El documento describe cómo las nuevas tecnologías de información y comunicación (TIC) han influido en los procesos de enseñanza y aprendizaje. Explica que las TIC permiten la manipulación, almacenamiento, administración y transmisión de información. También enumera algunas herramientas TIC comúnmente usadas en la educación como PowerPoint, correo electrónico y buscadores de Internet. Finalmente, discute algunos desafíos relacionados con el uso de las TIC, como la necesidad de acceso a la tecnología

1. Magíster en Educación y Docencia Universitaria.
Módulo IV: Nuevas TICs para la Educación.
Autoras:
Anaís Aluicio González
Patricia Santana Mancilla
DOCENTE: Guillermo Arancibia
PROFESOR AYUDANTE: Freddy Chávez

3. Los cambios producidos desde el siglo XX y hasta la actualidad, han traído consigo
repercusiones en tecnología, mercado laboral y en el conocimiento. Así como
transformaciones sociales, económicas, políticas y culturales, influyendo directamente en los
procesos de enseñanza y aprendizaje. De esta forma, los sistemas educacionales se han visto
impelidos a transformar el modelo educativo, implementando modificaciones a través de los
currículos, a los cuales se les incorporan modalidades pedagógicas asociadas al
multiculturalismo y que dan más libertad de formación, como las modalidades no
presenciales; por otra parte, han habido cambios que permiten el acceso a las instalaciones y
otras formas de aprendizaje focalizadas en el desarrollo tecnológico.
Esta evolución basada en la construcción de conocimiento con tecnología de información y
de la comunicación (TIC), y su utilización en el proceso de enseñanza‐aprendizaje, nos lleva a
plantearnos la siguiente interrogante: ¿qué se entiende por Tecnología de información y
Comunicación (TIC), hoy? Las TIC conforman el conjunto de elementos y técnicas necesarias
utilizadas en el tratamiento, transmisión y ordenación de información. Principalmente en
informática, Internet y telecomunicaciones. Las TIC permiten la manipulación de la
información, y la ordenan mediante programas informáticos y redes necesarias para
convertirla, almacenarla, administrarla y transmitirla.
Es así como han surgido un número no menor de herramientas tecnológicas que se usan (o
se pueden usar) en el ejercicio de la docencia. Los recursos más usados son, en el caso de
nuestra realidad (USS), las presentaciones en Power Point, para el desarrollo de las clases o
cuando les pedimos presentaciones o disertaciones a los alumnos; Mi Portal, que es la
plataforma a la que subimos las notas y gestionamos nuestros cursos, en la cual además
tenemos acceso a nuestro horario y a datos de los alumnos, que nos permiten tener más
información con ellos y tener una comunicación más directa y eficiente; el correo electrónico,
que en muchos casos es usado no sólo para la comunicación al respecto de notas o temas de
planificación, sino para el envío de materiales de lectura, pautas de trabajos, o incluso para la
entrega de tareas evaluadas; un procesador de textos, que sueles se Microsoft Word, cuando
preparamos pautas, planificamos o pedimos trabajos escritos, etc.; y los diferentes
buscadores disponibles en la red, como Google, que es el más usado, (Académico, Libros,
etc.), Yahoo, Altavista, etc.
Adicionalmente, esporádicamente usamos, según nuestras profesiones, el SPSS, que es un
útil programa estadístico que permite el procesamiento de información de ese tipo; los
artículos indexados, para hacer investigaciones sobre todo; el Excel, cuando queremos
procesar las notas de los estudiantes; algunos videos que pueden ser usados como
complementos en ciertos temas abordados en clases, o libros online, que resultan útiles
cuando las bibliotecas accesibles son poco heterogéneas o cuando queremos acceder a
información publicada fuera de Chile.
Ahora bien, al respecto de otras herramientas, existe debate al respecto de la pertinencia de
su uso, y los temas éticos o profesionales que pudieran estar involucrados en el mismo. Este

4. es el caso de Facebook, el celular y el chat (como Messenger). Muchos docentes no se
arriesgan a compartir datos personales con sus alumnos, por temor a “desperfilarse”, o
prefieren no tener una comunicación tan privada con sus estudiantes, pensando en que
pudieran abordarse temas fuera de lo profesional, o porque los alumnos pudieran tratar de
contactarlos por temas inapropiados o fuera de los horarios adecuados. Al respecto,
pensamos que se pudieran manejar los límites y aprovechar estas herramientas. Una de
nosotras, tiene experiencia en el manejo de comunicación con estudiantes y ex‐estudiantes a
través de Facebook, y con un adecuado manejo de las opciones de privacidad, ha sido una
herramienta útil para apoyarlos en sus deberes académicos y en su formación.
Hay otras herramientas que son de poco uso, quizás por haber poca familiaridad con las
mismas, pero que pueden ser una fuente de información relevante para posteriores cursos,
como insumo para investigaciones relacionadas con educación, y como facilitadoras de la
interacción profesor‐alumno o alumno‐alumno; este es el caso de los blog y los foros.
Ahora bien, el uso de estas herramientas, y los cambios que mencionábamos al inicio de este
escrito, han traído consigo determinadas implicaciones. Por un lado, tenemos nuevas
herramientas que nos permiten una comunicación expedita, un acceso muy amplio a la
información y un acceso a fuentes muy variadas, que hace unos años era impensado, ya que
en muchas carreras se tomaban como referencia sólo uno o dos autores para desarrollar
ciertas temáticas. Pero a la vez, han revelado nuevas necesidades, como el acceso a nuevas
tecnologías, específicamente a los aparatos que posibilitan el uso de ésta, y que al no
tenerlo, se acentúan las diferencias socio‐económicas entre los usuarios, (los estudiantes, en
este caso). También se requiere entrenamiento en el manejo de estos artefactos, que por su
complejidad en muchos casos no permiten un rápido y fácil manejo. Y por último, se han
hecho necesarias nuevas competencias para desarrollarse adecuadamente en la sociedad del
conocimiento: la capacidad de seleccionar información, o sea, para distinguir lo fundamental
de lo accesorio, o lo confiable de lo no confiable, ha resultado vital en la construcción de
conocimiento, sobre todo en ambientes en los que se vive inmerso en un océano de
información, muchas veces poc0o organizada o incluso manipulada con fines lucrativos.
Al analizar lo que significan las TIC, pensamos de que manera pueden estar afectando
positiva o negativamente la formación de ciudadanía contemporánea… el uso de las
tecnologías de información y comunicación entre la comunidad, ayuda a disminuir la brecha
digital existente en dicha localidad, ya que aumenta el conglomerado de personas que
utilizan las TICs como medio tecnológico para el desarrollo de sus actividades y por ende se
reduce el conjunto de personas que no las utilizan. También es un beneficio en la agricultura
de precisión y la gestión del bosque, la monitorización global del medio ambiente, comercio,
telemedicina, la bolsa, usos militares, etc. A nadie le sorprende estar informado minuto a
minuto, comunicarse con gente del otro lado del planeta, ver el video de una canción o
trabajar en equipo sin estar en un mismo sitio. Con una rapidez impensada las TICs tienden a
tomar un lugar creciente en la vida humana y el funcionamiento de las sociedades.