesús, sufres, lloras, mueres. Con los niños de
hambre mueres tú.
Mueres tú cuando un hombre esclavo está,
cuando grita pidiendo libertad. Oh... tiemblo por 29 MARZO DE 2013
tí, Jesús, sufres, lloras, mueres. Con los VIERNES SANTO
hombres esclavos mueres tú.
Cuando siento que el mundo en guerra está, que
el hermano al hermano matará. Oh... tiemblo por
tí, Jesús, sufres, lloras, mueres. Con los RITOS INICIALES
hombres que mueren mueres tú. ENTRADA EN SILENCIO.
Cuando pasas enfermo junto a mí, cuando MONICIÓN
olvido tu hambre y tú sufrir. Oh... tiemblo por ti,
Jesús, sufres, lloras, mueres. Por mi absurdo SE ARRODILLA EL SACERDOTE Y TODA LA
egoísmo mueres tú. ASAMBLEA. MOMENTO DE SILENCIO.
Canto: ORACIÓN.
Cristo nos da la libertad, Cristo nos da la salvación,
Cristo nos da la esperanza, Cristo nos da el amor. Lectura del libro de Isaías. 52, 13-53, 12.
Cuando luche por la paz y la verdad, la encontraré; Mirad, mi siervo tendrá éxito, subirá y crecerá
cuando cargue con la cruz de los demás, me salvaré. mucho.
Dame, Señor, tu palabra; oye, Señor, mi oración. Como muchos se espantaron de él, porque
Cuando sepa perdonar de corazón, tendré perdón; cuando desfigurado no parecía hombre, ni tenía aspecto
siga los caminos del amor, veré al Señor. Dame, Señor, humano, así asombrará a muchos pueblos, ante él
tu palabra; oye, Señor, mi oración. los reyes cerrarán la boca, al ver algo inenarrable y
Cuando siembre la alegría y la amistad, vendrá el Amor; contemplar algo inaudito.
cuando viva en comunión con los demás, seré de Dios. ¿Quien creyó nuestro anuncio?, ¿a quién se reveló
Dame, Señor, tu palabra; oye, Señor, mi oración. el brazo del Señor?.
Creció en su presencia como brote, como raíz en
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN. tierra árida, sin figura, sin belleza.
En esta tarde Cristo del Calvario, Lo vimos sin aspecto atrayente, despreciado y
vine a rogarte por mi carne enferma; evitado de los hombres, como un hombre de
pero, al verte, mis ojos van y vienen dolores, acostumbrado a sufrimientos, ante el cual
de tu cuerpo a mi cuerpo con vergüenza. se ocultan los rostros, despreciado y desestimado.
Él soportó nuestros sufrimientos y aguantó nuestros
¿Cómo quejarme de mis pies cansados, dolores; nosotros lo estimamos leproso, herido de
cuando veo los tuyos destrozados? Dios y humillado; pero él fue traspasado por
¿Cómo mostrarte mis manos vacías, nuestras rebeliones, triturado por nuestros
cuando las tuyas están llenas de heridas? crímenes.
Nuestro castigo saludable cayó sobre él, sus
¿Cómo explicarte a tí, mi soledad, cicatrices nos curaron.
cuando en la cruz alzado y sólo estás? Todos errábamos como ovejas, cada uno siguiendo
¿Cómo explicarte que no tengo amor, su camino; y el Señor cargó sobre él todos nuestros
cuando tienes rasgado el corazón? crímenes.
Maltratado, voluntariamente se humillaba y no abría
Ahora ya no me acuerdo de nada, la boca; como cordero llevado al matadero, como
huyeron de mí todas mis dolencias. oveja ante el esquilador, enmudecía y no abría la
El ímpetu del ruego que traía, boca.
se me ahoga en la boca pedigüeña. Sin defensa, sin justicia, se lo llevaron, ¿quién
medito en su destino?
Y sólo pido no pedirte nada, Lo arrancaron de la tierra de los vivos, por los
estar aquí, junto a tu imagen muerta, pecados de mi pueblo lo hirieron.
ir aprendiendo que el dolor es sólo, Le dieron sepultura con los malvados, y una tumba
la llave santa de tu santa puerta. Amén. con los malhechores, aunque no había cometido
crímenes ni hubo engaño en su boca.
ORACIÓN. El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento, y
entregar su vida como expiación; verá su
ORACIÓN SOBRE EL PUEBLO. descendencia, prolongará sus años, lo que el Señor
Se sale en silencio. quiere prosperará por su mano.
2. Por los trabajos de su alma verá la luz, el justo se huerto, y entraron allí él y sus discípulos. Judas, el
saciará de conocimiento. Mi siervo justificará a traidor, conocía también el sitio, porque Jesús se
muchos, porque cargó con los crímenes de ellos. reunía a menudo allí con sus discípulos. Judas
Le daré una multitud como parte, y tendrá como entonces, tomando la patrulla y unos guardias de
despojo una muchedumbre. Porque expuso su vida los sumos sacerdotes y de los fariseos, entró allá
a la muerte y fue contado entre los pecadores, él con faroles, antorchas y armas. Jesús, sabiendo
tomó el pecado de muchos e intercedió por los todo lo que venía sobre él, se adelantó y les dijo:
pecadores. + —«¿A quién buscáis?»
PALABRA DE DIOS C. Le contestaron:
S. —«A Jesús, el Nazareno.»
SALMO RESPONSORIAL. Salmo 30. C. Les dijo Jesús:
R/. Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu. + —«Yo soy.»
C. Estaba también con ellos Judas, el traidor. Al
A tí, Señor, me acojo: no quede yo nunca decirles: «Yo soy», retrocedieron y cayeron a tierra.
defraudado; tú, que eres justo, ponme a salvo. A Les preguntó otra vez:
tus manos encomiendo mi espíritu: tú, el Dios leal, + —«¿A quién buscáis?»
me librarás. R/. C. Ellos dijeron:
S. —«A Jesús, el Nazareno.»
Soy la burla de todos mis enemigos, la irrisión de C. Jesús contestó:
mis vecinos, el espanto de mis conocidos; me ven + —«Os he dicho que soy yo. Si me buscáis a mí,
por la calle, y escapan de mí. Me han olvidado dejad marchar a éstos.»
como a un muerto, me han desechado como a un C. Y así se cumplió lo que había dicho: «No he
cacharro inútil. R/. perdido a ninguno de los que me diste.»
Entonces Simón Pedro, que llevaba una espada, la
Pero yo confío en tí, Señor, te digo: «Tú eres mi sacó e hirió al criado del sumo sacerdote,
Dios.» En tu mano están mis azares; líbrame de los cortándole la oreja derecha. Este criado se llamaba
enemigos que me persiguen. R/. Malco. Dijo entonces Jesús a Pedro:
+ —«Mete la espada en la vaina. El cáliz que me ha
Haz brillar tu rostro sobre tu siervo, sálvame por tu dado mi Padre, ¿no lo voy a beber?»
misericordia. Sed fuertes y valientes de corazón,
los que esperáis en el Señor. R/. Llevaron a Jesús primero a Anás
C. La patrulla, el tribuno y los guardias de los judíos
Lectura de la carta a los Hebreos. 4, 14-16; 5, 7-9. prendieron a Jesús, lo ataron y lo llevaron primero a
Anás, porque era suegro de Caifás, sumo sacerdote
Hermanos: Mantengamos la confesión de la fe, ya aquel año; era Caifás el que había dado a los judíos
que tenemos un sumo sacerdote grande, que ha este consejo: «Conviene que muera un solo hombre
atravesado el cielo, Jesús, Hijo de Dios. por el pueblo.»
No tenemos un sumo sacerdote incapaz de Simón Pedro y otro discípulo seguían a Jesús. Este
compadecerse de nuestras debilidades, sino que ha discípulo era conocido del sumo sacerdote y entró
sido probado en todo exactamente como nosotros, con Jesús en el palacio del sumo sacerdote,
menos en el pecado. Por eso, acerquémonos con mientras Pedro se quedó fuera a la puerta. Salió el
seguridad al trono de la gracia, para alcanzar otro discípulo, el conocido del sumo sacerdote,
misericordia y encontrar gracia que nos auxilie habló a la portera e hizo entrar a Pedro. La criada
oportunamente. que hacía de portera dijo entonces a Pedro:
S. —«¿No eres tú también de los discípulos de ese
Cristo, en los días de su vida mortal, a gritos y con hombre?»
lágrimas presentó oraciones y súplicas al que podía C. Él dijo:
salvarlo de la muerte, cuando en su angustia fue S. —«No lo soy.»
escuchado. Él, a pesar de ser Hijo, aprendió, C. Los criados y los guardias habían encendido un
sufriendo, a obedecer. Y, llevado a la consumación, brasero, porque hacía frío, y se calentaban.
se ha convertido para todos los que le obedecen en También Pedro estaba con ellos de pie,
autor de salvación eterna. calentándose.
PALABRA DE DIOS El sumo sacerdote interrogó a Jesús acerca de sus
discípulos y de la doctrina.
ANTES DE LA PASIÓN. Jesús le contestó:
+ —«Yo he hablado abiertamente al mundo; yo he
Cristo, por nosotros, se sometió incluso a la enseñado continuamente en la sinagoga y en el
muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo templo, donde se reúnen todos los judíos, y no he
levantó sobre todo y le concedió el «Nombre- dicho nada a escondidas. ¿Por qué me interrogas a
sobre-todo-nombre». mí? Interroga a los que me han oído, de qué les he
hablado. Ellos saben lo que he dicho yo.»
Pasión de nuestro Señor Jesucristo según san C. Apenas dijo esto, uno de los guardias que estaba
Juan 18, 1—19, 42 allí le dio una bofetada a Jesús, diciendo:
S. —«¿Así contestas al sumo sacerdote?»
Prendieron a Jesús y lo ataron
C. Jesús respondió:
C. En aquel tiempo, salió Jesús con sus discípulos + —«Si he faltado al hablar, muestra en qué he
al otro lado del torrente Cedrón, donde había un faltado; pero si he
3. hablado como se debe, ¿por qué me pegas?» C. El tal Barrabás era un bandido.
C. Entonces Anás lo envió atado a Caifás, sumo ¡Salve, rey de los judíos!!
sacerdote. C. Entonces Pilato tomó a Jesús y lo mandó azotar.
¿No eres tú también de sus discípulos? No lo soy Y los soldados trenzaron una corona de espinas, se
C. Simón Pedro estaba en pie, calentándose, y le la pusieron en la cabeza y le echaron por encima un
dijeron: manto color púrpura; y, acercándose a él, le decían:
S. —«¿No eres tú también de sus discípulos?» S. —«¡Salve, rey de los judíos!»
C. Él lo negó, diciendo: C. Y le daban bofetadas.
S. —«No lo soy.» Pilato salió otra vez afuera y les dijo:
C. Uno de los criados del sumo sacerdote, pariente S. —«Mirad, os lo saco afuera, para que sepáis que
de aquel a quien no encuentro en él ninguna culpa.»
Pedro le cortó la oreja, le dijo: C. Y salió Jesús afuera, llevando la corona de
S. —«¿No te he visto yo con él en el huerto?» espinas y el manto color púrpura. Pilato les dijo:
C. Pedro volvió a negar, y enseguida cantó un gallo. S. —«Aquí lo tenéis.»
C. Cuando lo vieron los sumos sacerdotes y los
Mi reino no es de este mundo guardias, gritaron: S. —«¡Crucifícalo, crucifícalo!»
C. Pilato les dijo:
C. Llevaron a Jesús de casa de Caifás al pretorio. S. —«Lleváoslo vosotros y crucificadlo, porque yo
Era el amanecer, no encuentro culpa en él.»
y ellos no entraron en el pretorio para no incurrir en C. Los judíos le contestaron:
impureza y poder S. —«Nosotros tenemos una ley, y según esa ley
así comer la Pascua. Salió Pilato afuera, adonde tiene que morir, porque se ha declarado Hijo de
estaban ellos, y dijo: Dios.»
S. —«¿Qué acusación presentáis contra este C. Cuando Pilato oyó estas palabras, se asusto aún
hombre?» más y, entrando otra vez en el pretorio, dijo a Jesús:
C. Le contestaron: S. —«¿De dónde eres tú?»
S. —«Si éste no fuera un malhechor, no te lo C. Pero Jesús no le dio respuesta.
entregaríamos.» Y Pilato le dijo:
C. Pilato les dijo: S. —«¿A mí no me hablas? ¿No sabes que tengo
S. —«Lleváoslo vosotros y juzgadlo según vuestra autoridad para soltarte y autoridad para
ley.» crucificarte?»
C. Los judíos le dijeron: C. Jesús le contestó:
S. —«No estamos autorizados para dar muerte a + —«No tendrías ninguna autoridad sobre mi, si no
nadie.» te la hubieran dado de lo alto. Por eso el que me ha
C. Y así se cumplió lo que había dicho Jesús, entregado a ti tiene un pecado mayor.»
indicando de qué muerte iba a morir.
Entró otra vez Pilato en el pretorio, llamó a Jesús y
Fuera, fuera; crucifícalo!
le dijo:
S. —«¿Eres tú el rey de los judíos?» C. Desde este momento Pilato trataba de soltarlo,
C. Jesús le contestó: pero los judíos gritaban:
+ —«¿Dices eso por tu cuenta o te lo han dicho S. —«Si sueltas a ése, no eres amigo del César.
otros de mí?» Todo el que se declara rey está contra el César.»
C. Pilato replicó: C. Pilato entonces, al oír estas palabras, sacó
S. —«¿Acaso soy yo judío? Tu gente y los sumos afuera a Jesús y lo sentó en el tribunal, en el sitio
sacerdotes te han que llaman «el Enlosado» (en hebreo Gábbata). Era
entregado a mi; ¿qué has hecho?» el día de la Preparación de la Pascua, hacia el
C. Jesús le contestó: mediodía.
+`—«Mi reino no es de este mundo. Si mi reino Y dijo Pilato a los judíos:
fuera de este mundo, mi guardia habría luchado S. —«Aquí tenéis a vuestro rey.»
para que no cayera en manos de los judíos. Pero mi C. Ellos gritaron:
reino no es de aquí.» S. —«¡Fuera, fuera; crucifícalo!»
C. Pilato le dijo: C. Pilato les dijo:
S. —«Conque, ¿tú eres rey?» S. —«¿A vuestro rey voy a crucificar?»
C. Jesús le contestó: C. Contestaron los sumos sacerdotes:
+ —«Tu lo dices: soy rey. Yo para esto he nacido y S. —«No tenemos más rey que al César.»
para esto he venido al mundo: para ser testigo de la C. Entonces se lo entregó para que lo crucificaran.
verdad. Todo el que es de la verdad escucha mi
voz.» Lo crucificaron, y con el a otros dos
C. Pilato le dijo:
S. —«Y, ¿qué es la verdad?» C. Tomaron a Jesús, y él, cargando con la cruz,
C. Dicho esto, salió otra vez adonde estaban los salió al sitio llamado «de la Calavera» (que en
judíos y les dijo: hebreo se dice Gólgota), donde lo crucificaron; y
S. —«Yo no encuentro en él ninguna culpa. Es con él a otros dos, uno a cada lado, y en medio,
costumbre entre vosotros que por Pascua ponga a Jesús. Y Pilato escribió un letrero y lo puso encima
uno en libertad. ¿Queréis que os suelte al rey de los de la cruz; en él estaba escrito: «Jesús, el
judíos?» Nazareno, el rey de los judíos.»
C. Volvieron a gritar:
S. —«A ése no, a Barrabás.»
4. Leyeron el letrero muchos judíos, porque estaba C. Después de esto, José de Arimatea, que era
cerca el lugar donde crucificaron a Jesús, y estaba discípulo clandestino de Jesús por miedo a los
escrito en hebreo, latín y griego. judíos, pidió a Pilato que le dejara llevarse el cuerpo
Entonces los sumos sacerdotes de los judíos dijeron de Jesús. Y Pilato lo autorizó. Él fue entonces y se
a Pilato: llevó el cuerpo. Llegó también Nicodemo, el que
S. —«No escribas "El rey de los judíos", sino: "Éste había ido a verlo de noche, y trajo unas cien libras
ha dicho: Soy el rey de los judíos."» de una mixtura de mirra y áloe.
C. Pilato les contestó: Tomaron el cuerpo de Jesús y lo vendaron todo, con
S. —«Lo escrito, escrito está.» los aromas, según se acostumbra a enterrar entre
los judíos. Había un huerto en el sitio donde lo
Se repartieron mis ropas crucificaron, y en el huerto un sepulcro nuevo donde
C. Los soldados, cuando crucificaron a Jesús, nadie había sido enterrado todavía. Y como para los
cogieron su ropa, haciendo cuatro partes, una para judíos era el día de la Preparación, y el sepulcro
cada soldado, y apartaron la túnica. Era una túnica estaba cerca, pusieron allí a Jesús. Lectura de la
sin costura, tejida toda de una pieza de arriba abajo. Pasión de nuestro Señor Jesucristo según San
Y se dijeron: Juan. 18, 1-19, 42.
S. —«No la rasguemos, sino echemos a suerte, a PALABRA DEL SEÑOR
ver a quién le toca.» ORACIÓN UNIVERSAL.
C. Así se cumplió la Escritura: «Se repartieron mis MONICIÓN
ropas y echaron a suerte mi túnica.» PAUSA EN SILENCIO
Esto hicieron los soldados. ORACIÓN DEL SACERDOTE.
Respondemos: AMEN.
Ahí tienes a tu hijo. Ahí tienes a tu madre (Se repite en toda las oraciones el mismo orden)
C. Junto a la cruz de Jesús estaban su madre, la
ADORACION DE LA CRUZ
hermana de su madre, Maria, la de Cleofás, y Maria, VIENE LA CRUZ EN PROCESIÓN DESDE EL
la Magdalena. Jesús, al ver a su madre y cerca al FONDO DE LA IGLESIA.
discípulo que tanto quería, dijo a su madre: EN TRES MOMENTOS, DESDE DISTINTOS
+ —«Mujer, ahí tienes a tu hijo.» PUNTOS DEL RECORRIDO, NOS SERÁ
C. Luego, dijo al discípulo: MOSTRADA EN ALTO.
+ —«Ahí tienes a tu madre.»
C. Y desde aquella hora, el discípulo la recibió en su Entonces el sacerdote canta:
casa. «Mirad el árbol de la Cruz donde estuvo clavada
Está cumplido la salvación del mundo.»
C. Después de esto, sabiendo Jesús que todo había Respondemos: «Venid a adorarlo»
llegado a su término, para que se cumpliera la
Escritura dijo: UNA VEZ COLOCADA ANTE EL PRESBITERIO,
+ —«Tengo sed.» PASAMOS A ADORAR LA CRUZ.
C. Había allí un jarro lleno de vinagre. Y, sujetando
una esponja empapada en vinagre a una caña de MIENTRAS LA ADORACION.
hisopo, se la acercaron a la boca. Jesús, cuando Canto:
tomó el vinagre, dijo: ¡Pueblo mío! ¿Qué te he hecho, en qué te he
+ —«Está cumplido.» ofendido? Respóndeme.
C. E, inclinando la cabeza, entregó el espíritu.
Te saqué de Egipto y por cuarenta años te guié en
Todos se arrodillan, y se hace una pausa. el desierto, tú hiciste una cruz para tu Salvador.
Y al punto salió sangre y agua Te libré del mar, te día a beber agua que manaba
de la roca, tú hiciste una cruz para tu Salvador.
C. Los judíos entonces, como era el día de la Te llevé a tu tierra, por ti vencí a los reyes de los
Preparación, para que no se quedaran los cuerpos pueblos cananeos, tú hiciste una cruz para tu
en la cruz el sábado, porque aquel sábado era un Salvador.
día solemne, pidieron a Pilato que les quebraran las Te hice poderoso, estando a tu lado, derroté a
piernas y que los quitaran. Fueron los soldados, le tus enemigos, tú hiciste una cruz para tu
quebraron las piernas al primero y luego al otro que Salvador.
habían crucificado con él; pero al llegar a Jesús,
viendo que ya había muerto, no le quebraron las Canto:
piernas, sino que uno de los soldados, con la lanza, ¡Victoria! ¡Tú reinarás! ¡Oh cruz! ¡Tú nos
le traspasó el costado, y al punto salió sangre y salvarás!
agua. El que lo vio da testimonio, y su testimonio es
verdadero, y él sabe que dice verdad, para que El Verbo en ti clavado, muriendo, nos rescató. De ti,
también vosotros creáis. Esto ocurrió para que se madero santo, nos viene la redención.
cumpliera la Escritura: «No le quebrarán un hueso»;
y en otro lugar la Escritura dice: «Mirarán al que Extiende por el mundo, tu Reino de salvación. Oh
atravesaron.» Cruz, fecunda fuente, de vida y bendición.
Vendaron todo el cuerpo de Jesús, con los aromas La gloria por los siglos, a Cristo, libertador. Su cruz
nos lleve al cielo, la tierra de promisión.