1. “MANIFIESTO CIUDADANO”
¡Rescatemos la Política!
A LOS CIUDADANOS EN GENERAL
1. Hace unas semanas leía en un periódico local ¡Estamos hasta la madre! Se refería a
todas las anomalías que se dan en la política, especialmente en el actual proceso
electoral que tiene como finalidad la elección de Diputados y Presidentes
municipales locales en nuestro estado de Veracruz. Pero, en honor a la verdad, ya
llevamos años (pocos o muchos) oyendo, viendo, soportando en el pasado lo que
hoy sucede en el presente y si no tomamos cartas en el asunto, eso mismo nos
seguirá pasando en el futuro: el secuestro, la perversión y la prostitución de la
política por nosotros mismos.
2. Pues conocemos todos los hechos que se dan en la realidad política de nuestro
acontecer ciudadano. Me refiero a los siguientes: Ciudadanos que compran o
venden su voto por dinero, por un poco de material de construcción, por alimentos
básicos, por una beca escolar, por un trabajo dentro o fuera del gobierno o por
casas habitación, etc., etc. Igualmente nos damos cuenta que a muchos operadores
de taxis o autobuses urbanos se les obliga a exhibir propaganda solo de candidatos
de un partido y a transportar gratuitamente votantes por un partido el día de las
elecciones y si no aceptan, entonces se les aplica una multa económica o se les
quita la placa del vehiculo y tendrán que pagar su devolución; quizás hasta se les
amenace a sus propietarios que se les retirará la concesión. También está a la vista
de todos, la manipulación y lucro de la miseria, de la pobreza, de las necesidades
más apremiantes, mas sentidas de muchísimos ciudadanos de la tercera edad,
desempleados pensionados, etc. etc. Conocemos igualmente muchos operadores
políticos que están de acuerdo y lo hacen en violar los derechos civiles, sociales,
laborales y políticos de libertad de elección, al coaccionarlos por medio de promesas
de apoyos de muchos tipos. También hemos escuchado, de manera machacona, a
los candidatos prometer solución a los problemas de la gente o a las carencias que
existen en sus colonias sabiendo ellos que eso no se tendrá inmediatamente o no
depende principalmente de sus gestiones; es mas, sabiendo que a un diputado no le
corresponde pavimentar calles, iluminar colonias, etc. si no el legislar debidamente
para que se proporcione la atención debida a esas necesidades. Todavía más: hay
dirigentes de partidos, a distinto nivel, que firman pactos dizque para ayudar al
pueblo, a la nación y resulta que hacen esos pactos para repartirse entre todos
ellos, entre todos los partidos el pastel del poder, de la riqueza de los mexicanos,
pues díganme ustedes ¿de veras el petróleo es nuestro, de todos los mexicanos?
Hasta hubo un sexenio que “administramos todos” la abundancia.
3. Y aun hay mas: Empresarios, empleadores, que unidos a los gobiernos, elaboran,
discuten, votan y firman leyes o reformas laborales para que los obreros, los
empleados, sigan recibiendo salarios de hambre, no se les de seguridad social o no
se les respeten otros derechos laborales. ¿y en los Sindicatos existe la tan
cacareada “democracia sindical”? Más bien casi siempre se les da “línea” a la
inmensa mayoría de sindicalizados y a los empleados de confianza. A todo eso
añadamos lo siguiente: la gran mayoría de servidores públicos (léase autoridades de
cualquier nivel) emplean dinero destinado a crear mejores condiciones de vida de la
2. población en las campañas políticas y hasta tienen el cinismo de decir que ese
dinero es “oro molido” para comprar votos. Y en otro orden de hechos aparece la
violencia insistentemente, como es la verbal, la física llegando hasta la perdida de
vidas humanas de todos aquellos enemigos que son adversarios en las contiendas
políticas. Y aun hay más: el dispendio de recursos públicos en dinero en las
campañas. El pago de sueldos a guardias especiales a muchos políticos mientras
que muchísimos ciudadanos somos atacados diariamente por la delincuencia, la
realización hasta de partidos de fut-ball importando jugadores extranjeros que
igualmente cuestan mucho dinero para apoyar a determinados candidatos, se
planean y realizan actividades para inhibir el voto en los lugares donde han perdido
algunos partidos políticos, se manipulan actas de casillas, se rellenan ánforas
electorales y como se dijo antes la vivencia de la fe, de la religión y los valores
evangélicos, éticos y morales están ausentes.
4. Recordemos que “Política” es la organización de la comunidad civil que busca
establecer el bien común, el cual, permita la realización de los individuos y de los
grupos dentro del contexto de una sociedad. Esta política puede realizarse por
medio de los Partidos Políticos y así tenemos la política de los partidos. pero
también puede realizarse por iniciativa propia y de forma individual, cuando de
manera personal se le da solución p.e., a un problema comunitario. Pero, por lo que
llevamos dicho en el inciso 2 y 3 podemos concluir que en la actualidad tenemos
secuestrada la política del bien común: unos por comisión y otros, muchísimos, por
omisión.
5. Propongo que entre todos salvemos a la política, de todo eso; honrémosla,
exaltémosla de nuevo; ejerzámosla con orgullo y dignidad, con honestidad de modo
que sea, una nueva manera de ser, de vivir y de convivir como mexicanos
veracruzanos.
Así pues, si estamos hasta la “M”… en esta dimensión de nuestra vida, démosle
entre todos, muy especialmente nosotros los ciudadanos, igualmente en la “M”… a
ese cáncer que padece la Política. No permitamos más, que lo sigan haciendo a su
modo los ricos muy ricos, los políticos mismos, los Partidos y los gobiernos en turno.
Todos ellos lo harán pensando solo en sus intereses y no en el bien de nosotros y
del País. Esto ya nos lo han demostrado muchas veces con las dizque reformas
políticas que han hecho.
¡Unámonos en un esfuerzo común y colaboremos todos en la tarea de limpiar y
dignificar la Política: promovamos los valores cívicos políticos, la dignidad de la
persona humana y la defensa de sus derechos sociales v.gr., los de escoger
libremente a nuestros gobernantes. ¡Una nueva Política si es posible!
JUAN PUEBLO PEREZ HERNÁNDEZ
(J. P. P. H.)