PROCESO ADMINISTRATIVO Proceso administrativo de enfermería desde sus bases, ...
Historia del arte revolucion industrial
1. Historia del Arte Clásico
Entrega: Viernes 13 de Noviembre
Mtra. Emilia Raggi Lucio
Sesión 22 – Impresionismo y postimpresionismo, simbolismo y
modernismo.
Gombrich, Ernest. La Historia del Arte, trad. De Rafael Santos
Torroella, Phaidon Press Limited, Londres, 2009, Capitulo 25,
“Revolución permanente. El siglo XlX” pp. 498-533.
Brian Castillo Aguirre
Horta Martínez Guillermo Alejandro
Ramírez Gutiérrez Abraham
Salvador Sánchez Gildardo
Silva Villa Ingrid Michelle
2. La revolución industrial comenzó a
destruir las propias tradiciones del
trabajo artístico, la obra manual dio paso
a la producción maquinista como el taller
a la fábrica.
En esta etapa de la gran expansión de
las ciudades en Europa y América que
convirtió campos en áreas de
construcción y aunque había una
actividad constructora ilimitada, esta
carecía de estilo propio.
Algunos arquitectos de este siglo
consiguieron encontrar un camino entre
estas dos incomodas alternativas,
creando obras que no eran imitaciones
de lo antiguo ni caprichosas invenciones.
3. En pintura y escultura, la ruptura con la
tradición afecto en menor grado. En algunos
aspectos su obra se hallaba tan bien definida
como la de cualquier otra profesión. Podía
producir obras indiferentes, o realizarlas
superlativamente bien que la tarea que tenía
en manos fuera nada menos que una obra
maestra trascendental. Fue la sensación de
seguridad lo que los artistas perdieron en el
siglo XlX. El artista no se sentía conforme
con el cliente para poder satisfacer la
demanda. Si se veía obligado a atenderla
porque necesitaba dinero.
4. Se hizo presente una división entre los artistas
cuyo temperamento o convicciones les
permitían seguirlos convencionalismos y
satisfacer las demandas del público y los que
se preciaban de su propio aislamiento,
deliberadamente aceptado. El arte era un
perfecto medio para expresar el sentimiento
individual, siempre que el artista poseyera ese
sentido individual al que dar expresión. En tal
aspecto el arte del siglo XlX difiere
considerablemente de la historia del arte tal
como la hemos visto desarrollarse. En general,
el artista y su público compartían ciertos
supuestos y también una misma escala de
valoración.
5. Nuestras ideas acerca del pasado tienden a cambiar
con rapidez. Riqueza de detalles en trajes y
escenarios pronto adquiere un aspecto poco
convincente y gestos heroicos se tornan
melodramáticos. Llegará un momento en que las
obras sean redescubiertas para diferenciar entre las
malas y las realmente meritorias pues no fue un arte
tan vacío y convencional como creemos.
Los episodios más notorios de este proceso
acontecieron en París, pues en ese tiempo era la
capital artística de Europa. Artistas de todo el mundo
iban a París para estudiar de la mano de
renombrados maestros e intervenir en las
discusiones acerca de la naturaleza del arte
mediante el cual se estaba formando una
concepción artística nueva.
6. El pintor tradicionalista más destacado de la época fue
Jean-Auguste-Dominique Ingres, quien fuera discípulo de
David y gran admirador del arte heroico de la antigüedad
clásica; insistió en la necesidad de una disciplina de
precisión absoluta en el estudio del natural y combatió la
improvisación y el desaliño.
Todos los adversarios de Ingres se unieron al estilo de
Eugène Delacroix. Este artista pertenecía al grupo de
grandes revolucionarios del país de las revoluciones, los
objetos de su interés eran múltiples y diversos tanto así que
no podía aceptar las normas de la Academia. Consideró
que, en pintura, el color era mucho más importante que el
dibujo y la imaginación que la inteligencia. Por lo tanto,
mientras David y su escuela admiraban a Poussin y Rafael,
Delacroix prefería a los venecianos y a Rubens.
7. Delacroix estaba tan cansado de los temas
cultos de la academia que en 1832 se fue al
norte de África a estudiar los coloridos y
ornamentos del mundo Árabe. De cualquier
manera, sabemos que Delacroix admiraba a un
paisajista francés de su generación, esta
persona era Jean-Baptiste Camille Corot. Este
personaje estaba decidido a plasmar la realidad
tan verazmente como le fuera posible, pero la
verdad que deseaba captar era algo diferente;
se concentraba menos en el detalle que en la
forma y la tonalidad.
8. Durante la época de la revolución de 1848, un grupo de
artistas se congregó para seguir el programa de
Constable y observar la naturaleza con ojos limpios. Uno
de ellos, Jean-François Millet, resolvió ampliar este
programa del paisaje a las figuras; se propuso pintar
escenas de la vida de los campesinos, mostrándolos tal
como eran, esto es, pintar hombres y mujeres trabajando
en el campo de tal forma que esto haya podido
considerarse revolucionario.
Lo que Courbet se propuso conseguir fue que sus
cuadros constituyeran una protesta contra los
convencionalismos aceptados en su tiempo, que sacara
al burgués de sus casillas y proclamara el valor de una
sinceridad artística sin concesiones contra el hábil
manejo de la rutinaria habilidad tradicional.
9. La deliberada renuncia de Courbet a los efectos
fáciles, así como su resolución de reflejar las
cosas tal como las veía, estímulo a muchos
otros a reírse de los convencionalismos y a no
seguir más que su propia conciencia artística.
La misma preocupación por la sinceridad, la
misma disconformidad con la insoportable y
teatral ostentación del arte oficial hizo que un
grupo de pintores ingleses emprendieran un
camino distinto. Estos pintores meditaron
acerca de las causas que habían llevado al arte
por tan peligrosa ruta; sabían que las
academias declaraban representar la tradición
de Rafael y lo que se conocía con el nombre de
gran estilo.
10. Creyendo que el arte se había vuelto insincero, por
influjo de Rafael, y que su misión era volver a la edad
de la fe, este grupo de amigos se dio a sí mismo el
nombre de Hermandad Prerrafaelista, Uno de sus
miembros mejor dotados fue el hijo de un refugiado
italiano, Dante Gabriel Rossetti, que se esforzó en ser
sencillo y sincero en su nueva concepción y cuanto
procuro hacernos ver el relato antiguo con el espíritu
más puro.
Algunos consideraron que la Hermandad Prerrafaelista
se propuso un fin inalcanzable. Admirar la fe ingenua de
los llamados primitivos (como se solía llamar entonces
a los pintores del siglo XV) es una cosa y esforzarse
uno mismo en serlo es otra, pues trata de cualidades
que ni con la mejor voluntad del mundo pueden
conseguirse.
11. Hallaron que la pretensión del arte tradicional de
haber descubierto el modo de representar la
naturaleza tal como la vemos descansaba en una
concepción errónea. Los pintores llevaban sus
modelos al estudio, donde la luz cae a través de la
ventana y empleaban transiciones graduales de la
luz a la sombra para dar la impresión de volumen y
solidez, y esto llevo a que a los alumnos de las
academias les enseñaban desde el principio este
juego de luz y sombra.
La importancia que volvió a adquirir lo que se sabía
al principio del cristianismo y en el arte medieval
hasta el Renacimiento. Incluso durante este último,
el conocimiento teórico de como aparecían
necesariamente las cosas del mundo visiblemente
aumento.
.
12. Manet negó rotundamente que pretendiera ser
un revolucionario, busco inspiración en la gran
tradición de los maestros del pincel, y explorar
el contraste entre la luminosidad del aire libre y
la sombra que diluye las figuras en el interior.
Manet llevo esta búsqueda mucho más lejos
de lo que Goya había hecho sesenta años
antes.
La idea de Monet era la reproducción de la
naturaleza debía necesariamente concluirse
sobre el terreno, no solo exigía un cambio de
costumbres y un menosprecio de la
comodidad, sino que conducía a nuevos
procedimientos técnicos.
13. Claude Monet conducía a nuevos procedimientos técnicos.
Los jóvenes paisajistas en torno a Monet encontraban una
gran dificultad al querer conseguir que sus cuadros fueran
aceptados en el Salón.
En una exposición Monet nombre a un cuadro como
“Impresión amanecer”, la cual dijo que la impresión de un
momento que realizaban los pintores, no era suficiente para
que la obra recibiera el nombre de dicho cuadro.
Monet quería dar a entender que los pintores no procedían
mediante un conocimiento cabal de reglas de su arte
El grupo de los impresionistas no fue criticada solo por la
técnica que indigno a los críticos si no también los temas que
elegidos por cada uno de los pintores.
14. En esta pintura Monet no se intereso por la estación de ferrocarriles,
lo que le atrajo fue los efectos de la luz filtrándose a través del techo
de cristal sobre las nubes de vapor, también las formas de las
maquinas y vagones.
Fue necesario Pasar algún tiempo para que el publico aprendiera a
ver un cuadro impresionista retrocediendo algunos metros y
disfrutando del milagro de verlas.
La lucha de los impresionistas se convirtió en una especie de leyenda
aurea de todos los innovadores en arte.
El artista no tenia que responder ante nadie como ante sus propias
sensaciones de lo que pintaba y como lo pintaba.
El triunfo del impresionismo fue rotundo
Un aliado de contribuyo que los hombres del siglo xix vieran el mundo
de diferente forma fue la fotografía.
La cámara portátil y la instantánea ayudo a descubrir encanto de las
vistas fortuitas y los ángulos coste.
15. -Su maestro Hokusai (1760-1849) representaría el monte Fuji
-Utamaro (1753-1806) no titubeo en mostrar algunas de sus figuras
cortadas para el margen del grabado.
-Edgar Degas (1834-1917) era algo mayor que Monet y Renoir, se
mantuvo un tanto apartado del grupo impresionista, aunque el simpatizo
con la mayoría de sus propósitos. Se intereso apasionadamente por el
diseño del dibujo.
Degas observando los ensayos tuvo la ocasión de ver cuerpos en todas
las actitudes y de todos los ángulos.
Degas para pintar sus cuadros no le interesaron las danzarinas porque
fueran bonitas ni parece que se preocupaba por sus estados de animo ya
que las observaba con la misma desinteresada objetividad.
Solo le importaba el juego de luz y sombra sobre las formas humanas y
demostró que los nuevos artistas, lejos de ser incompatibles con el dibujo
perfecto planteaban problemas que solo el artista podía resolver.
16. -Los principios esenciales del nuevo movimiento solo podían
hallar una expresión completa en la pintura, pero la escultura
pronto se lanzo a la lucha por o contra el modernismo.
-Auguste Rodin(1840-1917) fue un gran escultor francés, nació
el mismo a lo que Monet estudio apasionadamente la escultura
clásica y la de Miguel Ángel, lo cual supo ser nuevo sin
provocar un conflicto entre el y el arte tradicional.
-Los pintores no hubieran conseguido tan rápida y cabalmente
una libertad si no hubiera sido por dos aliados que ayudaron al
hombre a ver el mundo de distinta manera y fueron la fotografía
y la estampa coloreada japonesa.
-La evolución de la cámara portátil y de la instantánea comenzó
igual que empezó a aparecer de la pintura impresionista.
17. -La cámara ayudo a descubrir el encanto de las vistas fortuitas y los ángulos de visión
inesperados.
-El desarrollo de la fotografía obligo a los artistas a ir mas allá en sus experimentos y
exploraciones.
-En el Siglo XIX, la fotografía estuvo a punto de desaparecer al arte de la puntura.
-La estampa coloreada japonesa, los artistas japoneses abandonaron los temas
tradicionales del arte de lejano oriente y eligieron escenas de la vida popular como
tema para sus grabados en madera coloreados, en los que aparecen conciliadas una
gran audiencia de concepción y una maestría táctica perfecta.
18. -Rodin contribuía a afianzar el derecho que Rembrandt había
reclamado, de dar por terminado sus trabajo cuando hubiera
logrado sus objetivos artísticos.
-Mc Neill Whistle (1834-1903) fue quien tomo parte en la primera
batalla del nuevo movimiento( el movimiento expresionista)
-John Ruskin (1819-1903) fue un famoso critico que había
patriciado a Turner y a los prerrafaelistas.
-Whistler se convirtió en un adalid de llamado movimiento
estético, el cual trataba de hacer ver que la sensibilidad artística
es lo único que merece la pena tomarse en serio de la vida.
-Ambos puntos de vista crecieron en importancia a finales del
siglo XIX