(2024-04-29)Actualización en profilaxis PrEP frente a VIH. (DOC)
Cansancio Cronico
1. “AÑO DE LA UNIÓN NACIONAL FRENTE A LA CRISIS
EXTERNA”
UNIVERSIDAD PARTICULAR DE CHICLAYO
FACULTAD DE MEDICINA HUMANA
ESCUELA PROFESIONAL DE MEDICINA HUMANA
DEPARTAMENTO ACADEMICO
DE CIENCIAS BASICAS
ARTICULO CIENTIFICO
“ EL CANSANCIO CRONICO Y ALTERNATIVAS DE
SOLUCION”
NOMBRES Y APELLIDOS:
Estacio Escheandia Pavel
Fernandez Zelada Boris
ASIGNATURA : Metodología del Estudio Univesitario II
DOCENTE : Mg. Delicia Muñoz
CICLO : II
FECHA : 11/11/09
CHICLAYO - PERU
3. Cada día, millones de personas se quejan de estar siempre cansadas. La
mayoría apunta con el dedo delator a los quehaceres diarios como culpables,
a tener mucho para hacer y poco tiempo para hacerlo, especialmente los
períodos extra ocupados. Pero generalmente el verdadero culpable son los
hábitos diarios: lo que comemos, cómo dormimos y cómo lidiamos con
nuestro entorno emocional.
Lo primero que los médicos suelen recomendar es, aunque parezca
paradójico, hacer ejercicio. Ya que el ejercicio aeróbico es estimulante.
En este artículo vamos a resumir las simples estrategias que uno puede
seguir para realizar cambios que nos recarguen de energía así no nos
paseamos cansados por el mundo.
II. DEFICION DEL CANSANCIO CRONICO
El cansancio crónico o también
considerado como “Síndrome de
4. fatiga crónica” (SFC) es un trastorno complejo caracterizado por la
extrema fatiga que puede empeorar con la actividad física o mental,
teniendo como premisa que no mejora con el descanso.
Aunque hay muchas teorías acerca de las causas de esta condición que van
desde las infecciones virales a estrés psicológico, en la mayoría de los
casos la causa es todavía desconocida.
Debido a que sus síntomas son difíciles de medir, SFC no fue ampliamente
aceptado como una condición médica durante varios años, pero hoy, sin
embargo, los médicos y los investigadores están de acuerdo en que esta
condición crónica deben tomarse en serio.
Muchas personas se recuperan de síndrome de fatiga crónica con el tiempo,
así las personas con síndrome de fatiga crónica pueden experimentar una
variedad de signos y síntomas que van y vienen frecuentemente sin patrón
identificable.
III. MARCO TEORICO:
Hay tres puntos importantes para atacar y así conquistar al endemoniado
cansancio crónico: Energizar la dieta, energizar la actitud y conseguir un
descanso restaurador.
2.1 Energizando la dieta
5. Es muy importante tomar un buen desayuno, incluso si no tenemos
hambre. Muchos estudios muestran que la gente que desayuna algo
cuando se levanta se siente mucho mejor física y mentalmente a lo
largo del día. Incluso un grupo de investigadores británicos ha
descubierto que desayunar un tazón de cereales reduce
sensiblemente una hormona relacionada con el estrés.
Come cada tres o cuatro horas. Comer algún bocado cada tanto es
muy bueno para la salud, ya que mantiene tu azúcar y los niveles de
energía estables todo el día. Esto lo recomiendan todos los
nutricionistas. Con dos comidas principales y algunos bocados cada
tres a cuatro horas uno tiene la energía suficiente para lidiar con
todos los gastos energéticos del día. Pero si uno se pasa, y come
demasiado eso es contraproducente, ya que el cuerpo va a demandar
más energía para digerir esa inmensa cantidad de alimento.
Entre los bocados entre comidas, lo mejor es elegir alimentos con
fibra, ya que según estudios médicos entran al flujo sanguíneo de una
forma tranquila y lenta, con lo que conseguimos un flujo de energía
estable que permanece largo tiempo. Se recomienda comer entre 25 y
30 gramos de fibra al día, cuando casi todo el mundo no pasa de 10
gramos.
Es importante también mantenerse hidratado, o sea consumir mucho
líquido. No hay que olvidarse que la mayoría de los fluidos corporales
provienen del agua, la sangre inclusive. No tomar suficiente agua hace
que el corazón trabaje forzado y eso nos fatiga. El agua también hace
que los nutrientes circulen por nuestro cuerpo. Según recomiendan los
médicos, para saber si consumimos suficinte líquido, lo mejor es medir
cuanto orinamos. Deberíamos ir al baño cada dos o tres horas, y la
orina tendría que ser de un color claro o amarillo pálido. No sólo
tomando mucha agua tenemos más líquido, se puede consumir frutas
jugosas.
Hay que cuidarse de consumir mucha cafeína. Es normal tomar
mucho café en la oficina, a lo largo del día. Pero no sólo no es
recomendable como energizante, sino que es uno de los causantes de
que uno se sienta cansado, dicen los médicos. Ya que nos impide
descansar bien por la noche. Lo mejor es tomar poco café, y no
tomarlo luego del atardecer, porque sino al otro día estaremos
ojerosos. El café es uno de los principales culpables de los ojos y
párpados hinchados.
6. 2.2 Energizando la actitud
Estar triste, aburrido, preocupado, enojado y peor, tener estrés
general, son también los grandes culpables, según estudios, de
llevarse gran parte de nuestra vitalidad a lo largo del día. Si uno se
toma todos estos problemas con sabiduría puede redundar en
beneficio para nuestro vigor diario.
Simples actos como mojarse la cara, o tomar una ducha cuando
uno se siente “quemado”, pueden revitalizarnos. Según un estudio
reciente publicado en Journal of Personality and Social Psychology
esta “terapia acuática” incrementa de forma exitosa la energía.
Otros consejos que dan los psicólogos y psiquiatras son que uno no se
deje estar en su aspecto general. En la vestimenta, y en el aseado
diario. Si uno se ve al espejo de esa forma, se sentirá cansado.
Tampoco ayuda si uno se encierra en sí mismo y no da a conocer sus
sentimientos, no hay que guardarse nada, porque eso repercute
negativamente en nuestro cuerpo. Incluso si uno mantiene un estado
de enojo por mucho tiempo hace que el corazón trabaje más y eso
genera cansancio. Hay que dejar pasar los enojos y aprender a
perdonar, no sólo nos hace mal mentalmente mantenernos en un
estado de enojo, sino que también nos afecta físicamente.
Realizar buenas acciones también aumenta nuestra energía, según
un estudio del Journal of Health and Social Behavio. El trabajo
voluntario aumenta nuestra felicidad, nuestra satisfacción con la vida,
nuestra auto estima, el sentido de control sobre nuestra vida, la salud
física y mejora el humor.
2.3 Descanso restaurador
Uno tiende a dejar de lado el descanso cuando está ocupado. Es
paradójico, porque uno se siente cansado, y se queja de tanto que hay
por hacer, y lo primero que deja de lado para hacerse de más tiempo
es el descanso, y así duermen menos.
7. Lo mejor es dejar de lado tanta televisión o tiempo en la PC luego de
la cena. Hay que dormir lo suficiente, y tener un descanso reparador.
Los médicos también recomiendan no tener un reloj cerca cuando
dormimos. Que las agujas miren para otro lado, porque no es bueno
estar constantemente midiendo cuánto nos lleva dormirnos, o cuanto
nos falta para que suene la alarma y levantarnos para ir a trabajar.
Esta hipervigilancia mantiene al cerebro despierto y demasiado
alerta, y paradójicamente no nos deja dormir bien.
Tampoco es bueno que las mascotas duerman con nosotros. Ya que
nos despiertan, o nos quitan espacio en la cama. Según estudios de la
Clínica Mayo el 53% de los dueños de mascotas tienen problemas para
dormir bien por las noches.
No es bueno que haga mucho calor por la noche, así que a bajar la
calefacción en invierno y aprender algún ventilador o acondicionador
de aire en verano.
La regla de los 15 minutos es muy interesante para seguir. Esta dice
que si uno no se puede dormir o se despierta y no puede volver a
conciliar el sueño en quince minutos, entonces lo mejor es salir de la
cama y realizar alguna actividad relajante, nada de prender la tele o
ir a navegar por la web, eso no relaja, sólo nos impedirá dormirnos.
Así que con estos consejos simples, que no son difíciles de llevar a la
práctica, ya podrán alejar ese cansancio crónico que los aqueja.
IV. SINTOMATOLOGÍA
Este Síndrome tiene ocho síntomas característicos, además de los
síntomas centrales de la condición que le da su nombre y son:
• Fatiga
8. • Pérdida de memoria o concentración
• Dolor de garganta
• Ampliada ligeramente doloroso y los ganglios linfáticos en el cuello
o las axilas
• Inexplicable dolor muscular
• Dolor que se mueve de un conjunto a otro sin hinchazón o
enrojecimiento
• Dolor de cabeza de un nuevo tipo, patrón o gravedad
• Insomnio
• Agotamiento extremo que dura más de 24 horas después del
ejercicio físico o mental.