3. • La expresión genérica “los judíos” aparece 71 veces en el
evangelio de Juan.
• El único escrito del Nuevo Testamento que se le aproxima es el
libro de los Hechos de los Apóstoles, con 79 veces.
5. • En algunos pasajes, “los judíos” son considerados
positivamente.
• En Jn 4,22 “la salvación viene de los judíos”.
• En el diálogo con la samaritana se mantiene vigente la
prerrogativa salvífica de Israel.
• Nicodemo y otros judíos viven un proceso de conversión,
aunque no se hable explícitamente de un paso a la fe.
7. • Pero son muchos más los textos en los que “los judíos”
manifiestan actitudes negativas.
• Murmuran contra Jesús, tratan de apresarlo, de apedrearlo, y
buscan matarlo.
• En los diálogos con Jesús no entienden sus palabras, lo tratan
como un samaritano y endemoniado (8,48.52; 10,20).
8. • En algunos de estos textos hay un cambio de terminología, de
hablar de los judíos pasa a hablar de los fariseos, sin referirse a
un nuevo grupo.
9. • Estos fariseos tratan de apresarlo, se precian de no creer en
Jesús (7,48),
• lo acusan de dar testimonio de sí mismo,
• junto con los sumos sacerdotes determinan su muerte (11,47-
53),
• expulsan de las sinagogas a los judíos que dicen creer en Jesús
(12,42).
10. • En estos textos, los judíos o los fariseos son los representantes
de la incredulidad y del rechazo activo de quien les estaba
revelando a Dios.
• Pero Jesús también los rechaza: en este evangelio Jesús marca
su distancia respecto a estos adversarios (8,15.22.24; 9,41)
criticándolos por su falta de fe.
11. • En 8,44 Jesús hace una afirmación muy negativa sobre los
judíos.
• En la discusión acerca de la filiación de Jesús y la de los judíos,
dice que su verdadero padre no es Abraham, sino el diablo.
• La agresividad del lenguaje utilizado por ambas partes revela la
agudeza del conflicto.
12. • El escenario del mismo hay que buscarlo en la situación que
está viviendo la comunidad cristiana en el tiempo en que se
redacta el evangelio.
• El autor hace hablar a Jesús y a los judíos en el lenguaje de la
controversia y el rechazo,
• pero lo que a él le interesa no es reproducir diálogos pasados,
sino reflejar su visión del judaísmo y la situación de la
comunidad en el presente.
14. • Tres veces se repite la situación que han vivido algunos
miembros de la comunidad (9,21.22; 12,42; 16,2), expulsados
de la sinagoga por haber creído que Jesús es el Mesías.
• El conflicto afectaba a los miembros de la comunidad que
provenían del judaísmo.
15. • Para los otros, la medida era irrelevante.
• En esta polémica, los fariseos parecen ser los protagonistas.
16. Casi un “anacronismo”
• Sin embargo, junto a ellos son citados los sumos sacerdotes,
• pero su mención debe considerarse como una reminiscencia
histórica ya sin valor a fines del s. I, }
• ya que con la destrucción del templo había terminado también
su ministerio.
17. • Al fines del s. I, el judaísmo oficial fariseo incorpora a una lista
de 18 bendiciones (shemone esre),
• una de contenido polémico en el 12º lugar, que se manifestaba
en contra de los herejes o disidentes y en contra del poder
romano deseándoles su pronta destrucción.
18. La bendición n° 12
• (12) No haya esperanza para los apóstatas.
• Y destruye pronto el reino de la tiranía (en nuestros días; y
perezcan los cristianos [nsrm] y los minim en un instante [scil.,
de golpe].
• Sean borrados del libro de la vida y no queden inscritos con los
justos).
• Bendito seas, Yhwh, que doblegas a los tiranos (bárük 'attáh,
Y., maknía0 zedím)
19. • Al final el creyente alaba a Dios, que castiga a los soberbios.
• Algunos autores ha visto en la expulsión de la sinagoga, de la que
habla el evangelio de Juan, el eco de una acción dirigida contra los
herejes en general, como está documentada en la oración
sinagogal.
• Pero esto supone un interés del judaísmo por el cristianismo, que
en ese tiempo es difícil de comprobar, mientras que el interés de
los cristianos por Israel y el judaísmo es más lógico, ya que tienen
que justificar su distanciamiento del judaísmo, sin dejar de sentirse
judíos.
20. • Mirado desde el judaísmo, el panorama era diferente.
• Los cristianos constituían un grupo más dentro de una realidad
del pluralista que, si bien después del año 70 se expresa sobre
todo a través del fariseísmo, no dejaba de ser una realidad
compleja.
• Para los cristianos, los judíos encarnan el rechazo de la luz, que
no renuncian a sus intentos homicidas hasta que consigan que
Jesús sea crucificado.
21. ¿Un conflicto local?
• Más que pensar en una medida jurídica aplicable a todo el ámbito del
judaísmo, según Lona, hay que pensar en una medida de carácter local, en
el marco geográfico de una ciudad donde convivían una comunidad
cristiana y una comunidad judía que posee su sinagoga.
• La relación entre ambas comunidades es conflictiva. Los primeros
afectados son los judeocristianos, que forman el grupo más importante
dentro de la comunidad.
• Los textos tan polémicos en contra de “los judíos” tienen el carácter de una
“pelea de familia”, en donde las injurias y heridas son mucho más
dolorosas que las sufridas en una controversia con una persona ajena o
apenas conocida.
22. Las razones de la separación
• Las acciones y las declaraciones de Jesús demostraban que él
tenía una relación filial muy estrecha con Dios, única en su
género.
• La catequesis apostólica profundizó progresivamente en la
comprensión de esta relación.
• En las comunidades joánicas, se insistía extraordinariamente
en las relaciones entre el Hijo y el Padre y se afirmaba la
divinidad de Jesús, “el Cristo, el Hijo de Dios” (20,31) en un
sentido trascendente.
23. • Esta doctrina provocó la oposición de los jefes de las sinagogas,
seguidos por el conjunto de las comunidades judías.
• Los cristianos fueron expulsados de las sinagogas (16,2) y, por
eso mismo, se encontraron expuestos a vejaciones por parte
de las autoridades romanas,
• pues ya no gozaban de las libertades concedidas a los judíos.
24. • La polémica se acentuó de las dos partes: Jesús fue acusado de
ser un pecador, un blasfemo y un poseído por el demonio.
• Los que creían en Él fueron considerados ignorantes y malditos
(7,49).
• Por parte de los cristianos, los judíos fueron acusados de
indocilidad a la palabra de Dios (5,38ss), de resistencia al amor
de Dios, de búsqueda de vanagloria.
25. • Al no poder participar ya en la vida cultual de los judíos, los
cristianos tuvieron mayor conciencia de la plenitud que
recibían del Verbo hecho carne, y comprendieron que debían
hacer cualquier esfuerzo por propagar la fe en Él, y con la fe, la
Vida.
27. • El componente judío dentro de la comunidad es fuerte. Su
presencia se advierte no sólo en la adopción de múltiples
tradiciones de parte del cristianismo primitivo, que se explica
mejor suponiendo un vínculo de unión con los orígenes
judeocristianos.
• Otros signos demuestran también esta presencia, como el uso
de términos de origen hebreo, aunque en cada caso traduce al
griego el término correspondiente.
• Esto también sucede con la aplicación de elementos culturales.
28. • Un grupo de personas provenientes de Samaría y algunos
“griegos” (personas que por su lengua y educación estaban
incluidas dentro del vasto fenómeno cultural del helenismo),
forman parte también de la comunidad.
29. • Un grupo de simpatizantes de Juan el Bautista o que
pertenecieron a algún grupo de seguidores suyos también
forma parte de esta comunidad joánica.
30. • Hacia el año 90 d.C. una prohibición expulsó a los cristianos de
las sinagogas, probablemente relacionada con la incorporación
al culto sinagogal de una bendición contra los herejes.
• Esta atmósfera de ruptura se descubre a lo largo de todo el
evangelio.
• Sin embargo, nunca dejaron de existir creyentes y
simpatizantes cristianos entre los judíos (12,42-43).
• Por otra parte, Jn 16,1-4a implica que la persecución de los
cristianos no finalizó con la expulsión de las sinagogas.
31. • La figura de Pedro representa a los cristianos de las
comunidades apostólicas no pertenecientes a la comunidad
joánica.