El documento define el abuso sexual infantil como contacto o interacciones entre un adulto y un niño en las que el adulto usa al niño para estimularse sexualmente a sí mismo u otra persona. El abuso sexual es un problema universal presente en todas las culturas que interfiere en el desarrollo del niño y puede dejar secuelas a largo plazo. Si la víctima no recibe tratamiento psicológico adecuado, el malestar puede continuar en la edad adulta, manifestándose a través de síntomas como estrés postraumático,