La astrología es considerada una pseudociencia porque no se ha comprobado científicamente que los planetas y estrellas puedan influir en el carácter y destino de las personas. Además, los astrólogos antiguos no conocían planetas como Urano, Neptuno y Plutón y no podían hacer predicciones precisas basadas en un sistema solar incompleto. Tampoco se explica cómo los astrólogos continúan haciendo predicciones a pesar de los cambios en la clasificación de planetas.