Código Civil de la República Bolivariana de Venezuela
Corredor Mediterráneo
1. Río Cuarto . Río Tercero . San Francisco . Villa María
LAISLADELTESORO
LARGAVIDA
ALSUJETO
POR FRANCISCO M. HOYOS
PÁG. 8
POESÍA ANTIPOESÍA
POESÍA, ANTIPOESÍA
Y NICANOR PARRA
POR ISABEL REZMO
PÁG. 4-5
Miércoles 09 de septiembre de 2020 . Año 20 Nº 920
Las ondas gravitacionales existen. Gracias a los grandes avances tecnológicos, los científicos siguen encontrando
pruebas que confirman formulaciones de la Teoría General de la Relatividad, enunciada por el físico alemán hace
poco más de un siglo.
PÁG. 2 y 3
PERTURBACIONES
DEESPACIOYTIEMPO
QUEEINSTEINPREDIJO
EL PANTANILLO
DE ERNESTO SÁBATO
de Pedro Jorge Solans
Por Aldo Parfeniuk
PÁG. 7
HISTORIAS DEL CONSER
LOS NIÑOS
CANTORES DEVIENA
EN RÍO CUARTO
POR ANTONIO M. ÁLVAREZ
PÁG. 6
LA COLUMNA
2. El Corredor Mediterráneo / Página 2
PERTURBACIONES
DEESPACIOYTIEMPO
QUEEINSTEINPREDIJO
Por Redacción ECM-AT
En 1916, Albert Einstein, de acuerdo
con suTeoría General de la Relatividad,
afirmó que los cuerpos siderales po-
dían, en determinadas circunstancias,
liberar parte de su masa en forma de
energía a través de lo que llamó “ondas
gravitacionales”. A principios del siglo
XX, estas ondas difícilmente podían
ser detectadas debido a que eran casi
imperceptibles tras las soberbias dis-
tancias que recorrían desde su punto
de origen. Sin embargo, en 1978, los
astrofísicos estadounidenses Joseph
Hooton Taylor Jr. y Russell Alan Hulse
descubrieron un tipo de púlsar bina-
rio (1) [dos estrellas orbitando juntas,
una de ellas un púlsar] y observaron
alteraciones en su período orbital que
confirmaba lo predicho por Einstein,
en el sentido de que las variaciones en
el movimiento se debían a la emisión
de ondas gravitacionales. La importan-
cia que esta constatación significó para
el estudio de la gravitación les valió a
ambos el premio Nobel de Física de
1993. Diez años más tarde, se con-
firmó que también una pareja de púl-
sares producían el mismo fenómeno.
Casi cuarenta años después del primer
descubrimiento, el 11 de febrero de
2016, varios científicos, entre ellos Kip
S. Thorne, hicieron público que el 14
de septiembre del año anterior habían
detectado directamente las distorsiones
del espacio-tiempo que, según Eins-
tein, producían las ondas gravitatorias.
De este modo se abría una nueva era
en la Astrofísica, para “ver y escuchar”
el universo.
La observación de estos fenómenos es
de gran importancia para el conoci-
miento del universo y de la vida en el
cosmos. Cuando las estrellas más gran-
des que el Sol agotan su combustible
generan novas o supernovas . Las estre-
llas se desintegran y, mientras su masa
interior de desmorona sobre sí misma y
los protones y los electrones se aplas-
tan unos contra otros convirtiéndose en
neutrones y sus capas externas salen
despedidas esparciendo por el cosmos
elementos químicos esenciales para la
vida, se convierten en una esfera de
pocos kilómetros, pero con una masa
superior a la del Sol. Parte de esta masa
se libera en forma de energía, la cual
conforma las ondas gravitacionales que
no habían podido ser detectadas debi-
do a la lejanía –millones de años luz
del Sistema Solar- en que tales colisio-
nes o fusiones se producían. Sin embar-
go, la detección de una gran colisión
estelar en 2016 confirmó directamente
la teoría de Einstein, quien, cien años
antes afirmó que este tipo de fenóme-
nos –colisiones o explosiones estelares
v de supernovas (2), estrellas de neu-
trones o fusión de agujeros negros su-
permasivos- generaban ondas gravita-
cionales que en su recorrido producían
vibraciones en el espacio-tiempo. Kip
S. Thorne, uno de los mayores expertos
en ondas gravitatorias y cuyas ideas ins-
piraron la película Interstellar (3), afir-
ma que en las proximidades de la coli-
sión se producen “tormentas salvajes”,
cuyas ondas expansivas de energía de-
forman el espacio y aceleran y desace-
leran el tiempo, lo que significa que, a
su paso, pueden alterar las distancias
entre planetas. Asimismo, las frecuen-
cias de algunas ondas gravitatorias, que
teóricamente viajan a la velocidad de
la luz y se mueven como las olas de
un estanque, también coinciden con
las frecuencias del sonido dando lugar
a que puedan escucharse en forma de
suaves pitidos estelares.
Hasta ahora, a pesar de los grandes
avances científicos y tecnológicos, el
porcentaje que se conoce del universo
debido al uso de las diferentes longitu-
des de ondas magnéticas - visible, rayos
X o gamma, radio -, es relativamente
ínfimo, pero las ondas gravitacionales
abren una nueva y extraordinaria posi-
bilidad para saber que está sucediendo
donde antes era imposible, como, por
ejemplo, en el interior de un agujero
negro. De acuerdo con la intensidad y
la frecuencia de las ondas gravitaciona-
les, los astrofísicos ahora están en con-
diciones de saber si fueron originadas
por una estrella o un agujero negro, las
características de éstos y el comporta-
miento e incidencia de las violentas
tormentas en el espacio-tiempo. Las
vibraciones o perturbaciones en él pre-
dichas por Albert Einstein.
La detección por primera vez de las on-
das gravitatorias generadas por la fusión
de dos agujeros negros, en 2015, se de-
bió al proyecto LIGO (Interferometría
Láser de Ondas Gravitacionales), cuyos
principales impulsores, los físicos Kip
Sephen Thorne, Rainer Weiss y Barry
Barish fueron galardonados por este
descubrimiento con el Premio Nobel
de Física del año siguiente.
LIGO es un muy complejo instrumen-
to óptico de precisión desarrollado por
los institutos tecnológicos de California
y Massachusetts –Caltech y MIT- y la
Colaboración Científica LIGO, la cual
agrupa alrededor de tres mil científicos
de quince país y más de setenta obser-
vatorios astronómicos terrestres y espa-
ciales.
La instalación cuenta con dos detec-
tores láser en forma de L, situados en
EE.UU., en los estados de Luisiana (Li-
vingston) y Washington (Hanford), a
unos 3.000 km uno de otro. LIGO co-
menzó a funcionar en 2002, pero fue
en 2015 cuando una nueva versión lo-
gró multiplicar por diez la sensibilidad
de los brazos láser y aumentar propor-
cionalmente la distancia de captación
de las ondas gravitatorias. Las nuevas
mejoras introducidas desde entonces
permiten que en la actualidad puedan
establecerse las diferencias en la longi-
tud de los brazos láser equivalentes a
una diezmilésima parte del diámetro
de un átomo. Una precisión jamás lo-
grada hasta ahora por un instrumento
científico.
La sensibilidad actual de LIGO, que
puede alcanzar una distancia de mil
millones de años luz de la Tierra, ha
permitido detectar hasta ahora cuatro
fusiones de agujeros negros binarios
y escuchar las ondas gravitatorias que
producen las fusiones de estrellas de
neutrones de galaxias situadas a 130 y
a 500 millones de años luz respectiva-
mente. El físico teórico Barry Barish de-
claró que la observación de las ondas
gravitacionales a través de LIGO “re-
presenta el nacimiento de la astrofísica
de múltiples mensajeros”. Asimismo,
David Shoemaker, portavoz de la Co-
ASTROFÍSICA
3. El Corredor Mediterráneo / Página 3
laboración Científica LIGO, en conso-
nancia con las palabras de Barry Barish,
afirmó que “el hecho de tener un nue-
vo mensajero para llevar información
cambia mucho lo que podemos conse-
guir. Es mucho más que tener muchos
telescopios, ahora tenemos otro tipo de
información”. Por su parte Barish aña-
dió que “gracias a esto se han hecho
muchos y diferentes descubrimientos,
como establecer el origen de los es-
tallidos de rayos gamma, nuevas e in-
dependientes medidas de la constante
de Hubble (4) o estudiar las estrellas
de neutrones con solo los datos de las
ondas gravitacionales.” Redundado en
las optimistas declaraciones del Premio
Nobel, en poco tiempo los científicos
se han centrado en el estudio del com-
portamiento de la materia, la genera-
ción de átomos pesados en el espacio y
la tasa de expansión del universo.
Precisamente uno de los más impor-
tantes fenómenos observados desde la
detección de las ondas gravitacionales
se produjo el 17 de agosto de 2017. Ese
día, los detectores de Livingston y Han-
ford captaron una señal de ondas gra-
vitatorias procedentes de una galaxia
situada a 130 millones de años luz de
la Tierra y cuya localización se pudo
precisar en un punto de la constelación
de la Hydra, gracias a la colaboración
a Virgo, el instrumento europeo similar
a LIGO. Pocos segundos después de la
detección, el telescopio espacial Fermi
captó el estallido de rayos gamma y
lanzó una alerta a todos los observato-
rios del planeta. Mientras tanto, las on-
das gravitacionales permitían estimar la
distancia de la fuente, la masa aproxi-
mada y acotar su zona de localización.
Según el relato de Shoemaker, a dife-
rencia de lo observado anteriormente
con agujeros negros, cuyas ondas ape-
nas duraban dos segundos, en esta oca-
sión fue de cien segundos y parecían
provenir de una masa equivalente a 1,1
o 1,6 soles, lo que indicó a los cien-
tíficos que podía tratarse de un par de
estrellas de neutrones. Éstas son objetos
extraordinariamente densos equipara-
bles a inmensos núcleos atómicos sólo
compuestos de neutrones. En este caso,
informa el portavoz de LIGO, “las es-
trellas tenían un diámetro de cerca de
20 km y una masa equivalente a 1,1 o
1,6 soles, lo que significa que una cu-
charilla de té con material de una de las
estrellas pesaría mil millones de tonela-
das, tal su extraordinaria densidad”.
LIGO, Virgo y un buen número de ob-
servatorios astronómicos rastrearon en
poco tiempo unas cincuenta galaxias
buscando un punto luminoso hasta
que, no sin fortuna, dieron con él y
comprobaron que al producirse la fu-
sión se originó una emisión de rayos
gamma, que permitieron comprobar
una vez más los cálculos predictivos de
la Teoría de la Relatividad y confirmar
que esta era la fuente de los estallidos
de rayos gamma de corta duración. Pos-
teriormente el estallido estelar siguió
emitiendo sucesivamente rayos X, ul-
travioletas, luz visible, rayos infrarrojos
y, finalmente, ondas de radio, cada uno
de los cuales daba distinta información
sobre el fenómeno. Era la primera vez
que los científicos observaban una ki-
lonova (5) .También se pudieron ver las
consecuencias de la expulsión de ma-
terial estelar a soberbias velocidades y
la liberación de radiación electromag-
nética, además del funcionamiento del
“proceso-r” (6), que explica el origen
de metales como el platino y el oro.
Poco tiempo después, el 25 de abril de
2019, los láseres de LIGO detectaron
un fenómeno similar a 500 millones de
años luz, es decir cuando empezaban a
darse los primeros signos de vida en la
Tierra. En esta ocasión se trataba de la
fusión de dos estrellas de neutrones con
una masa aproximada de 1,5 y 1,7 la
del Sol, que formaban un púlsar bina-
rio y que, tras la fusión, probablemente
originaron un agujero negro con tanta
masa y densidad que nada próximo
puede escapar a su fuerza de gravedad,
ni siquiera la luz. Los resultados de la
observación han sido publicados en la
revista “Astrophysical Journal Letters”.
Pero, más allá de los círculos científi-
cos, la pregunta que se hace la gente
es ¿qué son las ondas gravitacionales?
Para dar una respuesta es necesario sa-
ber que la materia de la que está hecho
el universo es el espacio-tiempo. Éste,
según la Teoría General de la Relativi-
dad es un modelo matemático formu-
lado en 1905 por Albert Einstein en su
Teoría Especial de la Relatividad que
reúne dos conceptos –espacio y tiem-
po- como un continuo cuatridimen-
sional – tres dimensiones espaciales
[ancho, altura y profundidad] y una
espacial- necesario para situar los su-
cesos físicos del universo. De acuerdo
con esta noción, que supuso uno de los
mayores avances de la Física en el siglo
XX, tanto el tiempo como el espacio
dependen del estado de movimiento
del o de los observadores, de aquí que
las mediciones que se hagan del tiem-
po resultan de las distintas velocidades
relativas de tales observadores y de la
influencia que ejerza en ellos la densi-
dad de un posible campo gravitatorio o
campo de fuerzas de la gravedad que
ejerce la masa de un cuerpo, como lo
es un planeta o una estrella.
Como explicó Stuart Shapiro, físico
miembro de LIGO en la Universidad
de Illinois a la cadena ABC, los resul-
tados obtenidos a partir de la detec-
ción directa de las ondas gravitatorias
son “el santo Grial de la Astrofísica de
múltiples mensajeros”, no sólo porque
permitirán “observar la fusión de agu-
jeros negros supermasivos, más fusio-
nes de estrellas de neutrones y la unión
de enanas blancas” y otros fenómenos
estrechamente relacionados “con la es-
tructura y la evolución de las galaxias y
toda la cosmología” sino también por-
que “todo esto podría resolver algunas
grandes preguntas relacionadas con la
materia y la energía oscuras”. Por su
parte, David Shoemaker, en consonan-
cia con su colega, sugiere que en pocas
décadas, la sensibilidad de los científi-
cos y los nuevos observatorios “podrán
captar las ondas gravitacionales de fon-
do dejadas por el Big Bang.
Kip Thorne, quien también obtuvo en
2017 el Premio Princesa de Asturias
por sus aportaciones sobre las ondas
gravitatorias calculadas por Albert Eins-
tein, afirma que a partir de ahora la
Astrofísica del siglo XXI se orientará a
cuestiones cruciales que siguen siendo
un misterio para los científicos, como
los agujeros negros y el “lado oscuro
del universo”, la observación del naci-
miento del universo a partir de la detec-
ción de restos de ondas gravitatorias o
de las distorsiones del espacio-tiempo e
incluso los viajes en el tiempo a través
de los agujeros de gusano.
1. Pulsar ,”pulsating star”, es una estrella de
neutrones que emite radiación muy intensa en
períodos regulares.
2 . Nova o supernova. Explosión estelar de gran
potencia, que incluso puede verse a simple vis-
ta, motivo por el que se las llama “stella novae”
o “novae”.
3. Interstellar, película de 2014, de Christopher
Nolan, según la cual se puede viajar en el tiem-
po a través de un agujero de gusano, especie de
atajo a través del tiempo y el espacio. También
se le llama puente Einstein-Rosen.
4. La constante de Hubble es el valor que mide
el ritmo con el que la velocidad de expansión
del universo varía con la distancia.
5. Kilonova. Señal electromagnética que se
produce durante la fusión de dos estrellas de
neutrones causada por la emisión de elemen-
tos atómicos pesados que están en el origen de
los etales preciosos –oro, platino, plata, etc.- y
elementos como el uranio. Ver ECM 893, del 4
de marzo de 2020 “¿Es el universo una mina de
metales preciosos?”.
6. Proceso-r. Captura de neutrones rápidos res-
ponsables de la generación de elementos quí-
micos más pesados que el hierro.
La comprobación de la existencia de las ondas gravitacionales, que se pro-
ducen por la fusión de dos estrellas de alta densidad, abre una nueva era
para la Astrofísica y la posibilidad de conocer nuevos secretos del cosmos.
4. El Corredor Mediterráneo / Página 4
“La poesía morirá si no se la ofen-
de, hay que poseerla y humillarla en
público. Después se verá lo que se
hace”.
Nicanor Parra, “Artefactos”
Se tiene la idea de que antipoesía
significa la negación del poema,
es decir, que un “antipoema” está
determinado a no vincularse con
lo poético. El antipoema debe ser
comprendido desde un punto de
vista psicológico y social, tomando
en cuenta el espacio donde el lec-
tor está, para así encontrar su “ideal
poético”. O en otras palabras, el
“ideal poético” del antipoema está
en la relación del presente, del mo-
mento y sus circunstancias, con
una tradición y un rechazo de la
tradición.
Es en 1954 cuando el poeta chileno
Nicanor Parra publica su libro Poe-
mas y Antipoemas. La antipoesía
está ubicada dentro de las corrien-
tes literarias de post-vanguardia (re-
cordemos que la vanguardia estaba
representada por escritores como
Baudelaire, Rimbaud, Bretón, Hui-
dobro, etc.).
La antipoesía es una poesía que
expresa las vivencias del hombre
masa, o el hombre de la clase me-
dia en un sistema capitalista. En la
época en que surge, se hablaba de
antinovela, antipintura. La antipoe-
sía es un movimiento que persigue
quitarle el carácter serio, solemne,
grave, a la poesía que se venía es-
cribiendo. Algunos han señalado
que surge como una corriente an-
ti-nerudiana. El objetivo que per-
sigue la antipoesía es desacralizar
la realidad, es decir, quitarle lo se-
rio, lo sagrado que tienen las ideas,
las acciones y los modos de vida.
Para conseguir esta desacralización
busca un lenguaje apropiado y lo
consigue a través de frases hechas,
como “tono de lección magistral”,
“tono de conferencia”, “como in-
forme científico o académico”,
“modo de reportaje”, “forma de re-
lato periodístico”, “como noticia”,
“como aviso comercial”, “en forma
de advertencia”, etc.
Todos estos recursos sin utilizados
en un contexto nuevo y eso es lo
que hace que el antipoema produz-
ca impacto, desconcierto. El len-
guaje del antipoema busca destruir
el lenguaje exquisito en que había
caído la poesía. Ese lenguaje es
reemplazado por un lenguaje de la
calle, cotidiano, burlesco, irónico.
Es la representación del hombre de
la plaza que camina y contempla
a su alrededor la devastación de la
naturaleza frente al erguimiento de
ciudades: los edificios sustituyen a
los árboles y la tierra es ahora de
cemento. Es el trovador que conci-
lia en su canto todas las contradic-
ciones de un siglo donde se respira
el aire de desolación y en el cual no
hay lugar para la esperanza, siquie-
ra en la poesía, pues será necesario
renovar una tradición que daba voz
al pueblo
¿Por qué nace esta forma de poesía
conocida como antipoesía?
Creemos que la respuesta hay que
encontrarla en dos lugares. Pri-
mero, la poesía ya no podía se-
guir transmitiendo las vivencias, el
modo de ver del hombre medio a
través de las normas tradicionales
de la poesía. Es decir, hay una im-
potencia expresiva para dar cuenta
de la realidad. Los poemas basados
en “lo bello” ya no sirven; no llegan
a la sensibilidad del hombre con-
temporáneo. El poeta siente que el
lenguaje y modo de escribir poesía
ya no le sirve para comunicarse.
El segundo elemento de la antipoe-
sía tiene relación con lo que quiere
expresar el antipoeta.
¿Qué es lo que quiere comunicar?
Quiere comunicar lo difícil que re-
sulta comunicarse, la impotencia
que siente el poeta en este intento
y el enfrentamiento con la falsedad
de un mundo convencional, de un
mundo absurdo que pretende con-
vertirse en un modelo de vida. Es
por eso que el poeta, a través de la
burla, desenmascara la hipocresía
del ser humano, de sus relaciones,
de sus sistemas de valores. Se re-
chaza, por ejemplo, la idea de que
el poeta es un ser especial, superior
en sensibilidad, también desenmas-
cara la falsedad de las relaciones
sentimentales dominadas por los
prejuicios.
Algunas características de la anti-
poesía son:
Se define negativamente. Insiste en
su incapacidad de comunicarse.
Utiliza la burla, la sátira, el sarcas-
mo, el humor negro. Esto lo logra
POESÍA,
ANTIPOESÍAY
NICANOR PARRA
Por Isabel Rezmo
POESÍA ANTIPOESÍA
5. El Corredor Mediterráneo / Página 5
en gran medida utilizando lugares
comunes, frases hechas que son
sacadas de su “contexto serio”.
Ridiculiza a los seres, situaciones,
ideas, conductas.
Es un poesía “escéptica”. Es decir,
aparece no creyendo ni en concep-
ciones religiosas, ni en concepcio-
nes políticas.
Es demoledora. Busca con fuerza
destruir modos de ver el mundo, el
lenguaje poético e incluso la con-
cepción de poeta tradicional.
Muestra la incongruencia de lo co-
tidiano. Es decir, pone el acento en
las contradicciones desenmasca-
rando la realidad, los prejuicios y
los valores burgueses.
Es retórica. Es decir, resulta fácil
detectar cuáles son los mecanismos
que la componen, ya sea en el te-
rreno del lenguaje, en la visión del
mundo y en la idea de antipoeta.
El hombre aparece en un mundo
contaminado donde no existe una
tabla de salvación que le traiga un
poco de paz y felicidad. El hom-
bre aparece condenado a vivir un
aislamiento donde ni la religión ni
la política le sirven para acceder a
la esperanza. Es estado anímico es,
por lo tanto, el del que presencia la
catástrofe impotente y sólo tiene el
recurso del humor en todas sus gra-
daciones.
Origen y desarrollo: Nicanor Parra
Creada y principalmente desarro-
llada por el escritor chileno Nica-
nor Parra (1914-2018) Se remonta a
1935, cuando Nicanor Parra y unos
amigos fundaron la Revista Nueva
en el Internado Nacional Barros
Arana, en la ciudad de Santiago
(Chile). De esta manera, Parra creó
una nueva forma de hacer poesía,
más directa, coloquial y provista de
dichos populares que se opuso a la
imperante en su país a mediados
del siglo XX, encabezada funda-
mentalmente por Pablo Neruda, Vi-
cente Huidobro y Pablo de Rokha.
La poesía de Parra denuncia el ab-
surdo, las incongruencias, las con-
tradicciones e incluso injusticias
políticas. Sin embargo, permane-
ce en la denuncia sin ofrecer una
alternativa, una posibilidad de sal-
vación: es una poesía de la deses-
peranza. Aquí radica la diferencia
con la poesía de Neruda, la cual sí
entrega elementos esperanzadores
y es optimista al creer en la salva-
ción colectiva a través de la lucha
política y social. Neruda se admi-
ra de las cosas próximas y escribe
odas. Parra no ve las cosas que es-
tán cerca, su desánimo le impide
maravillarse con lo cercano y coti-
diano. Neruda siente que la socie-
dad está mal estructurada pero cree
en una sociedad mejor. Parra vive
el caos y no cree en nada.
En 1937 Parra publicó su primer
poemario, Cancionero sin nombre,
una obra relativamente conven-
cional que años más tarde decidió
marginar del resto de su obra. Lue-
go se dio a la tarea de investigar
nuevas formas de hacer poesía. Sus
primeros antipoemas los publicó
en 1948, en la antología de Hugo
Zambelli titulada 13 poetas chile-
nos.
El concepto maduró y se desarrolló
especialmente entre 1949 y 1952,
años en que Parra estuvo en Oxford
para tomar cursos de cosmología.
En Inglaterra, pudo introducirse en
la literatura de Pound, T. S. Eliot,
Blake, Kafka y Donne, en el psicoa-
nálisis freudiano, en las películas de
Chaplin y en el surrealismo. Todas
estas influencias, sumadas a sus ex-
periencias y reflexiones personales,
le fueron revelando nuevas técnicas
en el manejo del verso y una cons-
ciencia acerca de su oficio como
poeta, que acabó materializando,
ya de regreso en Chile, en su obra
Poemas y antipoemas (1954).
En los años siguientes, Parra conti-
nuó explorando otras variantes anti-
poéticas. En Versos de salón (1962)
desarrolló antipoemas en endeca-
sílabos. Luego, durante la dicta-
dura militar, publicó Sermones y
prédicas del Cristo de Elqui (1977)
y Nuevos sermones y prédicas del
Cristo de Elqui (1979), obras en las
cuales asumió como álter ego la fi-
gura del Cristo de Elqui, para probar
una antipoesía dramatizada, más
estrechamente relacionada con la
cultura popular, y al mismo tiempo
poder introducir una crítica velada
en contra de la dictadura militar
encabezada por Augusto Pinochet.
Unos años después, en Hojas de
Parra (1985), escribió «El hombre
imaginario», considerado uno de
sus mejores (anti)poemas. Como
línea paralela, en un intento por
unir palabra e imagen iniciada mu-
cho antes con el Quebrantahuesos
(1952), comenzó también a desa-
rrollar primero sus Artefactos, para
luego continuar experimentando
con sus bandejitas de Las Cruces y
susTrabajos prácticos, hasta llegar a
los artefactos visuales a comienzos
del siglo XXI.
-----
Advertencias al lector
El autor no responde de las moles-
tias que puedan
ocasionar sus escritos :
Aunque le pese
El lector tendrá que darse siempre
por satisfecho
Sabelius, que además de Teólogo
fue un humanista consumado,
Después de haber reducido a polvo
el dogma de
la Santísima Trinidad
¿Respondió acaso por su herejía?
Y si llegó a responder, ¡cómo lo
hizo!
¡En que forma descabellada!
¡Basándose en qué cúmulo de con-
tradicciones!
Según los doctores de la ley este li-
bro no debiera publicarse:
La palabra arco-iris no aparece en él
en ninguna parte,
Menos aún la palabra dolor,
La palabra tormento.
Sillas y mesas sí que figuran a gra-
nel,
¡Ataúdes!, ¡útiles de escritorio!
Lo que me llena de orgullo
Porque, a mi modo de ver, el cielo
se está cayendo a pedazos.
Los mortales que hayan leído el
Tractatus de Wittgenstein
Pueden darse con una piedra en el
pecho
Porque es una obra difícil de con-
seguir:
Pero el Círculo de Viena se disolvió
hace tres años,
Sus miembros se dispersaron sin de-
jar huellas
Y yo he decidido declarar la guerra
a las Cavalieri della luna.
Mi poesía puede perfectamente no
conducir a ninguna parte:
“Las risas de este libro son falsas”,
argumentarán mis detractores
“Sus lágrimas, ¡artificiales!”
“En vez de suspirar, en estas pági-
nas se bosteza”
“Se patalea como un niño de pe-
cho”
“El autor se da a entender con es-
tornudos”
Conforme: os invito a quemar vues-
tras naves,
como los fenicios pretendo fabricar-
me mi propio alfabeto
“¿A qué molestar al público enton-
ces?”, se preguntarán los amigos
lectores:
“Si el propio autor empieza a des-
prestigiar sus escritos,
¡Qué podrá esperarse de ellos!”.
Cuidado, yo no desprestigio nada
O, mejor dicho, yo exalto mi punto
de vista,
Me vanaglorio de mis limitaciones
Pongo por las nubes mis creaciones.
Los pájaros de Aristófanes
Enterraban en sus propias cabezas
Los cadáveres de sus padres.
(Cada pájaro era un verdadero ce-
menterio volante)
A mi modo de ver
Ha llegado la hora de modernizar
esta ceremonia
¡Y yo entierro mis plumas en la ca-
beza delos señores lectores!
Nicanor Parra
Poemas y Antipoemas
6. El Corredor Mediterráneo / Página 6
LOS NIÑOS
CANTORES
DEVIENA
EN RÍO CUARTO
Por Antonio M. Álvarez
El miércoles 22 de julio de 1936
en familiar (18:00 hs) y noche
(21:30 hs.), la empresa Marinosci,
concesionaria del Teatro Munici-
pal presentaba, por primera vez
en Río Cuarto, a los Niños Canto-
res deViena en su gira artística por
AméricaLatina.Ennuestropaísac-
tuaron en Buenos Aires, Córdoba,
Tucumán y Rosario. Procedentes
deVilla María con destino a Men-
doza recalaron en nuestra ciudad.
El nacimiento del coro Vienés de
niños se remonta al 7 de julio de
1498 cuando el protector de las ar-
tes y máximo representante del Re-
nacimiento, Maximiliano I deAus-
tria, rubrica el decreto mediante el
cual crea un coro de doce voces
blancas destinado a cubrir y em-
bellecer musicalmente los oficios
religiosos de la Capilla Imperial.
Desde entonces y hasta la fecha,
tanto el coro como la orquesta de
la Corte se han constituido en em-
bajadores mundiales de una larga
tradición. La trayectoria, sólo in-
terrumpida durante el lapso com-
prendidoentrelacaídadelImperio
(Sarajevo 1918) y la nueva forma-
ción del conjunto por iniciativa
del capellán Joseph Schnitt (1924),
salvó no sólo paraViena sino para
todo el mundo una parte signifi-
cativa de la tradición musical aus-
tríaca. Influenciados por músicos
como Gluk (1714-1787), Mozart
(1756-1791), Haydn (1732-1809),
Schubert (1797-1828), que formó
parte del grupo, y Antón Bruckner
(1824-1896), transcurrieron más
de quinientos años desde su fun-
dación.
Para recibir a los pequeños can-
tores, en nuestra ciudad se cons-
tituyó una comisión de recepción
integrada por el Intendente Emilio
Jautz, el Jefe Político Francisco P.
Arana, el Jefe del Regimiento 14
Coronel Félix A. Tenreyro y el vi-
cario de la Diócesis Mons. Dr.
Ambrosio López. Además una
comisión Organizadora integra-
da por el Pbro. José Pérez Arez,
director del coro de niños Schola
Cantorum de la Catedral, el Prof.
Delfino Quírici (por el coro Río
Cuarto), el Sr. Ángel Pécile (por la
Asociación Sinfónica), el Director
del diario “El Pueblo”, señor Lucia-
no Subirachs y el corresponsal de
“Los Principios”, señor A. Ferrari.
De la recepción que se brindara
a los niños cantores participó el
Conservatorio Provincial con una
delegación presente en el andén
ferroviario.
Luego de que los visitantes entona-
ran nuestro Himno Nacional ante
la multitud congregada en la pla-
zoleta del Andino, fueron acom-
pañados por nutrida caravana de
automóviles en breve paseo por
la ciudad, hasta su alojamiento en
el Moderno Hotel. A las 13 horas
los integrantes del coro de niños
Schola Cantorum, miembros de
la Sinfónica y parte del coro Río
Cuarto, visitaron el alojamiento
para rendirles un homenaje mu-
sical. El niño Sigfredito Blauzwrin
les dio la bienvenida con un dis-
curso en alemán que provocó el
entusiasmo de los visitantes y el
aplauso general. Las dos funciones
con diverso programa colmaron
las expectativas del público ante lo
que fue la primera visita de uno de
los cuatro elencos de la calificada
agrupación vienesa de gira por el
mundo.
*Fuente diario “El Pueblo”
HISTORIAS DEL CONSER
7. El Corredor Mediterráneo / Página 7
EL PANTANILLO
DE ERNESTO
SÁBATO
de Pedro Jorge Solans
Entre las numerosas publicaciones de
las que es autor Pedro Jorge Solans (en-
sayo-poesía-narrativa, crónica perio-
dística…) seguramente El Pantanillo de
Ernesto Sábato, que acaba de ver la luz
con el sello editorial de Corprens, es
una de las que dejará profunda huella
en el campo de la literatura cuyo obje-
to es la investigación bio historiográfi-
ca y periodística. Después de indagar
durante más de cuarenta años en la
vida y en la producción literaria del
gran autor de Sobre héroes y tumbas,
Solans nos deja esta inestimable contri-
bución que cubre –por lo menos- un
doble aspecto: el de ensanchar el perfil
biográfico de Sábato y las decisiones
cruciales en su vida, y el de aportar da-
tos de gran utilidad para encarar una
investigación seria sobre la presencia –
en forma esporádica, temporaria o más
o menos permanente- de numerosos
personalidades de la ciencia, el arte
y la cultura en nuestra región serrana,
especialmente de este sur de Punilla,
en el que está emplazado Carlos Paz y
poblados adyacentes.
El libro se divide en cuatro capítulos:
“La morada serrana del escritor”; “So-
bre Uno y el universo”; “Sobre El Tú-
nel” e “Ilustraciones y apuntes”. Ha-
ciendo gala de una inspirada prosa
poética, que no descuida el rigor docu-
mental, Solans anota: “Siendo científi-
co, Ernesto Sábato llegó a El Pantanillo,
el humedal donde inició con intensi-
dad un cambio existencial que se tra-
dujo en ensayos y novelas reconocidas
en el mundo y elogiadas por Albert
Camus, Thomas Mann, Graham Gree-
ne y Salvatore Quasimodo”: aspectos
fundamentales en la vida de cualquier
escritor, que en el caso de Sábato hasta
el momento no habían sido relevados.
El libro efectúa valiosos aportes con
relación al contexto de época y lugar
y –en importante medida- sobre di-
ferentes personalidades que, por los
años en que Sábato se radica tempo-
rariamente entre nosotros, también se
acercan al lugar, tanto en plan de des-
canso como por necesidades creativas.
Pintores, cineastas, músicos, drama-
turgos y actores, lo mismo que poetas
y escritores, ponen de moda –especial-
mente en la Buenos Aires capitalina- a
las sierras de Córdoba, ostentando, el
sur del Valle de Punilla, una categoría
pionera que bien vale la pena rescatar,
como un atractivo turístico-cultural
más. Lo cierto es que –de acuerdo a lo
investigado por Solans- a los nombres
centrales de Falla, Sábato y Furt, hay
que agregarle otros nombres ilustres
del arte y la cultura que, la mayoría de
las veces atraídos por lazos de amistad
o relaciones artísticas, anduvieron por
aquí creando o convocando a las mu-
sas inspiradoras. La lista es extensa, y
a medida que se investiga se acrecien-
ta: Atahualpa Yupanqui, León Zárate,
Rogelio Yrurtia, Enrique Wernicke,
Alejandra Pizarnik, Leónidas Barletta,
Cayetano Córdova Iturburu, Juan Batt-
le Planas, Enrique Molina, Pablo Rojas
Paz, Arturo Marasso, Guillermo Butler,
Egidio Cerrito, son algunos de los nom-
bres que integran la extensa nómina.Y
si quisiéramos ampliar la búsqueda,
no para hacer “chapa” –como se dice-
sino para hacer visible de una vez por
todas la historia artística y cultural del
Valle, ahí está el caudal de nombres
que, o tuvieron que vivir entre nosotros
(por ejemplo obligados por pandemias
del siglo pasado como la tuberculosis)
o nos eligieron para escenificar debi-
damente su ocio creativo; pero la nó-
mina es larga, y entre otras figuras cabe
mencionar a: Alfonsina Storni, Enrique
Muiño, Manuel Mujica Láinez, Jorge
Luis Borges, Roberto Arlt, Ulises Petit
de Murat, Federico Valle, Sara Gallar-
do, Miguel Ocampo, Ernesto Fariña,
Enrique Cadícamo, Agustín Bardi y un
extenso etcétera que invita a ser debi-
damente relevado y estudiado.
En su obra Solans también despliega
sus conocimientos filosófico-literarios
y analiza con solvencia la compleja
problemática que Sábato aborda en las
obras pergeñadas en El Pantanillo, lo
cual constituye un aporte que enrique-
ce el cúmulo de estudios existentes so-
bre la original obra del novelista: obra
que, por imperio de las circunstancias
que actualmente atraviesa la huma-
nidad, se ha convertido nuevamente
en referencia necesaria para repensar
cuestiones existenciales del hombre
actual.
El libro se cierra con el aporte de foto-
grafías de La Tapera –el modesto lugar
donde viviera Sábato- , de dibujos y
pinturas que el autor de El Túnel hicie-
ra para los amigos y vecinos del lugar
y un detallado registro de las personas
cercanas –incluyendo su mujer , hijos
y nietos- que acompañaron su perma-
nencia serrana, destacándose los testi-
monios gráficos de la visita que Sába-
to, junto a nuestra emblemática Doña
Jovita (José Luis Serrano), realizara con
Pedro Solans en 2002.
Pedro Solans ha publicado - entre
otros- Los Gigantes no cesan de llo-
rar (Premio Rodolfo Walsh 2002 del
Cispren Cba.); Crímenes en sangre; El
Sur Negro y varios libros de poesía. En
1993 fundó El Diario de Carlos Paz,
prestigioso medio gráfico que circula
en todo elValle de Punilla y del que es
su Director General
Aldo Parfeniuk
Corprens Editora-
Villa Carlos Paz,
Córdoba, 2020.
8. El Corredor Mediterráneo / Página 8
LA ISLA DELTESORO
LARGAVIDA
AL SUJETO
Por Francisco Martínez Hoyos
La obra, pese a lo que pretendieran ciertos críticos en los sesenta,
no se puede separar de su artífice. La historiadora Isabel Burdiel lo
ha dicho con elegancia: “es imposible entender ninguna empresa
intelectual si no se la relaciona con una empresa vital”.
Como el individuo no ha muerto, el concepto de autor conserva su
vigencia, aunque no en el sentido antiguo de una figura separada ra-
dicalmente de su contexto. Uno de los retos de cualquier biografía es
insertar la personalidad del objeto de estudio dentro del marco más
amplio de su época, de forma que sea posible captar cómo se rela-
ciona el sujeto con su momento histórico. En palabras de Manfred
Frank, el descubrimiento del mundo se realiza “en el espacio abierto
de la interacción inter-individual, cuyos sujetos son seres singulares
autoconscientes dotados cada uno de ellos con una motivación sin-
gular”.
Como apuntó Franco Ferrarotti, deberíamos hablar, más que del in-
dividuo, de “universo singular”, en el sentido de que la individuali-
dad se ve “universalizada” por su contexto. El contexto, a través del
individuo, se manifiesta de una forma particular. En otras palabras:
la persona es lo que es como síntesis sofisticada de los elementos
sociales.
Tenemos identidades múltiples, con la excepción de casos extremos
como los representados por las sectas. La historiadora Mercedes
Vilanova insiste en esta idea como una hermosa formulación: “No
somos un átomo con una identidad personal que nos pertenezca en
propiedad, somos una hebra de la trama de la vida”.
Una biografía, en consecuencia, exige plantear problemas generales
y ofrecer, como propone Burdiel, respuestas individuales que arrojen
nueva luz sobre esas preguntas. Tal vez, más que de biografía, deba-
mos hablar de “historia biográfica”, en la línea que sugirió Sabina
Loriga.
Pero no llevaremos este planteamiento tan lejos que el sujeto acabe
convertido en un simple producto de la historia. El individuo, en
palabras de Ortega, es él y sus circunstancias. Eso nos obliga a ir
siempre de lo singular a lo plural sin caer en determinismos fáciles,
en la denominada “falacia ecológica”, que deduce mecánicamente
los rasgos de la persona a partir de las características de la sociedad.
La persona está influida por su contexto, pero no determinada en
un sentido mecanicista, tal como nos recordaba Jacques Le Goff a
propósito del matrimonio de sus padres, una católica ferviente y un
anticlerical igualmente apasionado.
No creemos, pues, en la “muerte del sujeto”, ni aceptamos que la
existencia del autor como ser concreto que tiene algo que decir sea
una mera suposición. Ciertos teóricos confunden la pluralidad de
identidades dentro del sujeto, o las identidades sucesivas a lo largo
del tiempo, con el desvanecimiento de la identidad. Un individuo
evoluciona a lo largo de su biografía y, en cierto sentido, se convier-
te en personas diferentes. Eso no significa que entre ellas no exis-
ta una relación de continuidad, ni que el individuo sea una simple
construcción lingüística sin referente en la vida real. En su momento,
Marc Bloch ya advirtió que las identidades múltiples presentes en la
vida de muchos hombres no podían servir de argumento para negar
“la unidad fundamental del yo”.
Si aceptáramos en su literalidad la idea de la muerte del sujeto, la
biografía se convertiría en un objetivo imposible, en una “ilusión”,
por utilizar la terminología de Pierre Bourdieu. Según este pensador,
el individuo no existe. Lo que denominamos “vida” no sería más que
la amalgama de fragmentos inconexos, sin que podamos encontrar
un todo como realidad coherente. Solo un mismo nombre propio
permite que identifiquemos, a lo largo del tiempo, a un mismo su-
jeto.
Pero todos estos planteamientos no son más que abstracciones. Por
mucho que el adulto no sea la misma persona que el joven, es evi-
dente que el primero procede del segundo y de que no hablamos
de dos seres ajenos por completo el uno al otro. En cierto sentido,
nunca dejamos de ser el niño que una vez fuimos.
La Columna