1. Fuente de inspiración:
En el colegio, en la hora de francés, mi profesora tomo el tema del aborto; quede impactado de
cómo morían aquellos angelitos; por la noche mi familia estaban viendo las noticias y salió un
reportaje de un feto que había sido abandonado en un basurero y los perros habían mordido su
pequeño cuerpo y ciertas partes habían rodado a la alcantarilla, que horror no podía asimilar
que una mujer pueda hacer esto con su hijo, así que escribí este poema desahogando lo que
sentía, en ningún momento quise ser tan dramático, pero esto fue lo que sentí.
“EL ABORTO; I PARTE”
¡Déjame vivir!
Era las diez y cuarenta y tres de la mañana,
lavaron las pinzas, para la señorita Ana,
-tengo experiencias con mujeres y adolescentes,
no te asustes; el doctor le dice a su paciente,
y en el vientre, aquella semilla que iba creciendo,
se aferraba a la vida, el angelito diciendo:
Dime el por qué mami, ¿porqué con mi vida?
Debo pagar el error; y tus heridas,
que culpa tuve, en el fracaso de tu amor,
que fue marchito como una triste flor,
¿Porque dices, que soy un estorbo para tu vida?
Si mi corazón es amor para tus heridas.
¡Déjame vivir! seré tu sonrisa y tu orgullo,
Y no me arranques de ti, por el despecho tuyo.
¡Bastardo! porque me tratas así madre,
si tengo tu sonrisa y la atractiva mirada,
que un día observó, al desgraciado de mi padre,
cuando lo abrazabas perdida y enamorada.
mami, no comprendo porqué él fingió amarte,
¿Y por qué con mi vida debo pagarte?
Y dígame porqué, porqué me están haciendo esto,
¿Soy un producto de la inmadurez? ¡Un accidente!
Papi, mami los amo, porqué me dicen esto,
Madre que no te importe el ¡que dirán de la gente!
Yo quiero ser tu orgullo y tu alegría,
la envidia del mundo y el resplandor del día.
mami ¡no! no lo permitas, tengo mucho miedo,
te estoy escuchando ¡No me aborte! te amo y te quiero.
Autor Leonardo Barmontec

2. Se escucha el ruido de las pinzas ¡que horror!
Yo quiero darte lo que él nunca te dió,
por eso madre, no lo permitas por favor,
yo quiero entregarte el amor de mi corazón.
¡Ay! que me están haciendo, esto duele por favor,
auxilio que pare, no soporto este dolor.
Se cae por pedazos mi rostro, me duele el cuerpo,
crujen los cartílagos y mis pequeños huesos.
¡Esto duele! ¡Que pare ya! ¡No quiero morir!
¡Mami auxilio! ¡Mami Ten piedad! ¡Quiero vivir!
¡Mami Dime porqué! ¡Dame una razón!
Dime que me amas, con todo tu corazón…
Esto duele, esto me duele ¡este dolor lo lucho!
Aunque me pagues de esta forma, te quiero mucho.
Ahora estoy agonizando, no siento ni los brazos,
pero mi corazón, anhela darte un abrazo,
oh te amo madre, aunque me arrojes a la basura,
y los perros me devoren, te doy mi ternura,
mi corazón llora y el cielo llora conmigo,
recuerda que donde estés, siempre estaré contigo.
Y si tu fría conciencia, te causa pesadilla,
que mi cuerpo halla rodado por la alcantarilla,
no…no te preocupes madre, que te sigo amando,
¿Por qué no tuve la oportunidad de crecer?
¿Por qué no tuve la oportunidad de nacer?
Oh ¿qué es esta luz? chao mami, Dios me esta llamando,
le rogaré que tenga piedad de ti,
aunque tú, no la hayas tenido por mí…
¡DILE NO AL ABORTO!
Autor Leonardo Barmontec