2. Hablar más despacio Pronunciar correctamente, sin exagerar ni gritar Repetir si es necesario o intentar decir lo mismo de otra forma
3. Acompañar lo que se dice con gestos naturales para facilitar la comprensión No responder por él (no adelantarse a su respuesta, aunque la conozcamos) y dejar que se exprese libremente Animarle y felicitarle por sus progresos
4. Intentar no ponerse nervioso cuando el niño no hable correctamente o no se le entienda. Evitar riñas, comentarios desagradables o castigos relacionados con el lenguaje.
5. Cuando se equivoque al decir lo que quiere vamos a darle AYUDAS: AYUDA SEMÁNTICA “donde dormimos es la ...” (cama) AYUDA AUDITIVA “dormimos en la ca__”
6. AYUDA VISUAL: Le enseñamos la imagen de la cama y le damos las demás ayudas si fuera necesario REPETICIÓN “se llama cama, ¿cómo se llama?”