Domingo vº de cuaresma. ciclo c. día 17 de marzo del 2013
1. DOMINGO V DE CUARESMA. Ciclo C
17 de marzo de 2013
2. MONICIÓN DE ENTRADA
Si perdemos el sentido del perdón, nos
convertiremos en inmisericordes.
Necesitamos la experiencia de ser
perdonados para poder construir una
convivencia fraterna y reconciliada.
Hoy, a la luz de la Palabra, es una buena
ocasión para preguntarnos por los gestos de
vida que cuidamos y que ponemos en
marcha. Quizá no haya apuesta por la vida
tan grande como ir dando misericordia. El
3. ejemplo nos lo da Jesús en el Evangelio de
hoy, perdonando y salvando a la pecadora
de morir apedreada.
4. CANTO DE ENTRADA.
Hacia ti, morada santa, hacia ti,
tierra del Salvador, peregrinos,
caminantes, vamos hacia ti.
Venimos a tu mesa, sellaremos tu
pacto, comeremos tu carne, tu sangre
nos limpiará. Reinaremos contigo en
tu morada santa, beberemos tu
sangre, tu fe nos guiará.
5.
6. Lectura del libro de Isaías 43, 16-21
Así dice el Señor, que abrió camino en el
mar y senda en las aguas impetuosas; que
sacó a batalla carros y caballos, tropa con
sus valientes; caían para no levantarse, se
apagaron como mecha que se extingue «No
recordéis lo de antaño, no penséis en lo
antiguo; mirad que realizo algo nuevo; ya
está brotando, ¿no lo notáis? Abriré un
camino por el desierto, nos en el yermo. Me
glorificarán las bestias del campo, chacales y
7. avestruces, porque ofreceré agua en el
desierto, ríos en el yermo, para apagar la
sed de mi pueblo, de mi escogido, el pueblo
que yo formé, para que proclamara mi
alabanza.»
Palabra de Dios.
8. El Señor ha hecho grandes cosas por
nosotros y estamos alegres.
Cuando el Señor cambió la suerte de
Sión, nos parecía un sueño.
La boca se nos llenaba de risas,
la lengua de canciones.
9. El Señor ha hecho cosas grandes por nosotros
y estamos alegres.
Los paganos decían: “El Señor ha hecho
grandes cosas por ellos”.
El Señor ha hecho cosas grandes por
nosotros y estamos alegres.
10. El Señor ha hecho cosas grandes por nosotros
y estamos alegres.
¡Cambia, Señor, nuestra suerte
como cambian los torrentes del
Negueb!.
Los que sembraban con lágrimas,
cosechan entre canciones.
11. El Señor ha hecho cosas grandes por nosotros
y estamos alegres.
Aunque iban llorando al llevar la
semilla,vuelven contentos, trayendo
las gavillas.
12. Lectura de la carta del apóstol san Pablo a
los Filipenses 3, 8-14
Hermanos: Todo lo estimo pérdida
comparado con la excelencia del
conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor.
Por él lo perdí todo, y todo lo estimo basura
con tal de ganar a Cristo y existir en él, no
con una justicia mía, la de la Ley, sino con la
que viene de la fe de Cristo, la justicia que
viene de Dios y se apoya en la fe. Para
conocerlo a él, y la fuerza de su
resurrección, y la comunión con sus
13. padecimientos, muriendo su misma muerte,
para llegar un día a la resurrección de entre
los muertos. No es que ya haya conseguido
el premio, o que ya esté en la meta: yo sigo
corriendo a ver si lo obtengo, pues Cristo
Jesús lo obtuvo para mi. Hermanos, yo no
pienso haber conseguido el premio. Sólo
busco una cosa: olvidándome de lo que queda
atrás y lanzándome hacia lo que está delante,
corro hacia la meta, para ganar el premio al
que Dios, desde arriba, llama en Cristo Jesús.
Palabra de Dios.
15. + Lectura del santo evangelio según san Juan
8, 1-11
En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de
los Olivos. Al amanecer se presentó de
nuevo en el templo, y todo el pueblo acudía
a él, y, sentándose, les enseñaba. Los
escribas y los fariseos le traen una mujer
sorprendida en adulterio, y, colocándola en
medio, le dijeron: "Maestro, esta mujer ha
sido sorprendida en flagrante adulterio. La
ley de Moisés nos manda apedrear a las
16. adúlteras; tú, ¿qué dices?" Le preguntaban
esto para comprometerlo y poder acusarlo.
Pero Jesús, inclinándose, escribía con el
dedo en el suelo. Como insistían en
preguntarle, se incorporó y les dijo: "El que
no tiene pecado, que le tire la primera
piedra." E inclinándose otra vez, siguió
escribiendo. Ellos, al oírlo, se fueron
escabullendo uno a uno, empezando por los
más viejos. Y quedó solo Jesús, con la-
mujer, en medio, que seguía allí delante.
Jesús se incorporó y le preguntó: "Mujer,
17. ¿dónde están tus acusadores?; ¿ninguno te
ha condenado?" Ella contestó: "Ninguno,
Señor." Jesús dijo: "Tampoco yo te condeno.
Anda, y en adelante no peques más."
Palabra del Señor.
18.
19. ORACIÓN DE LOS FIELES
Al Dios del Perdón y de la Misericordia, al
Dios de la Gracia y de la Vida, le dirigimos
confiados nuestras súplicas.
−Para que la Iglesia sea siempre signo de
reconciliación, de acogida, de perdón.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
−Para que la Iglesia “perdone más que
condene, libere más que imponga, sea más
madre que juez”.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
20. − Para que los cristianos seamos siempre
solidariamente fraternos con todas las
personas, sin excluir a nadie.
− ROGUEMOS AL SEÑOR.
− Para que nuestra parroquia sea, de verdad,
una parroquia solidaria, donde todos nos
sintamos y seamos solidarios. ROGUEMOS
AL SEÑOR.
Oremos: Ten compasión, Señor, de nuestras
debilidades y haznos compasivos y
solidarios con nuestros hermanos.
21. Yo no soy nada y del polvo nací, pero Tú me
amas y moriste por mí. Ante la cruz sólo
puedo exclamar: Tuyo soy, tuyo soy.
Toma, mi mano, te pido, toma, mis
labios te amo, toma mi vida ¡oh
Padre!, tuyo soy, tuyo soy.
Cuando de rodillas te miro, oh Jesús, veo tu
grandeza y mi pequeñez. ¿Qué puedo darte
yo? Sólo mi ser. Tuyo soy, tuyo soy.
23. CANTO DE COMUNION
Cerca de Ti, Señor, yo quiero estar;
tu grande eterno amor quiero gozar.
Llena mi pobre ser, limpia mi corazón,
hazme tu rostro ver, en la aflicción.
Mi pobre corazón inquieto está, por
esta vida voy buscando paz. Más sólo
tú, Señor, la paz me puedes dar;
cerca de Ti, Señor, yo quiero estar.
24. Pasos inciertos doy, el sol se va, más
si contigo estoy, no temo ya. Himnos
de gratitud, alegre cantaré y fiel a
Ti, Señor, siempre seré.
Día feliz veré, creyendo en Ti, en que
yo habitaré, cerca de Ti. Mi voz
alabará, tu santo nombre allí y mi
alma gozará, cerca de Ti.
Más cerca, oh Dios de Ti; más cerca
sí, cuando la cruz, Señor, me lleve a
Ti. Si tiende al sol la flor, si el agua
busca el mar, a Ti, mi sólo bien, he
25. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN.
Te damos gracias, Señor,
porque has depuesto la ira
y has detenido ante el pueblo
la mano que lo castiga.
Tú eres el Dios que nos salva,
la luz que nos ilumina,
la mano que nos sostiene
y el techo que nos cobija.
26. Y sacaremos con gozo,
del manantial de la Vida,
las aguas que dan al hombre
la fuerza que resucita.
Entonces proclamaremos:
“¡Cantadle con alegría!
¡El nombre de Dios es grande;
su caridad, infinita!
27. ¡Que alabe al Señor la tierra!
Contadle sus maravillas.
¡Qué grande, en medio del pueblo,
el Dios que nos justifica!” Amén.
28. BENDICIÓN Y DESPEDIDA.
Dios es fiel: guarda siempre su
Alianza;
libra al pueblo de toda esclavitud.
Su Palabra resuena en los profetas,
reclamando el bien y la virtud.