TEMA: LA DEMANDA , LA OFERTA Y EL PUNTO DE EQUILIBRIO.pdf
(294)long economia de la incertidumbre
1. 1
ECONOMIA DE LA INCERTIDUMBRE.
Manfred Nolte
No son los mejores los tiempos presentes para los columnistas económicos que
han cedido el protagonismo a los comentaristas de la cosa política, que no
solamente contempla un paisaje en ascuas sino que promete mantenerlo por un
buen periodo de tiempo.
Fíjense Ustedes, en la estela de las elecciones del 20D, en la importancia que se
otorga a los contenidos de naturaleza económica a la hora de fijar las
transacciones de votos, de apoyar investiduras o asegurar un gobierno viable
para la Nación: ninguna. No está mal, dirán algunos, que la política pura se
sitúe en el centro del debate social. Llevábamos tiempo criticando el excesivo
protagonismo de lo económico y de que la ciencia inaugurada por Adam Smith
lo acaparase todo, supeditase todo a su criterio crematístico, materialista, frio y
transaccional. Pues en esas estamos. El debate político se constituye en el centro
de las preocupaciones de la sociedad. No parece al día de hoy que los candentes
temas económicos que continúan fraguándose en España se impongan a la
pugna política y que pueda sin más continuarse la senda emprendida a lo largo
de la última legislatura.
Pero guste o no, de momento el resultado electoral ha disgustado entre otros a
los inversores, Supervisores y a las grandes agencias de calificación, que señalan
la difícil gobernabilidad inmediata en España. La incertidumbre política podría
frenar la esperada mejora del rating del país hasta ‘Baa2’ con perspectiva
positiva, según indicó a Reuters el analista responsable de España de la agencia
de calificación crediticia Moody’s. Fitch, otra de las grandes agencias del rating,
señala que “el resultado no concluyente de las elecciones generales de España
aumenta los riesgos relacionados con una incertidumbre política prolongada.
Este escenario, podría llevar a revertir reformas, lo que afectaría negativamente
a la política presupuestaria y en general a los compromisos contraídos por
España con Bruselas”. También el gobernador del Banco de España ve en la
incertidumbre sobre las políticas económicas tras las elecciones del 20 de
diciembre las mayores sombras para la economía española. "A escala interna, la
principal fuente de incertidumbre está asociada al curso de las políticas
2. 2
económicas, dada la influencia que ejercen, en particular, la agenda
reformadora y la política presupuestaria sobre la confianza y las decisiones de
gasto de los agentes". Es decir, que la incertidumbre sobre cómo actuará el
nuevo Gobierno de la Nación es capital para el devenir de la economía española.
Por último, ¿qué decir de los mercados? El Ibex viene descontando ya desde
julio de este año un panorama más sombrío que cauteloso y discurre con gran
volatilidad. La prima de riesgo repunta pero es el más estable de los parámetros.
En todo caso, el Tesoro acudirá en 2016 a los mercados a por 231.000 millones
de euros. Cada punto básico(0,01%) de subida de la prima de riesgo nos supone
23 millones de euros. Una cifra a detraer de las pensiones, de la sanidad, la
educación o la protección social. Pero el tipo de nuestra deuda soberana se fija
en Frankfurt y haría falta un cataclismo para que abandonara los suelos
actuales. Resumiendo, a los mercados no les gustan los cambios ni muchos
menos los bailes electorales y menos si de las urnas no se desprenden mayorías
claras. El principal elemento de preocupación es la incertidumbre que se cierne
sobre la evolución y previsibilidad de los presentes acontecimientos políticos.
Pero ¿que es eso de la incertidumbre y su incidencia directa sobre la economía
española?
Puede interesar la distinción entre incertidumbre y riesgo. Para los mercados se
trata de dos cosas muy diferentes y estos reaccionan de distinta manera ante
uno u otro de los referidos escenarios. Mientras el riesgo es la probabilidad
estadística de una pérdida, la incertidumbre es la ausencia indefinida,
indeterminada e incalculable de un escenario de salida a la situación actual.
Ante el riesgo no sabemos lo que va a suceder pero sabemos el aspecto de su
distribución. Ante la incertidumbre no sabemos lo que va a suceder a
continuación pero tampoco sabemos el aspecto de su distribución. El riesgo en
finanzas puede compensarse con la adopción de un riesgo opuesto y comprarse
o trasladarse mediante un determinado seguro. En finanzas hay una amplia
gama de derivados que cubren riesgos. La incertidumbre nunca puede cubrirse.
De tal manera que aunque el futuro es siempre desconocido no siempre es
incierto, siempre y cuando podamos cuantificar probabilísticamente las
alternativas de riesgo.
La incertidumbre es un elemento ineludible de la existencia. Está en la misma
raíz de la finitud humana, la mortalidad y la ignorancia. El papel de la existencia
humana hay que jugarlo frente a lo desconocido, en el ámbito de la
incertidumbre, como una aventura de decisión sobre el filo de la libertad y la
necesidad. Lo grave es cuando afecta de lleno a la bonanza o al declive de un
País entero y con él el de sus habitantes.
Los mercados y los inversores privados o institucionales detestan la
incertidumbre pero asumen riesgos de acuerdo a sus perfiles y circunstancias:
bajo riesgo con baja rentabilidad, alto riesgo con una prima alta, con una prima
adecuada.
En nuestro caso: ¿cuál va a ser el resultado del presente negocio político? No
sabemos si va a resultar una coalición de derechas o va a haber una coalición de
izquierdas, pura incertidumbre. O tal vez una gran coalición PP+PSOE+Cs, eso
si que sería fantástico. O un gobierno efímero o nuevas elecciones. En este
3. 3
momento no se conoce el signo político que vaya a regir el futuro del
parlamento de la nación. Conocida la alternativa, el mercado evaluará el riesgo
de las acciones inmediatas y adoptará decisiones racionales.
¿Que hace entretanto ese mercado, o sea, la comunidad inversora hasta que se
disipe la incertidumbre? La respuesta es: recortar posiciones financieras
españolas –renta fija y variable- o frenar las nuevas hasta que escampe. Por
cierto, el mercado o la comunidad inversora no son una entelequia o los cuatro
conocidos que leen casualmente la prensa salmón. Los inversores se concentran
en las grandes gestoras globales o ocales que mueven millones de dólares en una
fracción de segundo. Para comprar o vender activos españoles.
De modo que ahí están las gestoras de valores y patrimonios a la espera de que
nuestros electos se aclaren, desaparezca la incertidumbre y se vislumbren los
riesgos oportunos. Para invertir o desinvertir en España defendiendo los
intereses de sus clientes, o sea, también los intereses de Vd. Casi nada.