La Web 1.0 comenzó en los años 60 con navegadores de texto y luego evolucionó con la introducción del HTML que hizo las páginas más agradables visualmente. Consistía en una colección de documentos HTML conectados por hipervínculos. Las páginas eran estáticas y los usuarios solo podían leer el contenido sin interactuar. Aunque la Web 1.0 dio origen a la web moderna, en la actualidad sigue existiendo a pesar de estar obsoleta y ser inadecuada para las necesidades actuales.